Debido a los elevados costos del mantenimiento de las imágenes, se ha restringido su acceso solo para las personas registradas en PrensaCR.
En caso de poseer una cuenta, hacer clic en “Iniciar sesión”, de lo contrario puede crear una en “Registrarse”.
Manchester, Inglaterra. AFP. El ministro de Finanzas, Gordon Brown, presentó ayer su visión de la Gran Bretaña post-Tony Blair en un discurso ante el Congreso Laborista, en Manchester (noroeste de Inglaterra), en el que por primera vez asumió el tono de claro sucesor del Primer Ministro.
Su discurso, no obstante, se vio opacado por el revuelo causado por un comentario atribuido a Cherie Blair, esposa del Primer Ministro, acusada de tratar a Brown de mentiroso mientras este rendía homenaje a su marido. Cherie Blair niega haber hecho tales comentarios.
Ante miles de delegados laboristas que llenaron el inmenso salón sede de esta conferencia, Brown pronunció un discurso de unidad, pero dejó claro que se ve como el mejor candidato para enfrentar al joven líder de los conservadores, David Cameron, al que los sondeos señalan ahora como el preferido.
"Gozaría la oportunidad de enfrentar a David Cameron y al Partido Conservador", afirmó Brown, sugiriendo que el líder “tory”, de 39 años, no tiene la experiencia ni lo que se precisa para dirigir el destino de Gran Bretaña, y que él es el mejor candidato para demostrar esas carencias.
La intervención, teñida de emoción, e incluso de pasión, algo nada común en Brown, que es considerado un intelectual brillante pero poco carismático, concluyó con una ovación de pie que se prolongó durante casi tres minutos.
Este documento no posee notas.