El sector bananero nacional revitalizará la inversión en fincas para incrementar la producción por hectárea y no elevará mucho el área sembrada, tras la firma del acuerdo con la Unión Europea (UE).
Luis Umaña, vicepresidente ejecutivo de la Cámara Nacional de Productores Independientes de Banano (Anaproban), explicó que la tranquilidad y estabilidad de la industria nacional, a causa del acuerdo, se debe manejar con cuidado.
El país, agregó, buscará un equilibrio y no abogará por aumentar el área sembrada sin control, porque se puede saturar el mercado y la sobreoferta bajará los precios.
El ministro de Comercio Exterior (Comex), Marco Vinicio Ruiz, explicó que el principal impacto de la reducción del arancel en Europa será en la seguridad de las inversiones. Ya se conocen claramente las condiciones y en esas circunstancias los empresarios decidirán si invierten o no, añadió Ruiz.
Costa Rica apostará más por aumentar el rendimiento por área, en lo cual está entre los primeros del mundo, adelantó Jorge Sauma, gerente general de la Corporación Bananera Nacional (Corbana).
El país, sin embargo, tiene margen para incrementar su área sembrada, actualmente en 45.000 hectáreas, entre un 5% y un 8%, dijo Sauma. Esto significaría entre 2.250 y 3.600 hectáreas adicionales.
Compañías rusas y francesas están interesadas en cultivar la fruta en Costa Rica. Una de origen francés negocia actualmente la compra de un bloque de 900 hectáreas en la zona de Batán.
También hay interés de firmas comercializadoras italianas por comprar fruta costarricense.
Umaña dijo que este interés abre nuevas opciones para los bananeros independientes, quienes deben vender su fruta a comercializadoras porque no tienen exportaciones directas.
El creciente interés por la fruta nacional, agregó, se debe a su calidad, a la mayor cercanía con los mercados y a las condiciones de producción amigables con los trabajadores y con el ambiente.
La actividad bananera da empleo a unos 40.000 trabajadores, en 127 fincas activas y genera unos $670 millones anuales.