Mahón (Menorca), 1 abr (EFE).-
82 - Llanera Menorca (21+24+18+19): Krstic (19), Stojic (6), Beric (3), Moss (12), Eley (8) -cinco inicial-, Reynés (-), Yáñez (14), Miguel (14) y Kornegay (6).
75 - Alta Gestión Fuenlabrada (21+17+28+9): López (12), Solana (7), Blanco (10), Guardia (19), Wideman (14) -cinco inicial-, Vitols (3), Strong (-), García (2) y Sánchez (5).
Arbitros: Martín Bertrán, Conde y Cardús. Sin eliminados.
Incidencias: encuentro correspondiente a la vigésimo sexta jornada de la primera fase de la Liga ACB 2005-06 disputado en el Pabellón Menorca ante unos 5.250 espectadores.
Comentario:
El Llanera Menorca arrancó un resultado de gran trascendencia para sus aspiraciones de mantener la categoría en su primera temporada dentro de la Liga ACB, en la que ahora, tras derrotar al Fuenlabrada, ha abandonado, al menos temporalmente, las posiciones de descenso.
La presión no pudo con el conjunto balear en los momentos decisivos del choque, ante las situaciones más difíciles para los hombres de Curro Segura como la lesión del alero serbio Miroslav Beric en su debut ante la afición menorquina.
El jugador sufrió una rotura de fibras en la pierna izquierda cuando aún no había concluido el primer cuarto, no regresó al parqué y, según las primeras estimaciones, podría estar de baja durante un periodo de dos o tres semanas.
El Llanera superó este contratiempo a fuerza de carácter y precisión en las posesiones que marcaron el desenlace final del encuentro. También siguió esa vía para remontar un 0-5 inicial, colocarse por delante y acabar el primer cuarto en pie de igualdad con los madrileños (21-21).
Lo mejor de la tarde para los locales ocurrió en el segundo cuarto, lapso que registró la máyor ventaja del choque tras un triple de Alberto Miguel (38-27). El escolta y su compañero Nacho Yáñez sostuvieron al Menorca en medio de un ambiente de gran tensión ambiental que el estadounidense Bud Eley olvidó para fajarse en las zonas.
El Fuenlabrada se retiró en el descanso siete puntos por detrás del cuadro menorquín (45-38). El tercer tramo, como en otras ocasiones, fue un mal trago para los baleares. El Fuenlabrada se llevó ese parcial por 18-28 ante un adversario ciego en ataque y debilitado por sus numerosas pérdidas de balón.
Sin embargo, la gran dirección del croata Vladimir Krstic, que además anotó diecinueve puntos y fue el máximo realizador del bloque insular, condujo a los baleares en medio de la tempestad.
El periodo que restaba fue dramático. Todas las posibilidades de victoria exigían tranquilidad a los dos equipos, sobre todo a los de casa que juegan con la enorme presión que supone la amenaza del descenso. El estadounidense Chris Moss surgió en esa fase, igual que Saúl Blanco en las filas madrileñas, para aumentar la emoción. Ahí decidió la determinación menorquina para decantar el resultado en un trabajo colectivo que, por ahora, saca al Llanera de los puestos de descenso a la LEB. EFE
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