Debido a los elevados costos del mantenimiento de las imágenes, se ha restringido su acceso solo para las personas registradas en PrensaCR.
En caso de poseer una cuenta, hacer clic en “Iniciar sesión”, de lo contrario puede crear una en “Registrarse”.
Con el fin de conocer más sobre las explosiones solares y sus efectos en los planetas que rodean al astro, arrancará hoy la misión Solar B , una colaboración científica entre Japón, Gran Bretaña, Estados Unidos y Europa.
Las erupciones o explosiones solares son enormes escapes de energía en la atmósfera del Sol que, además de modificar la superficie de esta estrella, afectan a los planetas y objetos espaciales que existen a su alrededor.
El satélite de observación Solar B será lanzado hoy a las 21 horas GMT (3 p. m. hora de Costa Rica) desde el Centro Espacial Uchinoura, que es una plataforma de la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA).
Solar B estudiará cómo se genera y se libera la energía desde la fotósfera (la más fría de las capas internas del Sol, pero con más energía) hacia la corona, la más ardiente y externa de las capas de esta estrella.
Se sabe que unos de los efectos de estas erupciones son las interrupciones en las comunicaciones en nuestro planeta; sin embargo, aún no existe mayor información sobre otras consecuencias que podrían producir estos eventos en el resto del sistema solar.
Solar B también registrará cómo participan los campos magnéticos del Sol en la aparición de las erupciones solares.
Los campos magnéticos son fuerzas que las grandes masas, como el Sol y la Tierra, proyectan a su alrededor influyendo en todos los objetos que las rodean.
Los campos magnéticos del Sol son casi dos veces más fuertes que el promedio del magnetismo de la Tierra y producen cambios incluso en los alrededores de Plutón, uno de los cuerpos celestes más remotos del sistema solar.
Sofisticación. El Solar B llevará tres instrumentos especialmente diseñados para analizar las explosiones solares.
La más moderna de estas herramientas es el espectómetro de imágenes ultravioletas (EIS), que fue construido por el Laboratorio de Ciencia Espacial Mullard en Gran Bretaña.
Ese es un aparato que analiza el espectro característico de un movimiento ondulatorio, como los rayos gamma y las ondas sonoras.
El EIS medirá la velocidad del viento solar (flujo de partículas solares) y diagnosticará la temperatura y densidad de la materia que constituye al Sol, o plasma solar.
Los otros dos "tripulantes" que viajarán en el Solar B serán un telescopio óptico y uno de rayos X.
El primero fue desarrollado por el Observatorio Astronómico Nacional de Japón y medirá hasta los más pequeños cambios que se producen en los campos magnéticos del Sol, durante y después de las explosiones solares.
Mientras, el telescopio de rayos X será encargado de captar las imágenes de la corona solar, donde se perciben las erupciones.
Ese telescopio fue construido por el Observatorio Astrofísico Smithsoniano en Cambridge, en el estado de Massachusetts (Estados Unidos), en colaboración con la agencia japonesa JAXA.
Mediante la combinación de las observaciones de los telescopios óptico y de rayos X del Solar B, los científicos podrán estudiar cómo los cambios en los campos magnéticos del Sol dan lugar a las explosiones solares.
Luego de despegar hoy desde Japón, el Solar B se pondrá en órbita alrededor del Sol y permanecerá allí hasta el año 2009.
Este documento no posee notas.