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HECHOS COMENTARIOS LECTURA DE LOS JUEVES Products Conviene que el Congreso analice bien este suceso y proceda en consecuencia.
por eso; pero no es lógico pensar que por es.
te hecho todas las agencias deben entrar a cumplir una ley que significa riesgos praa las rasas matrices.
Se cree que lo que no les guste a las actuales compañías que tienen sus representaciores en Costa Rica, puede gustarles a otras. que por tal motivo nada importa correr el albur de que estas compañías se retiren en la esperanza de que vendrán nuevas.
No es un argumento. Lo que debe juzgarse con todos los ojos es si lo que pretende el Gobierno, por más que nos convenga a nosotros, es posible para las compañías. Si no lo es y se trata de compañías serias a las que se les abren las puertas de otras naciones, entonces quiere decir que no debemos emitir la ley. Las compañías que aceptaren responsabilidades tales será que no tienen suficiente responsabilidad o no son suficientemente formales.
Tidos a las razones dadas por dichas autoridades, se oponen otras mayores e inevitables. Los habitantes de los ranchos alegan no tener dónde irse y que con los rigores del invierno no pueden ni siquiera ir a habitar a la sombra de los árboles. Es decir, imploran la caridad, apelan a los sentimientos humanitarios y a la imposibilidad de vivir bajo el sol.
El señor Presidente, con muy buen acuerdo, determinó que los habitantes de los ranchos continuaran habitándolos al menos por un tiempo prudencial, mientras el Estado logra resolver del mejor modo posible la cuestión de las viviendas para pobres.
La lista que a continuación publicamos demuestra mejor todavía que lo que se ha hecho, con no ser lo mejor que puede pasar, ya que sería de desearse que no existieran esos ranchos, era el único camino que ha quedado. Varias comisiones primero y varios grupos ciudadanos después, se han acercado a la Casa Presidencial pidiendo que no sean arrojados a la calle, como pretendían LOS RANCHOS la Sanidad y la Cruz Roja y el Gobernador, los pobres que habitan provisionalmente los ranchos construidos con motivo de los temblores. Las razones alegadas por las autoridades para tomar la determinación antes dicha, son justas; dicen que la higiene está en peligro, que la vida de esos seres en las condiciones en que la hacen, supone la amenaza de enfermedades peligrosas, y que el ornato de la población suhe grandemente con la existencia de esos ranchos mal construidos y peor mantenidos. Pero Ha vuelto a ponerse de actualidad el asunto de Si las compañías extranjeras con agencias de us negocios en Costa Rica, deben o no dar poderes generales a sus CUESTION DE representantes aquí a fin LAS AGENCIAS de que inscriban su personería jurídica en nueseros registros. Mucho se ha escrito y se ha Jicho sobre este negocio desde el término stablecido por la ley se venció y como resulado práctico de todo, lo que vimos fue que Nos representantes de dichas compañías no Cumplieron la ley y esperaron impasibles que esta fuera cumplida por el Estado, mandándoles cerrar sus agencias. El Congreso, en sus sesiones extraordinarias está tratando el asun4o. y lo de siempre, de asunto importante y nacional, se convierte en político. En que si dijo o no dijo el Secretario de Gobernación y es en que si dijo o dejó de decir don León Cortés. El caso no puede ser más sencillo ni más patural. La ley se dió con vista de la sersible desgracia ocurrida a dos señoritas que embarcaron en Limón. Se discutió su importancia y se promulgó. Venció el término para su cumplimiento y las compañías resueltamente declararon que no podrían cumplirla por cuanto no era hacedero para las empresas el dar poderes generales a sus representantes en Costa Rica. Ninguna casa lo acostumbra en ninguna parte del mundo. El Congreso conoce ya, pues, no de la posibilidad de una ley, sino de un caso concreto. Si el Congreso insste en que la ley debe cumplirse, el resultado será el de el Secretario de Gobernacica se verá en la obligación de mandar cerrar las agencias todas. Si el Congreso modifica su reglamentación, el caso estaría solucionado Debe contemplarse, además, que la ley ha sido dada especialmente por un accidente desgraciado. para que no se legislara especialmente para las compañías de vapores, entonces se generalizó el concepto de la ley. Es decir, se involucró un asunto con otro.
Muy justo sería que las compañías navieras garantizaran la vida de las personas.
Pero a esa conclusión no se ha podido llegar an ninguna legislatura del mundo. Si algo hay eventual es la navegación. Donde más accidentes pueden ocurrir es en los med os de transporte. Son servicios lo más seguro posibles; pero no absolutamente seguros.
El caso de las señoritas cuya muerte tano deploramos, puede entrar en el terreno de las delincuencias pero no en el de los accidentes.
Es casi seguro que el capitán del barco en que viajaban esas señoritas tuvo culpabilidad al no darse cuenta de que esas viajeras corrían peligro, y es más seguro todavía que debe recibir su condigno castigo y que además de él. su compañía o quienes sean, deben indemnizar ranchos con 42 personas al oeste de la Aduana 13 ranchos con 61 personas en la calle 13 Sur ranchos con 18 personas en la Plaza González Víquez.
35 ranchos con 160 personas en el Matadero Municipal 11 ranchos con 29 personas en la plaza de la Merced.
104 ranchos con 334 personas en las cales 12 y 14 norte.
10 ranchos con 41 personas en la plaza del Pacífico.
26 ranchos con 134 personas en Santa Lucía.
POR SUPUESTO.
Ud. cree en hechos.
Total de ranchos Total de personas 213 819 MAS DE MILLONES Moradores adultos Moradores menores 360 459 DE CIGARRILLOS LIBERTY BIBLIOTECA NACIONA. COSTARS son fumados cada mes. RICA, Es decir, se iba arrojar a la calle sin que tuvieran preparadas habitaciones ni manera de proporcionárselas, cerca de quinientos niπος cerca de cuatrocientos adultos, No podríamos saber si el resultado de estas medidas será bueno; es probable que lo Puera, pero indudablemente no era posible tomar una medida radical Lo que interesa ahora es que el Estado y la Municipalidad ayuden a resolver el problema de las viviendas o reconstruyan esos ranchos en apartados lugares de la población con la ayuda de pago de sus moradores dándoles un término de un año por ejemplo para desccuparlos.
La construcción de dichos ranchos puede ser también contingente a que se terminen por sí solos.
Qué mejor prueba puede Ud. tener. La Caja Nacional de Seguros ¿POR QUE MONOPOLIO NO LIBRE CONCURRENCIA?
IV No quisiera, en forma alguna, restarle a mi culto contrincante señor Piza, ninguno de los medios que el considere mejores para sostener eg ta campaña. Si en su primer articulo hubiese in sinuado la idea de que contuviera mi réplica, hasta tanto que el hubiese disparado su altimo cartucho, yo hubiera repetido, en su obsequio, la histórica o legendaria frase: Aprés vous mes.
kieurs les anglais y quedaria esperando, en actitud de saludo, el momento en que tuviese a blen concederme el turno.
Pero es el caso que no hubo tal manifestación de su parte, y en mi torpeza, sólo ví una invitación al combate, que no podía rehuir.
Por de pronto, la inculpación de que el proyecto no había recibido ni el más somero estudio de mi parte, exigia inmediata contestación, so pena de dejar flotando en el ambiente una abeveración desdoro ra para la seriedad del Gobierno Era forzoso demostrar que, bien o mal encarrilado, el habla habido el estudio necesario; que no procediamos a tontas y a locas, como vulgarmonte se dice. esa impresión fue la que trato de dejar mi replica Tampoco podia desentenderme de la afirma clón aquella, de que el intento era abeurdo, por que tendia, como la anterior, a probar esa dofl.
clencia de estudio: mhe ean, a demostrar que la loy proyectada, no tenia precedentes en el mundo entero, por lo absurda. esto, sólo podín rebatiro, oltando Ing nacioen los cuales ha existido y existe el Seguro Odlelal, practicado por el Tatedo o por el MunielOtras, no pudieron, todavía levantarse, y siguen batallando contra adversas condiciones. Al primer grupo pertenece Costa Rica, y su papel, durante los aciagos dias de la Guerra, mereció ser encor plo, en forma de monopolio o en concurrencia con que éste, tiene en sus manos y leyes y los mamlado por propios y extraños, ya que fue. oigalo el seguro privado. La cite no era inoportuna, co dios de hacerlos imposible toda competencia, por bien señor Piza) la única nación deudora, que no mo dice el señor Piza, ya que entre otras cosas medio de tributos o impuestos de que se verian sólo no pidió prórrogas en momentos de general venia a demostrar que no podia thdarse de absurlibres los geguros oficiales.
trastorno, sino que durante el periodo más álgido do en Costa Rica, lo mismo que había recibido 20. La competencia se hace a base de prensa, de la Guerra, principió la amortización de sus existencia práctica en otros países.
de reclamos, y mucho, desgraciadamente, a base deudas, a pesar de estar entonces sufriendo los No era, pues, simple arenón que echaba a sus de desprestigio para el competidor. Yo no quisieefectos de una tiranía derrochadora y desorganiojos para cegarle, pues le creía y creo muy cora que las Compañías extranjeras, pusieran en du zadora nocedor de estos asuntos, a pesar de que en su da la solvencia de Costa Rica y Tanzaran para Habla el señor Piza de la Ley de Nulidades, modestia asegura ignorarlos, sino exposición de conquistar nuestro mercado, expresiones росо prescindiendo de los justos e imperiosos motivos datos de que le supuse poseedor, ya que ni por honrosas para el Crédito Nacional.
que la produjeron, pero olvida añadir, que esa ley un momento se me ocurrió la idea de inculparle 30. Interesa a la economía nacional que las no impidió el reconocimiento y el pago de todo la misma falta del necesario estudio, que me primas, formadas por el ahorro costarricense, se crédito legitimo. lo único que, en la práctica enrostro.
Invie en Costa Rica obligó, fue a la depuración, ante los tribunales, Pero, puesto que el señor Piza desea que es El segundo motivo es fundado. En esta misma de aereencias que habia justo motivo para supopere la terminación de sus ezerlto, no tengo el discusión que sostenemos, el primer argumento ner Irregulares. Sólo cuatro afios nos separan de menor inconveniente en ello, aunque no sé cómo dum dum que se ha lanzado, lo ha sido en forma aquella época de trastornos, y en la actualidad, compaginar ml deseo de complacerle, con los fue de afirmaciones sobre nuestra incapacidad para no hay ni un solo giro de legitimo origen que, ros de la cortesía que me obligan a contestar las hacer lo que se hace en otras partes, sobre nues comprobado, no haya sido cubierto. Más aún, he preguntas directas, con que termina, su segundo tra inferioridad administrativa, y lo que es más mos pagado mucho, que, en realidad no deblamos.
articulo. Me concretaré a ellas, doloroso sobre nuestro descrédito.
Pero, nos extraviaria del asunto principal, el ¿Por qué recurre. el señor Soley, al Monopollo? Pareciera olvidarse que no existe una sola na tratar de la famosa ley, y de las otras inculpacio¿Por qué no deja que las compañías continúen clón que en el curso de su historia no hubiese nes, tan destituidas de fundamento, con que tercon el negocio?
sufrido trastornos más o menos violentoe. Algu mina su Capítulo Aparte. Quede, esto, para maPermita, pues, que les de rápida contestación nas supieron levantarse volviendo por su buena jor ocasión, que yo, por ml parte, me limitare a a esas preruntas, sin perjuicio de ampliarla, cunn fama y crédito; restañaron las heridas que en su esperar que el señor Piza complete su argumendo me toque el turno.
economía produjeron gobiernos atrablarios; Teor. tación sobre el Monopollo del Seguro, para entrar 10. Me parece más leal, mas franco, impedir ganizaron su Hacienda, dieron cumplida satisfac de nuevo en la liza. Y, en el interin, daré satisfaeabiertamente el negocio de las Compaffas, que clón a sus acreedores y siguen la marcha normal ción a objeciones de otra procedencin.
dejarlas luchar en concurrencia con el Estado, ya que sucegos ocasionales les obligaron a dejar.
TOMAS SOLEY GUELL Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica. חון

    FranceLeón CortésPresidentes de Costa Rica
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