Maipú, Argentina. Reuters. Néstor Kirchner y Michelle Bachelet dieron ayer el banderazo para que Argentina y Chile vuelvan a estar unidos por un ferrocarril, en un acto que también intentó reconciliar a ambos gobiernos tras meses de tironeos por conflictos energéticos.
El proyecto del tren que atravesará la Cordillera de los Andes es considerado clave, dado que el 90% del comercio bilateral de bienes cruza por un paso terrestre que queda inutilizado durante semanas todos los inviernos por la acumulación de nieve.
"Si Dios quiere, cuando chilenos y argentinos nos encontremos para realizar las celebraciones conjuntas del bicentenario, habremos hecho nuevamente realidad el sueño de ver cruzar por esta majestuosa Cordillera de los Andes el tren transandino", dijo Kirchner.
El mandatario argentino dijo en su discurso que no es fácil integrarse, pero que ambos países están dispuestos a ir resolviendo todos los temas de controversia de intereses que puedan tener.
Por su parte, la presidenta chilena señaló que durante la reunión de más de una hora de duración los dos mandatarios revisaron todos los temas de la agenda.
“La relación entre dos jefes de estado debe ser de manera franca, de manera honesta, abierta, con la verdad; y esa es la manera en que nos entendemos los dos presidentes”, señaló a su regreso a Chile.
El encuentro entre ambos mandatarios fue el primero tras el conflicto que estalló cuando Argentina elevó el precio del gas natural que le exporta a Chile para compensar un aumento similar que aplicó Bolivia al que le vende a Argentina.
Según el gobierno chileno, el aumento fue mayor al que habían acordado una semana antes ambos presidentes, lo que provocó el enojo de Bachelet y un intercambio de cartas entre ambos mandatarios cuyo contenido no fue revelado.
De vuelta. Durante el anuncio del relanzamiento del ferrocarril, que comenzó a funcionar en 1910 y hace más de 20 años que quedó desactivado, Kirchner detalló que se invertirán $72 millones para las obras del lado chileno de la frontera y $100 millones en Argentina.
A ese monto deben sumarse $128 millones de inversión en equipamiento. Una vez terminado el proyecto, el tren podrá transportar 4 millones de toneladas anuales de mercadería.
Las obras serán adjudicadas en mayo del 2007, comenzarán a levantarse en setiembre de ese mismo año y se espera que concluyan en diciembre del 2009.