Dallas, EE. UU. AP. Los meteorólogos vaticinaron más tormentas fuertes en la región de las planicies de Estados Unidos durante el fin de semana, después de dos días de precipitaciones copiosas e inundaciones que dejaron al menos cinco muertos y una persona desaparecida en el centro de Texas.
El gobernador Rick Perry ordenó que los soldados de la Guardia Nacional fueran emplazados en Waco, Austin y San Antonio durante el fin de semana que se extenderá hasta el lunes por el feriado del Día de los Caídos.
Cerca de Fredericksburg, las autoridades buscaban a un hombre cuyo vehículo fue arrastrado durante las tormentas, que descargaron cerca de 20 centímetros de lluvia en el área del centro-sur de Estados Unidos desde el jueves.
El teniente Jim Judd, de la policía del condado de Gillespie, expresó que unas 30 personas salieron viernes a buscar a Edgar Garcia, de 22 años.
El joven había llamado previamente a su madre después que quedó varado cuando manejaba un vehículo en medio de la tormenta.
Entre tanto, tres personas murieron en Killeen, dijo la Policía. Los cadáveres de dos niños, de 5 y 6 años, aparecieron el viernes temprano en una camioneta deportiva sumergida bajo el agua.
Los niños se trasladaban el jueves con su madre y dos hermanos, cuando el vehículo se salió de la carretera y cayó a un barranco.
Víctimas. Los rescatistas salvaron a la mujer y a dos de sus hijos, pero el agua avanzó rápidamente y los rescatistas no pudieron ayudar a los otros dos niños que quedaron atrapados en el vehículo, manifestó el juez de paz del condado Bell, Garland Potvin.
También en la localidad de Killeen, apareció el cadáver de un hombre de 20 años junto a una alcantarilla, dijo Potvin.
Un hombre y su esposa fallecieron el jueves en la noche cuando intentaban cruzar con su vehículo una zona inundada de las afueras de Copperas Cove, manifestó Bill Price, juez de paz del condado Coryell.