Una fuente de la Policía iraquí explicó a Efe que dos terroristas suicidas detonaron los cinturones explosivos que llevaban adosados al cuerpo en la entrada del cuartel, situado en la zona de Al Yabesat.
Los heridos fueron trasladados a hospitales de Mosul y algunos de ellos se encuentran en estado grave.
La explosión causó importantes daños materiales en la sede policial, cuyos alrededores han sido acordonados para facilitar la investigación de las fuerzas de seguridad. Irak afronta un aumento de la violencia confesional y de los atentados terroristas, que causaron el pasado año la muerte de más de 8.860 personas, de las que 7.818 eran civiles, según un recuento de las Naciones Unidas.
Hace dos días, al menos 34 personas murieron y 150 resultaron heridas, entre ellas varios policías, en un atentado suicida perpetrado contra un puesto de control en la ciudad de Al Hila.