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Arias ve cerca la hora de impulsar reforma tributaria

El mandatario sostiene que va a ser ‘difícil’ preservar el superávit (fiscal) que tenía el país. Por eso advierte que Costa Rica tendrá que endeudarse para conseguir el dinero que requiere el Estado para atender los programas sociales.

Con la agenda del TLC casi en la puerta de salida del Congreso, ahora se asoma la posibilidad de reformas a las leyes de impuestos.
Así lo ve el presidente Óscar Arias, a pesar de que su ministro de Hacienda, Guillermo Zúñiga, dijo el miércoles que "este no es el momento".
Arias habló de ese y otros temas el miércoles en el vuelo entre Brasilia y Sao Paulo, tras una cita con su colega Luiz Inácio Lula da Silva
El fondo del diálogo con La Nación fue la dificultad económica por la crisis mundial que incluso, según Arias, obligará al Gobierno a repensar su intensión de evitar el endeudamiento externo.
Presidente, la inflación está creciendo, las tasas de interés están aumentando, hubo mucha gente que se endeudó en dólares y ahora el panorama cambió ¿Cómo ve la situación económica del país? ¿le preocupa?
Sí me preocupa, porque llevábamos un crecimiento de la economía que nos permitió mejorar sustancialmente indicadores sociales, que me llenaban de orgullo, y esas mejoras van a disminuir, e incluso, se pueden deteriorar algunas de las cosas buenas, que logramos alcanzar.
¿Como reducir la pobreza?
Ahora, Costa Rica está mejor preparada para enfrentar esta crisis que muchos países en América Latina, porque tenemos 60 años de no tener ejército y uno no encuentra los gastos en salud y educación que tiene Costa Rica en otros países (…) O sea, tenemos cómo mitigar los efectos de la crisis en la gente más humilde.
“Pero que esta crisis va a afectar a todos los países del mundo, eso es indiscutible.
“Precisamente, cómo mitigar esto en nuestros países lo hablaba con el presidente Lula.
“Brasil es el único país de América Latina que tiene una carga tributaria de país rico: 36% del PIB.
“De manera que tiene un Estado poderoso, con recursos para poder paliar el efecto de las crisis sobre la gente más humilde”.
En el caso de Costa Rica, ¿tenemos algún colchón para fortalecer los programas sociales?
Bueno, yo se lo dije a su periódico al cumplir dos años (de Gobierno): tenemos que olvidarnos de que el superávit que teníamos lo vamos a poder preservar.
“Vamos a tener que endeudarnos para conseguir el dinero para gastar en estos temas, y yo no descarto la posibilidad, después de que terminemos con la agenda complementaria (del TLC), de una reforma tributaria que nos dé más recursos para gastar en la gente que requiere del Gobierno, que son los pobres”.
Con lo difícil que es negociar en la Asamblea Legislativa y con un tema tan sensible como este, ¿no sería aspirar a algo inalcanzable?
Bueno, cuando a mí se me pregunta cuál es el mayor problema de Costa Rica yo digo la ingobernabilidad, la incapacidad para llegar a acuerdos y para que coincidan los diferentes partidos. Y la actitud mal entendida de que la oposición debe oponerse a todo.
¿Se ha encontrado alguna fórmula para sustituir el impuesto que se quitaría al diésel?
No se ha encontrado, y va a ser difícil encontrarlo, porque poner de acuerdo a las distintas fracciones legislativas no es nada fácil. (Las fracciones acordaron el jueves rebajar el diésel solo al sector del transporte público).
¿Hay un ‘plan B’?
Sí. El ‘plan B’ sería que se quede el impuesto al diésel y rebalancear los futuros ajustes por medio de Aresep, de forma que en delante, no se aumente el precio al diésel y compensar con alzas a la gasolina.
¿Sería volver a los subsidios al diésel como antes?
Sí, sería así. Sería el mal menor.
¿La situación económica de Recope le preocupa?
Sí, sí me preocupa, pero en las últimas semanas ha bajado el precio del petróleo. Es muy difícil predecir qué va a pasar en un futuro, pero nosotros no vamos a permitir un desabastecimiento.
¿Se podría pensar en medidas más fuertes para disminuir el consumo de combustibles?
La restricción vehicular ha funcionado y para mí lo importante es que tiene un gran apoyo de la opinión pública. Lo que me parece imperdonable es que no nos hayan permitido poner en ejecución las líneas intersectoriales.
“Que el interés privado prime sobre el interés público es algo que considero lamentable y posiblemente esa sea la mayor preocupación que tengo en mi cabeza hoy en día. Restringirle a los ciudadanos que no utilicen su carro y no ofrecerle alternativas de un transporte público más eficiente es un castigo que el pueblo de Costa Rica no se merece”.
¿Se descarta vía decreto?
Está descartado, porque tanto la Procuraduría, como algunos asesores, nos han dicho que ese no es el mejor camino.
¿Qué opciones están viendo?
Estamos estudiando eso, pero prefiero no entrar en detalle.
¿No cree que tal vez el proceso se precipitó para tener una respuesta rápida?
Bueno, es que soy muy impaciente y los costarricenses deberían ser más impacientes.
¿Y el tren a Heredia?
Vamos a tratar de que esté para diciembre, pero si no es para diciembre, que sea para febrero o para marzo.
¿Qué se lleva de la reunión con el presidente Lula?
A mí me quedó una impresión muy favorable de Lula. Lo había escuchado conversar de temas muy diversos, muy distintos.
“Sin embargo, no había tenido la oportunidad de hablar largo y tendido como la tuve hoy (miércoles). Creo que es un hombre que ha crecido en experiencia y en madurez en el ejercicio de la presidencia de la República.
“En ningún momento uno siente que esta hablando con un líder sindical, es una persona que tiene muy claro el papel de Brasil en el futuro. Que tuvo la sabiduría de preservar el legado de Fernando Henrique Cardoso, quien, sin duda, marca un hito en el desarrollo reciente de Brasil, no solo porque sea mi amigo, sino porque dejó una huella muy importante por la Presidencia de Brasil.
“Pienso que Brasil es una nación con piloto automático, sabe lo que quiere y sabe hacia dónde va”.
¿Por qué pasó tanto tiempo para este acercamiento?
Pienso que Brasil apostó a poner casi todos sus huevos en la canasta de Mercosur y, la verdad, este es un mercado demasiado pequeño para Brasil.
“Ahora Brasil es una economía mucho más cerrada que la nuestra. Recuerde que en Costa Rica el comercio de bienes y servicios representa casi el 100% de nuestro PIB, ese no es el caso de Brasil y de Estados Unidos, economías mucho más cerradas que la nuestra”.

  • POR Mercedes Agüero R. / maguero@nacion.com
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