El país desaprovecha el 80% del potencial hidroeléctrico, eólico y geotérmico del que dispone para generar energía limpia y, en su lugar, produce con hidrocarburos más caros y contaminantes.
Según estudios del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), el país tiene recursos naturales para generar 7.047 megavatios (MW), pero apenas está explotando el 20% (1.521 MW).
La mayoría de la generación (1.290 MW, igual al 59% de la capacidad instalada del país) proviene de plantas hidroeléctricas, seguidas por 157 MW de plantas geotérmicas y 74 MW de plantas eólicas (viento) y la biomasa (bagazo).
Sin embargo, el Plan de expansión de la generación eléctrica 2006-2025 establece que hay potencial hidroeléctrico para producir 5.087 megavatios adicionales y otros 439 MW en proyectos geotérmicos, eólicos y biomasa.
Carlos Obregón, subgerente de Electricidad, reconoció que el fracaso de grandes proyectos de energía limpia como la hidroeléctrica Pacuare (158 MW, congelada desde el 2005) y el embalse de Boruca (593 MW, descartado en julio del 2006), obligó al ICE a depender cada vez más de la generación térmica.
Precisamente, la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) confirmó la semana pasada que el ICE consumió 40.042 barriles de búnker de enero a mayo del 2007.
La cifra es un 93% más alta que de enero a mayo del 2006, cuando se facturaron 20.706 barriles.
Comparando los mismos períodos, también se registró un aumento del 56% en el consumo de diésel, que pasó de 598.000 barriles en el 2006 a 934.000 este año.
Justificación. Carlos Obregón alegó que la restricción presupuestaria que sufrió el ICE en las últimas administraciones limitó su capacidad para explorar y explotar fuentes de energía renovable.
"Hemos tenido limitaciones económicas en la realización de estudios técnicos para proyectos hidroeléctricos y geotérmicos, que de por sí se llevan varios años, la inversión es muy alta", agregó el subgerente.
Indicó que el recorte financiero del ICE empezó a resolverse en octubre, cuando un decreto del Poder Ejecutivo levantó el tope presupuestario y autorizó trámites de contratación expeditos.
Aunque el retraso en proyectos hidroeléctricos como Pirrís (en la zona de Los Santos, San José) favoreció el consumo de energía térmica, Obregón justificó el uso de combustibles.
Argumentó que son necesarios para mantener la estabilidad del sistema energético, pues las otras fuentes de energía dependen de las condiciones climáticas.
Apertura pendiente. Roberto Dobles, ministro del Ambiente y rector del sector energético del Gobierno, aseguró que la firma de nuevas alianzas entre su despacho y el ICE permitirán explotar energía geotérmica en la periferia de los parques nacionales.
Por ahora, el ICE está explorando un sector conocido como Borinquen (en Liberia), cerca del Parque Nacional Rincón de La Vieja, donde podría extraer vapor.
Dobles dijo que primero deben explotarse terrenos fuera de las áreas silvestres protegidas. Por eso, por ahora no tiene intención de convocar un proyecto ley que pretende abrir los parques nacionales para generar energía.
“No descarto que a futuro se pueda hacer (abrir los parques), pero esa es una decisión de país”, donde se valoren condiciones de necesidad energética, pero se respeten los ecosistemas, dijo. Colaboró la redactora Mercedes Agüero.