Guardar

Dom PAGINA LITERARIA DEL DOMINGO PESAR DE UN VIEJO FORZADO LA CONFESION DEL TULLIDO en fores DE LA HORA DEL DEL TE BIBLIOTEC COSTA NACION, RICAN (Traducido especialmente para do callado en su lugar, mirando con admiración que esta angustia Las tardes de Caracas son lin hora, pues, aunque de lejos y al tre, un dia estuvo en vena de conLA TRIBUNA)
alejarse sobre la espuma del mar, senil, me deshacía el corazón y das. Los crepúsculos duran largo paso, pueden ver a la que aman. fidencias y me abrió su corazón.
el pequeño cuerpo pardo que se llegaría hasta turbar mi sueño: tiempo; el cielo y las cosas ate Otros se paran en las esquinas Es cierto me dijo estuve Se trata de una pequeña histo resistía siempre. Ahora se encon. Si hubiera alguna manera, núan su brillo hiriente; los tintes. Otros en las ventanas, e pelar la y creo que aun estoy enamorado.
Vieta que me contó Iván una tarde traba espantosamente solo, para dije, de mandarle otro. amortiguándose con lentitud, ba pava.
No es mía la culpa. Ella es herque fue al puerto conduciendo en siempre. Gruesas lágrimas, lágri SI, respondióme Iván, habia fian la atmósfera de tonos suaves. Una mujer había, la más bella mosa; y yo tengo alma, porque no su lancha, al gran navio pronto a mas de desesperada y suprema so pensado en eso, yo también, antes El sol de ocaso pincela de áureoe de todas, que encastillada en su soy, según han dado en la flor de salir para Nueva Caledonia, un ledad le nublaban la vista mien que partiera. aunque es un poco matices la frente de las montañas hermogura y orgullosa de sí, no creer, y aun dcir, un idiota. ya cargamento de condenados.
tras el joven señor de anteojos, Alfícil. Por otra parte, sólo us vecinas; el aire se endulza; el quiso rendir a nadie su corazón. sé que haberme enamorado de En ese número se encontraba su colega de cadena, se reia por ted puede conseguir marchar al cielo viste un bello y tenue azul. Admirarla era casi un deber. ta señorita es, dada ml invalidez un penado muy viejo (setenta a que lloraba un viejo.
puerto mafiana, por la mañana, e En ventanas y balcones se api Cierto poetilla, que la echaba en algo ridiculo; pero no puedo pas hos por lo menog. que llevaba ir a bordo para buscar a ese viejo ñan hermosuras, ávidas de ver y picaflor o, como dicen otras sarme sin verla. Aquí me enconconsigo, con gran ternura, un po Ahora que el pájaro ya no exis de quien no sé ni el nombre. So de ser vistas. Las feas, por de con. partes, de Tenorio, compuso un trará usted casi todas las tardes bre gorrión en una jaulita.
tía, no quería guardar aquella lamente. eso van a encontrarlo tado, también me asoman a sus tomo de madrigales para ella: Antes, ella no se mostraba cruel, Iván, para pasar el tiempo, se jaula, construida con tanta solici chistoso.
ventanas de bala ustes. Por entre madrigales a sus ojos, madrigales sino más bien benévola conmigo puso a conversar con aquel viejo, tud para el pequeño muerto; selas rejas salen volando, a veces, sus manos, madrigales a la bo Yo le mandaba ramos de que al parecer, no tenía mala figu guía pasándosela a aquel bravo En mi interior, me divertia con ráfagas de música. La música del ca. Ella, aunque lison jeada, no le rosas, jazmines, violetas, lo mejor 23, pero que estaba unido por una marino que había escuchado BU esta idea, riéndome con esa risa país es muelle, enamorada y vo hizo caso, porque ni el poeta nl que podia encontrar. Siempre acep cadena a un señor joven, grosero historia, deseaba dejarle ese lega que casi no se advierte al exterior. luptuosa; pero no tan voluptuosa, los versos valían la pena.
taba con una sonrisa de bondad burlón, que tenia anteojos de do, antes de partir para su largo Sin embargo, no llevé a cabo tan enamorada, ni tan muelle co Sinnúmero de amadores hacían mis presentes; y yo empecé a senmiope, sopre una nariz delgada y y, último viaje.
mi proyecto. Al día siguiente, al mo esa otra armonía que se des la ronda a su puerta, o pasaban. tirme, en medio de mi infortunio, escolorida despertar, disipada la primera imprende silenciosa de los contornos de tarde por frente a su ventana. algo feliz. Luego supe que su beViejo corredor de caminos, deIván, con tristeza, había acep presión, me pareció aquello, infandel seno, de las caderas, de log Pero uno se distinguía entre nevolencia fue mofada; se hizo lenido a la quinta o sexta reinci tado el regalo, la casita vacía, til y ridiculo. Aquel pesar, eviden brazos y gangantas de casi todas los fieles de aquella diosa de car burla de su piedad, para darle dencia, por vagabundo y ladrón, para no causarle más pena a aquel temente, no era de los que se con las caraqueñas.
ne y hueso.
algún nombre a su sentimiento, y decía. Qué hacer para no robar viejo abandonado, manifestando suelan con un simple juguete. Po Como la gente es perezosa, a las Esto no corría en carretela, ni reirse de mi amor No tengo la beuando ya se ha principiado a ro desdeñar aquello que le había cos bre viejo forzado, sólo en el mun mujeres les gusta poco salir; los pasaba a pie, sino que se plantaba culpa No dije que la amaba. Pero bar y no se tiene oficio nintado tanto trabajo.
do, el más hermoso pájaro del pa hombres mismos, en vez de irse, en una silla rodante, en toda la el amor es el diablo y se le sale a guno, si la gente no nos soporta Estoy cierto, que no he sabido raíso no hubiera podido reempla ya a pie, ya en carruaje, a tomar esquina. Era un joven paralítico. uno por los ojos. Al fin le prohien ninguna parte. Es muy nece relatar esta historia con la dolo zar para el, al humilde y parduz el aire fresco a los vecinos cam Se decía de él, sin razón, que era bieron en su casa que aceptase sario el comer, no es cierto? Mi rosa y amarga pena que me fue co gorrión con el ala cortada, ali pos, o siquiera al bello jardin de fatuo; y ninguno ignoraba el mis flores. Cuando me rechazó mi ultima condena fue por un saco de contada.
mentado con el pan de la prisión, El Calvario. be pasear por las amor del infeliz.
regalo, un macito de violetas, iu.
papas que robé en un campo, con Era de noche, muy tarde, y ya que había sabido despertar lágri polvorientas calles, en coches los Yo ardi en deseos de saber qué ve que contener mis lágrimas. Es un latigo de carretero.
se acercaba la hora de irme a mas y ternuras infinitamente dul que pueden, no bien declina el pasaba en el corazón de aquel mi tonto lo que estoy confesando y No habrían podido dejarme dormir. Durante mi vida he visto ces, en el fondo de su corazón en sol, hacia las seis. Los enamora sero, a quien el infortunio baldó más tonto aun que se lo confiese a sin conmoverme morir en Francia, os pregunto, en demasiado, no durecido y medio muerto. dos, más o menos platónicos, son el cuerpo y no el alma.
usted. Pero en fin, sin alardear, fracasos pocos dolores, grandes Tes de mandarme allá lejos, tan los primeros. Casi todas la muje El tullido, el pobre, tenia el ni mucho menos, como alardean dramas. viejo como estoy. matanzas, etc. y noté PIERRE LOTI res están en las ventanas. esa pudor de su afecto; mas, a la pos los poetas, de sus infortunios amo muy feliz de encontrar a alrosos, bien puedo hacerle a usted guien que risiese escucharlo comesta confidencia. Al fin gomos topasivamente, mostró después a dos del mismo barro miserable y Iván, lo que tenia de más preciosensible. En la noche lloré; esa 20 en el mundo: la pequeña jaunoche juré no verla nunca mea.
la con un gorrión. un gorrión la tarde siguiente, no pude, que ya domesticado, conocía su con franqueza, resistir al deseo de contemplarla y me hice arrastrar Toz y que prisionero durante casi un año, había vivido encaramado hasta aquí. Las burlas siguieron.
Ella dejó de en su espalda. Ay! no poco saludarme, os le había costado obtener permiso Señora mía, del jardín sereno El te, servido con amor devoto bien dicho, de responder a mi 92para llevarlo a Caledonia! desLlega un canto de luz y primaver.
Cae en la taza con murmullo blando.
ludo; pero yo siempre tiel, siempués, había tenido que hacerle una ¿Será el trino de un pájaro cualquiera? la rodaja de limón, flotando pre atado con una cadena invisiJaula corrveniente para el viaje. Será la flauta de un pastor heleno?
Aparece, como una flor de loto.
ble a su hermosura maldita. Una tarde, al yo insistir en saludarla, procurarse madera, un poco de alambre viejo, y otro poco de pinLa flauta de un pastor. Pero hay pastores. Mas, sigamos la plática inocente, me sacó fuera su lengua, en señal ¿Y eran como los de hoy los cervatillos tura verde para pintarla y dejarla Pero. escuchaste ese rumor latino?
despectiva o de cólera, como la bonita De aquella edad. aun se usan caramillos No es una flauta, ni tampoco um trino; hubiera hecho una chiquilla.
Recuerdo textualmente Para entrar el ganado en los alcores?
Lo conozco: Es el canto de la fuente.
estas palabras de Iván. Ese día no lloro, sino que rel. Pobre goFrión! tenia No lo sabrá decir, señora mía, De la fuente que llora sin constelo, me rei con ganas, me rei mucho, por comida en su Acaso fue una sugestión incierta De In fuente que ríe sin medida, jaula, un pedazo de ese pan nemuchísimo; y empecé a refrme en pro que dan en las cárceles. y al Que penetró por la ventana abierta. que, ya está desnuda o escondida sus ojos. Ella se dugo muy enojaPero, y żel te? Por poco más se enfria.
Es al jardín como la luna al cielo.
pesar de todo, parecia estar conda, tanto, que me volvió la cara, y desde ese día, ya no quiso más tento, brincaba como cualquiera Ya no las hay. fumareas, como antaño, sentarse sino de espaldas a eata otro pajarito.
Ella el servicio familiar coloca, Donde era de uso casi establecido esquina donde me detengo.
Algunas horas después, cuando Su atracaban al navio y los penados en el borde pintado de la taza Arrojarse en procura del olvido enojo se trocó en malquerencia, y Una guía de rosas amenaza Iban a embarcarse para largo visCuando los laceraba un desengaño.
decirle puedo a usted satisfecho Je, Iván, que se había olvidado de Con sus tiernas espinas nuestra boca.
que hoy me odia. Y, vea usted lo Pero no obstante, amiga indiferente, que son las cosas, ahora es cuanaquel viejo volvió por casualidad, El día que tu amor me niegue todo, do soy menos infeliz. Ahora poseo a pagar cerca de él.
Espinas que, con un temor sencillo, Si no quieres que muera de ese modo algo muy sincero, muy Duro, del Tomela, tómela usted, le dijo No han de quitarnos, al beber, la caima, Manda tapar de tu jardin la fuente.
alma de esa mujer: popeo su odio.
con voz conmovida y alargándole que tal vez tú llevas en el alma Yo he obtenido más que todos pequeñia jaula. Se la doy: eso Con tanta gracia como en el pocillo.
HORACIO REGA MOLINA esos estúpidos que la enamoran.
tal vez pueda servirle para algo.
Ninguno ha podido entrar en su para agradarle.
corazón. Yo, sſ. Qué importa por No, por cierto! le dijo Iván, qué puerta. Yo me siento posesor Agradeciéndole; al contrario, usDOD0308000990980230ocess ted sabe, es 20290ssera de algo que no se puede mentir.
necesario llevarlo, Soy casi feliz: y me roo más Berá su pequeño compañero, alla lejos.
Al salir del Perú, va constimada ¿Habló a su corazón tanta vehemencia. afortunado que el hombre a quien Oh! repu50 ella ofrezca su mano y hasta su el viejo, 61 ya la obra de su genio y de su espada No era fácil sondear en la conciencia no está adentro. no sabía usted e corazón. Una mujer tan vanidosa, en la América Austral del caudillo inmortal: gues. el ya no está.
tan pagada de sf, amara siempre Bolivar, desde Francia recibía 1: tras la heroica virtud de sti pulanza su bermosura.
y por sobre todo dos Tágrimas de indecible una carta de amor y poesía se confundían en estrecha alianza pena, le corrian por las mejillas.
En cambio, ella no puede odiarse de Fanny du Villars.
Aquiles y don Junn.
mal si misma, puede tener En una apretura de la travesía, Su se había abierto la puerta, el go otra persona a quiert odiar, prión de habla asustado, se habla Aque! la ardiente carta en su memoria Placía a sus rasiones voluy trosas e odio, pues, es integro para mí; y olvidar los laureles por las rosas, removía cenizas de una historia Yolado, e inmediatamente había será su amor, en cambio, nunca de veinte años atrás.
la gloria caído al mar por tener una ala cor or el vals.
completo para su esposo.
tada. Oh. Qué momento de tan mundano, voluble y libertino pronto a la embringnez de las caricias, Paris se interponia en su camino entre hermosuras al placer propicias Tengo la mitad de en horrible dolor. verlo resistirse elma, de Lima a Bogotá.
plantaba su vivac.
por lo menos ahora. Qafén pumorir. arrebatado por las olas repldas, y no poder hacer diera decir otro tanta?
nada EN De Lima e Quito, Bogotá y Pamplona por el. Luego, en un primer basta el valle que el Avila corona, movimiento muy natural, Fanny le confosaba. Todaya habla Usted me vera todas las tarel recuerdo penoso de aquel día fue una marcha triunfal.
des aquí, mirando querido gritar, pedir auxilio. 4! por detrás las rigirse al mismo Iván. suplicarme persigte tenaz, Palpitantes de amor los corazones, areas, cas contento.
te. arranque detenido pronto por Vos seckbals el llanto en mi semblante, se pusieron en nie cuatro naciones mientras yo, enloquecida y suplicante, para verle pasar!
la reflexd6n. por. la. conciencia La fisonomia del pazalt. eote Bominaba.
deria de su degradación personal; no os dedaba marchar, Hasta aus plernas de Pocos años después, en Santa Marta, perlático parecían arimas.
viejo como el.
iguten tendría lastima de su ya próximo a morir, adella carta mka: quién querría escuchar siNo quiero resignarme al desengafio, recordo frente al mar.
Al fin lo dejé; y my tab salle Clavá la vista en el pont meano, súplica. podia ocuy en prueba de mi afecto os ecompaño arriba, taciturno, todarla on a)rreole que atrasarlan mi efigie y un puñal; vió por nltima vez al océano el navio go del ve tigo que me produjo el Dar escar del agua rompió sollozar!
Tales prendas serán en vuestra vida, un gorrión fondo de aquella alma, a la enal que se ahogaba. y un pobre på el arma, la defensa requerida, quiso asomarse mi curiosidad.
ADRES MATA laro de condenado. qué sueño mi ofigle un talisman.
mie absurdo. Entonces se queB. BLANCO FOMBONA PR, 89009900900009 Don Juan Santa Marta un miserable quiera su

    France
    Notas

    Este documento no posee notas.