Mogadiscio. Reuters. Hombres armados asesinaron ayer a una monja italiana en Somalia, en un ataque que generó especulaciones inmediatas con el enojo en el mundo musulmán por las últimas declaraciones del papa Benedicto XVI sobre el Islam.
El guardaespaldas de la monja católica también murió a balazos en el último ataque contra personal extranjero en el inestable país del este africano.
Los asesinatos fueron un golpe para el intento del nuevo gobierno islámico de Mogadiscio de probar que había pacificado una de las ciudades más caóticas del mundo desde que comenzó a perseguir a los grupos insurgentes en junio.
El guardaespaldas murió instantáneamente, pero la monja, de la orden de los Misionarios del Consuelo, fue llevada de inmediato al quirófano tras recibir varias balas en pecho, estómago y espalda.
"Murió en sala de atenciones del hospital", dijo el médico Ali Mohamed Hassan. “Fue abaleada afuera del hospital cuando iba para su casa, justo cruzando la puerta”.
Una monja de la orden de los Misionarios la identificó como la hermana Leonella Sgorbati, nacida en 1940 en Piacenza, norte de Italia. Estaba en Somalia desde el 2002.
El gobierno italiano dijo que la monja asesinada y otras dos que trabajaban con ella habían sido aconsejadas varias veces para que se vayan de Somalia.