Hasta hace diez años, lo normal era que las municipalidades ofrecieran de manera directa el servicio de recolección de basura.
Sin embargo, el panorama ha cambiado. Ahora, la empresa privada gana terreno debido a la crisis que sufren los cantones para recoger y disponer de la basura.
El Código Municipal permite que los ayuntamientos brinden el servicio mediante concesión.
Al menos, treinta gobiernos locales aprovechan ese sistema mediante contratos.
Las compañías Empresas Berthier Ebi de Costa Rica (EBI) y WPP son los dos grupos que mayor avance han logrado en el país.
"La recolección y el tratamiento de los desechos sólidos es de los servicios más baratos que ofrece el municipio. Los fondos que se asignan son insuficientes y conducen a que los servicios sean deficitarios", explicó Rodolfo Castrillo, gerente de Proyectos de WPP.
Juan Vicente Durán, gerente general de EBI, considera que el Estado debe de estimular la inversión de la empresa privada en esa área.
"La empresa privada es la única que dispone de la capacidad suficiente para invertir recursos y administrar eficientemente rellenos mecanizados", indicó Durán.
Sin embargo, no todos los gobierno locales pueden ofrecer ese servicio debido a que representa una alta inversión.
Miguel Quirós, alcalde de Siquirres, opinó que el costo de $15 por tonelada es muy alto. Este cantón tiene cerrado su botadero desde el 29 de marzo.
EBI tiene a su cargo el parque de Tecnología Ambiental Uruka en San José. WPP opera el relleno Los Mangos en Alajuela, La Pampa en Carrillo de Guanacaste y Los Pinos en Navarro, en el distrito de Dulce Nombre, Cartago.