Londres. DPA, EFE. El nuevo viceprimer ministro británico, Nick Clegg, aseguró ayer que la nueva coalición de gobierno reducirá las fronteras del Estado en lo que llamó "una revolución del poder".
En un acto con estudiantes en Londres, Clegg, líder del Partido Liberal Demócrata y socio de gobierno del Partido Conservador liderado por David Cameron, afirmó: “Es tiempo de una aproximación a gran escala, un big bang , hacia la reforma política”.
Clegg enumeró los acuerdos pactados con los tories para esta nueva legislatura: la introducción de una legislatura fija en el Reino Unido, una Cámara de los Lores elegida por completo democráticamente y un referéndum para cambiar el sistema de votación.
Para Clegg, estos planes representan “el cambio más significativo de la democracia británica desde la Ley de la Gran Reforma de 1832”, cuando más ciudadanos tuvieron el acceso al voto.
El Gobierno también anulará los planes del anterior ejecutivo laborista de introducir un documento de identificación para todos los británicos y un pasaporte biométrico. El uso de cámaras de vigilancia se someterá a una mayor regulación y habrá limitaciones sobre el tiempo que se podrá almacenar el ADN de ciudadanos inocentes.
“El Reino Unido fue una vez la cuna de la democracia moderna. Ahora somos, en algunos aspectos, el país más centralizado de Europa”, aseveró Clegg.
El viceprimer ministro subrayó ante su audiencia que el nuevo gobierno pretende transformar la política, “así el Estado tendrá menos control sobre ti y tú tendrás más control sobre el Estado”.
Gran parte del programa electoral de los liberal demócratas, sobre todo los relacionados con libertades civiles, fueron adoptados por la coalición de gobierno. Algunos analistas políticos aseguran que los debates en el Parlamento, para aprobar la proyectada reforma política, serán la auténtica prueba de fuego para el nuevo gobierno.