Domingo 28 de Setiembre de 1924 IS LA TRIBUNA Página DE LA VIDA MUNICIPAL LA MUJER EN PARIS LA BANDA Bolsillos, Carteras, Feminismo y un y se el La vida de provincia seria dulce, tengo pesar, más que todo, por to y por qué el bombo retumba Hablando de la campaña mente silenciosa y apacible si no que de tanto convivir con ellos por allá cuando le place con dos o que nombre y del ciudadano, y de otra mano, pero he de hacer observar sonara la banda municipal, porque me son todos familiares: yo dis tres golpes y después largo silenalgunas militantes del femiciemo parte, los de la mujer y el mo que por cada mujer que se deja la banda toca a todas horas un tingo perfectamente a las dos cuacio. No es verdad que esto, es preparan para llevarla a cabo en disto. Yo no creere en el porvenir robar su cartera hay die hombres mientras a quienes los rateros vacían sus interminable rio de música que se dras cuando González, el del pis cuchado así es una música verda determinados países de Europa y político de las mujeres repite incesante y aburridoramen tón, desafina estridentemente, yderamente infernal, capaz de vol América, en pro dėl viejo lema las vea arrastrar, perpetuamente, diez y sels bolsillos respectivos.
mistress Pankhurst vote for wo una cartera. opino que es inútil La señora Vogt tira con bala te. Por la mañana suenan las al me parece verlo con su cara de ver loco a todo el mundo?
boradas o los entierros o las mi empedernido trasnochador, adhi He podido comprender men, un cronista parisiense, el Be hablar de reivindicaciones, en tan rasa. Pero escuchemos ahora los que la sas; a medio día, el anuncio de riéndose al cobre que se le incrus música municipal se divide en dos for Forest, ha cometido la impru to que no tengamos bolsillos.
argumentos de otro campo, del de dencia de escribir.
las funciones de cine o el toque ta en el rústico labio, meneando clases: música alegre música Con esta apreciación, que tal vez los tiranos. Se discutia acerca del femi no sea estrictamente justa, pero de las flestas patrias; por la tarde la cabeza que se le cae de sueño, triste. Es música alegre la que se nismo, de su posible triunfo y de que es original y sugestiva, el se una prueba de superioridad. Cuan Sí, señores. Los bolsillos son el anuncio de los toros, del cine; y caminando, caminando desolada toca el veinte de julio, en las repor la noche, otra vez el anuncio mente, sin esperanzas de que aque tretas, las serenatas y demás iles vindicación en los programas elec vareda formidable. en campo pantalón, su mayor orgullo no es la necesidad de inscribir esa ref for Forest ha levantado una pols do un chiquillo viste su primer del cine, la retreta municipal, las no termine. González amaneció tas, y música triste la que se toca torales. Una dama, de las más ade de pluma retretas a los pasajeros ilustres, hoy con guayabo. me digo. Po en las misas, las procesiones o wa mradas por su elegancia declaró: nada más. luchan ahora, contra bolsillos, donde guarda todos sus de pluma estilográfica triba en el pantalón, sino en los las serenatas o los ensayos. Porque bre! En qué irá pensando mientras entierros, aunque sucede frecuen Aun es pronto para todo eso. No el señor Forest y los valientes que bienes muebles, y donde admás, hasta los ensayos hay que ofrlos, sopla esa música febril y allocada? temente que Rosa de Fuego o Que estamos todavía en condiciones de se han atrevido a secundarie, to mete sus manos.
que como el pueblo es pequeño, Acaso amaneció despierto tras una El Cocotero sean tocados en tal ejercer nuestros derechos. Unos das las escritoras hara que en París de ellas tambien muchos hombres a cualquier distancia que suenen noche de desvario, y se le pegan cual viernes santos o misa de tu entre si no tuvieran bolsillos donde te el pistón o el clarinete. Se les oye los párpados a medida que recons vestidos. Es que son músicas tan protestaron por cortesía; otros por cultivan el feminismo convicción. La dama explicó: tho dansant. truye mentalmente alguna escena sabrosas que no se puede menos Prueba de ello es que no tene la garconniere predilecta y una una perfectamente.
escupatoria a fugiarlaa. Pero las mujeres de Cusin tener libres sue manos, Yo estoy completamente traspa de amor.
de tocarlas de vez en cuando en mos bolsillos. Mi marido sado de música, musicalizado has Pérez, el del cuenta detenida visita a los cinco pisos y aunque sólo sea para hablar. Por toca las ceremonias fúnebres, como pa con cinco boisillos en su gaco, tres clarinete, ta la médula de los huesos. Emple hoy demasiado aprisa, y hace 80 Ta regalo de los circunstantes.
a las quinientas secciones de las eso, al llegar a cualquier sitio, lo en su pantalón y cinco en su abri Galeries Lafayette.
primero que hacen es soltar 16 za la banda una marcha, y, sin nar su pifano por encima de los La aldea es duicemente quererlo, mis nervios auditivos co otros instrumentos, como si preten closa y apacible, y seria encanta dispongo de uno solo, silen go total, trece. Yo, en cambio, no Dice, por ejemplo, la señora cartera de mano. perderla.
gen el compás siguiéndolo un po diera ensordecerlos a todos y en dora, digno retiro de fralles poetas obligada a pasar y me veo Vogt: Otras veces, cuando van acompaña la vida arraquito adelante del de los tambori loquecernos a nosotros. Un Instruy de Alósofos solitarios si la ban trando una cartera. Nada hay tan tancs aun maduras para el libre barazan de la cartera rogando al Ya sabemos por qué no es das por sus caballeros, se degenles y contrabajos. Me sé de me mento tan plebeyo como el suyo da municipal nunca sonara, o si se incómodo como ese utensilio moria toda esa música municipal no debiera sonar sino muy bajo, la oyera silenciosamente, tan silen utiliza una mano, siendo así que a Una mujer acaba de revelárselo al que ejercicio de nuestros derechos. acompañante que se la guarde en un bolsillo. suele ocurrir que, que desafina por momentos, como escondido, como metiendo su ciosamente que tuerce, se dispersa o chilla desa horrendo chillido por los intersti sus acordes con el arpeglo de la dos, en una vida tan móvil y tan mos bolsillos.
se confundieran cada momento necesitamos de las señor Forest. Es porque no tene por la noche, quien encuentra la paciblemente. Apenas cartera de la dama en el boleillo me doy cios de la orquestación. Pérez discreta guitarra que susurra en la rápida como es la nuestra. Nadie cuenta de que soy una placa sen es un buen muchacho que bien Un caballero, por tonto que sea del caballero no es la señora que alcoba, o como musica sible registradora de toda esta merecia tocar la flauta.
angelica nos obliga a llevar la cartera, y tiene bolsillos: tres, si se pasea la introduio, sino otra que tiene que llegara a nuestros oídos invi si no tenemos bolsillos en nuestros en pantalón, y diez y seis si lleva cree tener derechos exclusivos 80baraúnda, porque cuando cesa la Han oído ustedes cosa más sible y tenuemente, dándonos la vestidos y en nuestros abrigos no abrigo.
música, sigo ayéndola, repitiéndola absurda que la música del clari sensación de una vida paradisiaca es porque nos lo impida la tiranía bre el olvidadizo acompañante, y mentalmente como sila hubiera nete? Es Diez y seis bolsillos, en tanto que protesta en forma airada, tula un sonido detemplado de ternura y de paz.
del hombre, aprisionado en las oquedades del como el chirrido de dos láminas sino, sencillamente que la mujer más inteligente sólo dosa y muy celebrada por los eriaPero con el piston caracol que se frotan, es una música es tez y el clarinete de Pérez, ator que los bolsillos deforman la bolsillitos exclusivamente decora tas.
de Gonzá porque nuestros modistos piensan acierta a disponer de un par de dos que escuchan tras de las puer Pasan los músicos por la calle pasmódica que recorre los nervios mentadores instrumentos que suenen, y porque nosotras no pensa tivos, abiertos en la ievita de su acompasados y alicafdos, querien como raspándolos hasta dejarlos Carlos vmessa hace observar: nan en todas partes y a todas hormos con nuestras cabezas, sino con tallleur o escondido en el forro do, con el vaivén de las piernas y desnudos. Yo no he podido nunca Si las mujeres llevaran bolsin ras y los minutos, la dulce vida ia del mod isto.
de las cabezas, matematizar los or cortar un corcho, porque Hoy por hoy, es de su abrigo. Ahí tienen uste llos, no podrian decirnos cosas co de aldea es sencillamente detesta inútil hablar de los derechos del des la superioridad masculina!
sonidos sometiéndolos a las leyes chirrido de la navaja al dividir el mo éstas: ble y feroz.
hombre y de los de la mujer. Los de la mecánica, yo los observo tapón me exaspera, y tengo enton Nosotros lo guardamos to: iHe perdido mi cartera, donúnicos derechos que verdaderamen nuestro dinero, nuestra prendidos a sus colosales instru des que taparme los oídos y mirar barra de Je tenia un collar de perlas que CONSTANTINO PLA te existen son, de un lado, los del carmin, nuestros mentos formándome la idea de a otra parte. Pues el sonida del polvo de arroz, vale 300. 000 francos. que pasen arrastrados por sangul clarinete se me semeja al que pro nuestro pañuelo y nuestras cartas Si me quieres de verdad, fuelas formidables que les succo dujera un largo corcho cortado de amor, en una cartera que es un guardame en tu bolsillo mi carnan la vida.
eternamente.
amor de cartera. Para cualquiera tera y prométeme que no leerás Daos pobros músicos me dan Como no sé nada de música, esto puede ser un progreso. Para las cartas qu tengo en ella.
una inmensa lástima. Me parece me sucede que cuando oigo esta la confidente del señor Forest, no Para otro escritor. Bernard Ger que a fuerza de soplom heroica banda, me parece como si todos es sino una prueba de incapacidad vais, las mujeres, dadas las costum mente se lee van ar los ojos los instrumentos tocaran cada cual para el propio gobierno, MI mas bres modernas, deberían adoptar enrojecidos, y que va a echar por su lado, y me pregunto con Yo ví un pueblo, Señor, crucificado culinismo agudo no llega hasta un bolsillo, uno solo, el del re Dedazos de pulmón por las trone asombro por qué el bajo pasa disobre la blanca cruz de su bandera, el extremo de pretender que los vólver.
ras de los instrumentos; y les ciendo estúpidamente fa. fa. to igual que Tú, de espinas coronado, 16 hombres adopten la cartera de ANTONIO DE LINARDS el busto inmóvil y la tez de cera.
suelta vuelta la vista a la celeste esfera. sangrando por la herida del costado y roja de sudor la cabellera. cual inri también, sobre el madero, escrito en inglés bárbaro un letrero: Por ser tu tierra inerme, libre y rica, América del Norte te condena; Deseosos de corresponder a las finas atenciones y en nombre del Derecho te encadena congue nos distingue nuestra selecta y distinguida y por la libertad te crucifica.
concurrencia a las PARA SEÑORAS NIRAS PARA CABALLEROS NISOR FRANCISCO VILLAESPESA Crespones seda y algodón, neros de seda, Vollés, Géneros Casimires, Gabardinas, MADde algodón, Relojes, Echarpes, cuernillas, Corbatas Tricot, TiPeinetal, Vanidosas, Pulseras, rantes, Calcetines, Pijama, Pañuelos, Artículo fantasía Ropa interior, Vestidos niño, hemos preparado para hoy, un excelente menú, Noche oscura, viento leve, que no dudamos será del agrado, una vez más, EN LIQUIDACION: sobre la tierra bruna de todas las personas que gustan comer bien Diríase que la nieve Paraguas de Seda y de Algodón. CAPAS DE HULE Va pulverizando luna.
La hojarasca en el reposo Esta semana SALDAREMOS: Se arrebuja como un manto; en nuestro amor silencioso, Géneros de Lana, Pañetes y Gabardinas flor de alma corre llanto.
a 50 y 00 vara LEOPOLDO LUGONDS Lea en este diario nuestros anuncios de jueves y domingos y visítenos para que vea todas las novedades que recibimos ECCE POPULUS Nuestras Fiestas Sociales AlSiglo Nuevo Novedades recibidas durante la semana nuestra selecta y Comidas. Conciertos INVIERNO La Orquesta DEL Maestro don Ricardo Jiménez ejecutará un selecto programa AL FINAL Siempre BUEN CAFE GRAN HOTEL FRANCES ¿Sabéis qué dicen las gotas de Cantan y dicen.
agua al reabruar pausadamente Somos pequeñas. pero animaentre las cortaduras del granito das por extraña fiebre que nos imen guirnaldas de lágrimas?
pulan, suprimimos para el hombre Cantan y dicen el tiempo y la distancia: con nues Somos pequeñas, nada valemos, tra ayuda perforará los montes, ao realizamos gigantescos esfuet con nuestro esfuerzo salvará lcs :02 ni titanica labor, pero eayendo abismos, con nuestro auxilio unn tras otra durante dias y alios deslizará sobre las aguas ligero y siglos, Meganamos a destrozar como la brisa. iy prestaremos alas la roca. Somos la Constancin!
a su cuerpo, y potencia invisible a asabéis quo dicen las gotas de su trabajo, y luz a bus tinieblas!
gute Nacionamen Este documento es propiedad de la Biblioteca Miguel Obregon Lizano del arviente caldera, al chocar contra las paredes de su carrel metallca? MARTINEZ RTFRRI La Canción de las Gotas La Vida de Familia EXIGE BUEN CAFE MAGNIFICO CACAO MOLIDO CHOCOLATE EN TABLETAS Cualquiera de estos artículos Pidalos a DORADO zado de sinerna Nacirap sa Bibliotecas del Ministerio de cattura yaluwentud Costa RicaMARCA DE PUREZA se