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Grupos de pequeños agricultores mantienen la oposición a lo negociado en el campo de la protección a productos agroquímicos en el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana, porque temen una fuerte alza en los costos de producción.
La práctica de utilizar agroquímicos genéricos se generalizó entre los pequeños agricultores.
La razón es que el precio de estos alcanza el 50%, en promedio, del valor de los de marca, argumentó Guido Vargas, secretario general de la Unión Nacional de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Upanacional).
El sector teme que los agricultores no puedan utilizar un producto nuevo contra una plaga o enfermedad específica que haya desarrollado cierta resistencia a los agroquímicos tradicionales.
Quienes puedan hacerlo deberán duplicar al menos el costo de control sanitario, por el alto precio de los productos de marca, aseveró el dirigente Vargas.
El TLC protege durante 10 años los denominados datos de prueba, que son los elementos de la investigación que garantizan la efectividad del producto.
Esto implica que durante ese lapso nadie puede fabricar un producto genérico y comercializarlo.
El acuerdo del TLC no afecta lo existente hasta la fecha en que entra en vigencia. El mercado mantendrá los genéricos que se vendan hasta ese momento.
El posible impacto se dará posterior a la vigencia del tratado.
No más. Vargas argumentó que la legislación sobre patentes protege durante 20 años los derechos de un producto y que ese es tiempo suficiente para recuperar la inversión realizada para investigar.
Por lo tanto, añadió, no se justifica "agregar" más años de protección a los empresarios.
Pero la protección de los datos de prueba para agroquímicos funciona de manera paralela e independiente a las patentes. Por lo tanto, no se suman los 10 años de este caso a los 20 años de protección de la patente que ya existe en la Ley.
Susana Vásquez, asesora en materia de propiedad intelectual del Ministerio de Comercio Exterior, explicó que generalmente la protección de la patente funciona paralela a la de los datos de prueba. No significa que el fabricante pueda agregar los dos plazos.
La patente se presenta en el año cero o cuando se inicia la investigación de un nuevo producto. A partir de aquí corren 20 años. Unos 8 años más tarde, cuando la investigación permite contar con un producto, se solicita la protección de 10 años para los datos de prueba.
No obstante, Upanacional y otras organizaciones agrícolas se oponen al trámite del TLC con Estados Unidos. Esta decisión –detalló Vargas– no tiene un origen ideológico, sino que se basa en que “el TLC como está ahora perjudicará a la agricultura”.
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