Moscú. DPA. Bajo estrictas medidas policiales, cerca de 2.000 personas se manifestaron ayer en San Petersburgo contra la política del presidente ruso, Vladimir Putin.
En la concentración de la oposición que lidera el excampeón mundial de ajedrez y líder opositor, Garri Kasparov, se pidió "otra Rusia" y una “Rusia sin Putin”, como relataron testigos. Las autoridades hablaban de 500 asistentes.
“La gente ha vencido sus miedos”, declaró Kasparov a la radio Echo Moskvi. En abril, las fuerzas de seguridad disolvieron violentamente marchas similares en Moscú y San Petersburgo.
En esa ocasión, la actuación policial fue criticada en Occidente. Pero ahora, según el propio Kasparov, el gobierno tuvo que hacer concesiones y respetar las leyes.
También a diferencia de lo ocurrido en abril, las autoridades permitieron que la marcha atravesara el centro de San Petersburgo, aunque la restringió a las aceras. La seguridad de la concentración fue controlada solo por la policía regular, mientras que la unidad de intervención OMON permanecía preparada en las calles aledañas.
En Moscú la oposición convocó una nueva manifestación de disidentes para mañana.