Naciones Unidas. EFE La ONU pidió ayer a la comunidad internacional $459 millones para atender en parte a los 14 millones de afectados por las inundaciones que sufre Pakistán.
Para la organización internacional la ayuda más indispensable para las familias pakistaníes consiste en alimentos, agua potable, material para cocinar y potabilizar agua, servicios sanitarios de emergencia, mosquiteros, tiendas de campaña entre otros.
Según explicó ayer el subsecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios, John Holmes, con esos fondos la organización tratará de paliar en los próximos noventa días los efectos de las lluvias que hasta el momento causaron la muerte de más de 1.300 personas.
El objetivo es, según detalló Holmes a los países donantes reunidos en la sede de Naciones Unidas, apoyar al Gobierno de Pakistán en su tarea de atender cuanto antes las necesidades de los afectados, empezando por rehabilitar sus medios de vida básicos.
Pasados los tres primeros meses, la organización revisará y actualizará su plan de ayuda.
"Queda mucho camino por recorrer para llegar a todos los afectados, pero al mismo tiempo las operaciones de ayuda de agencias de la ONU y organizaciones van en aumento", señaló el responsable humanitario del organismo.
Por el momento, la ONU, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y organizaciones no gubernamentales están planeando distribuir esfuerzos de asistencia en siete áreas del país.
Esas zonas son Baluchistán (suroeste), Punjab (la región más poblada del país, al este), las Áreas Tribales Administradas Federalmente (FATA), Gilgit Baltistán (norte), KPK (noroeste), la Cachemira administrada por Pakistán y Sindh (sudeste) .
Naciones Unidas calcula que 14 millones de personas fueron afectadas; entre ellos seis millones de niños. Al menos 1,8 millones de pakistaníes perdieron sus hogares.
Holmes dijo que las necesidades en esta emergencia son mucho mayores a las dejadas por el terremoto que afectó el país en el 2005.
Estados Unidos anunció ayer que enviaría $20 millones adicionales en ayuda humanitaria, lo que eleva a $55 millones los fondos destinados para Pakistán, aliado clave contra los rebeldes islamistas.
Según datos recientes de Naciones Unidas, las inundaciones que se desataron el 22 de julio con la llegada de las lluvias estacionales han afectado 10.680 poblaciones y 302.388 hogares.