El eco de los tambores que acompañaban las marchas por el Día de la Independencia llenaban de ruido el Eladio Rosabal Cordero.
Pero adentro no había futbol. El Herediano se fue a entrenar a una cancha alterna, a puerta cerrada, y protegió con inquebrantable silencio la privacidad de esta sesión de práctica.
El gerente, Juan Luis Hernández, no quiso detallar las actividades del plantel, ni su paradero, a dos días del choque ante la Liga.
"Son tácticas de guerra. El clásico provincial desde muchos días antes empieza calentar el ambiente y se acude a todo tipo de estrategias" admitió el español.
Hernández aseguró que le han brindado las mejores condiciones de trabajo al cuerpo técnico de cara a este partido.
“Este es un momento en que necesitamos concentración. Es uno de los juegos más esperados, por la histórica rivalidad” agregó.
El cuadro rojiamarillo dedicó parte del tiempo en los últimos días a estudiar su oponente. No obstante, Hernández también confía en que la química entre jugadores y cuerpo técnico les permita salir con un resultado positivo del reducto manudo.