Hamburgo. Clasificarse a octavos de final le hubiera reportado al futbol costarricense $1,6 millones (825 millones de colones).
Esa es la cantidad que la FIFA desembolsará a cada una de las 16 selecciones que avancen a la segunda fase de este Mundial.
Una suma de tal magnitud cubriría todo el presupuesto de la Fedefut para este año. El 27 de enero pasado los asambleístas aprobaron un plan de gastos para el 2006 por $1,6 millones.
Este es el componente financiero de un fracaso que, por supuesto, va más allá de la caja registradora.
Se paga un precio también alto en el descrédito alrededor de la Tricolor y en la enorme frustración de los aficionados. Miles de ellos pagaron al menos $3 500 por acompañar a la Selección en su pobre aventura mundialista.
En todo caso, ya el balompié tico se aseguró más de $4,87 millones por los tres partidos que va a disputar en esta Copa.
Previamente estaba acordado que este dinero se reparta así: 60 por ciento para las ligas que componen la Federación (Unafut, Segunda División, futbol playa, sala femenino), 30% para premios de jugadores y cuerpo técnico y 10% para las arcas de la Fedefut.
El campeón de esta Copa del Mundo se dejará $19 millones, más del doble de los $8,2 millones que se embolsó Brasil por ganar la edición del 2002.
FIFA entregará $200 millones entre las 32 selecciones. A cada una se le había entregado previamente $750 000 para que financiaran su proceso de preparación.
Este dinero se le debe liquidar al organismo rector del balompié mundial mediante comprobantes de gastos.
Gracias a sus fabulosos ingresos (patrocinios, derechos de televisión y entradas), FIFA no tendrá problema en meterse la mano al bolsillo. El año pasado, esta entidad tuvo ganancias por $145 millones, según la agencia EFE.