Miércoles de Febrero de 1925 LA TRIBUNA Página Antonio Caso de García Monge y de su tendencia cultural americana, pero sobre todo sabe que en ningún país como en el nuestro, se ha realizado el milagro del orden político y el prodigio de que nuestros hombres sean civiles y normalmente preparados para fungir en las administraciones públicas, sin más miras que las de un mejoramiento absoluto de la patria. Todo eso dice Caso debe enorgullecer a la América Hispana. Si las tendencias a mantener fronteras políticas subsiste, es necesario que la unión de estos países se realice manteniendo dentro de sus respectivas organizaciones, la universalidad del orden más perfecto. Así podremos demostrar a las ctras razas que la nuestra está preparada para hacer la vida de la república ial como la soñaren los griegos. La pujanza del mundo reside en las naciones de la América Española. Somos los del porvenir y esa verdad no debe pasar inadvertida para nadie, a fin de que se encauce la labor, y de sus frutos opimos. México después de tantos años de revolución no se encamina sino a la perfección de la República, y ojalá podamos mantener siempre el ejemplo de. osta Rica por delante. Nuestras tendencias son también a hacer la vida común con las naciones de la América Central, y después con todas las del continente. Hay que ver la pujanza de la intelectualidad de la América. Ninsluna tan fuerte ni tan exuberante. Lo tenemos todo, y si el orden se acumula para no falte ni aun en los más dificiles trances, habremos llegado a ocupar el lugar que el destino nos tiene reservado.
Para Antonio Caso los problemas imaginarios de democracias, de liberalismos, de formas de gobiernó, no deben constituir una piedra de escándalo. La verdadera libertad es lo único que puede resolver las tendencias, y la verdadera libertad se realiza respetando la Modesto Tilarán en la Política A decir verdad, durante la travesía entre Panamá y el Callao, a bordo del Oriana. no habíamos congeniado con el gran maestro Antonio Caso que via.
jaba con nosotros. Nos parecía un tanto misógino, excéntrico más bien, hombre tal vez lleno de prejuicios o de cierta pose de importancia, que no cuadraba con su fama ni con su país. Varias veces conversamos con él. Reservado, adusto, con una cara de pocos amigos que metía miedo, y su mandíbula inferior saliente como la quilla de un barco, parecía hacer esfuerzos sobrehumanos para lograr detener un interminable movimiento de sus inmensos labios. Se ha fijado usted le dijimos a don Ricardo Fernández Guardia. en la boca de Caso. Habrá otra boca igual en el mundo?
Naturalmente, dentro de una boca así, escasamente sonriente, nosotros pre tendíamos adivinar muchas cosas, entre otras, que Caso tenía, como los tiburones, varias hileras de dientes. más por cerciorarnos de nuestros pronósticos que por otra cosa, tratamos de verlo reírse con franqueza, con la boca abierta de par en par. Hasta ese momento la ideología de Caso nos tenía sin cuidado. Le habíamos oído hablar sobre algunas cuestiones de poca importancia con un juicio que no la tenía tampoco, y no despertó en esos días de mar, ninguna inquietud en nuestro espíritu, ni siquiera en nuestra curiosidad. La boca era nuestra obsesión. Por aquellas fauces pasaba un niño crudo. Caramba. por qué se nos ocurrió que un niño crudo? Comería efectivamente Caso, niños crudos. Estamos seguros dijimos otro dia a don Ricardo Fernández Guardia que Caso tiene siete hileras de dientes en la mandíbula inferior. Es un tiburón humano.
Hicimos la ecuación perfecta de nuestros pensamientos y la personalidad de Antonio Caso, y lo dejamos perdido en su propia vida, sin atisbársela en ninguno de sus detalles. Para nosotros Caso dejó de existir durante toda la travesía. Lo encontrábamos, lo saludábamos y seguíamos imperterritos e indiferentes.
En cambio trabamos muy buena amistad con sus compañeros. Juan José Núñez y Domínguez, Director de Revista de Revistas de México y poeta espontáneo, inculto y audaz, fué para nosotros un excelente compañero. Nada podía encuadrar tanto con nosotros como aquel joven aeda que leía versos, y que tenía ratos de sabrosa maledicencia y de armónicas rebeldías. Esto es horrible decía viajar en un barco como éste, apretujados, maltrechos y aburridos, y tener que bay jar de smoking todas las tardes a la comida. Tenemos que protest.
La razón abundaba para él. Le prometimos que por nuestra parte, jamás usaríamos de aquella prenda, pasara lo que pasara. lo que pasó fue que poco a poco la prenda quedó casi abolida de los viajeros para dejársela en exclusividad a los ingleses.
Pero esta amistad con Núñez y Dominguez había de convertirse en Lima en fraternidad con él, y en acercamiento efectivo con su amigo y compañero el señor Caso. Estábamos dentro del mismo hotel y nuestros cuartos quedaban muy vecinos.
Poco a poco perdimos las aprensiones al señor Caso. Su temperamento un tanto retraído no era sino manifestación de su espíritu culto y discreto. ya en ese estado de amistad, habiendo ya hecho las paces con su figura que abrillanta el más elevado de los bue.
nos talentos, logramos conversar con él sobre diversos tópicos de suma importancia para la América. Caso cree que la República de Costa Rica es la más aventajada en cultura cívica. Admira a nuestros hombres y conoce la actuación de muchos de ellos. Sabe del talento y altura de miras de Ricardo Jiminay, de la cultura y de la dedicación de Cleto González Víquez, del movimiento renovador de Jorge Volio, de la labor de que vinte ao mejores timpos. Se frustró una fiesta.
Yo Tompo el hielo, yo mo cerca de Car. bs Marin, porque di Cosa por más que también haya un guanto más. yo estoy ya que re. co ella, y dice muy bien que mien. con Luis Anderson, lleno por maviento, yo me lanzo, yo me hago a as haya un Carlos María en Cos nera imponderable de glorias ex la mar, yo juego. Yo seré diputado. ta Rica no se debe pensar en otra tranjelas, pero demasiado Rjanas.
Don Alberto y yo nos hablamos Mira dio mi mujer todo eso quedado tan zorritos desde aquello de que la Liga de las Naciones de de Alajuela y Heredia, en esperas ins que nos hemos salido ya, este de acuerdo con don Luig Anderson.
de que Carlos Maria no volviera de y de que tenga las simpatias de Europa y Manuelito Castro contraRowe y de Mr. Carnegie y de Mr.
ra matrimonio y se aquietara o Rockefeller y del mismo ex Sultán, que este respetable Congreso se re es histoia del otro mundo. Aqui, solviera por Omponer la ley de para Presidente, puede más peral.
elecciones, o don Ricardo por te GALANES POCO GALANTES tita el de los forros, que todas las ner considerac:ón de sus conciudanaciones del mundo Teunidas para danos; Te o en Vista de que nada Algunas damitas que Veralean solo ello en Liga Universal. No hay da esto sucede y de si no nos ade!
en un pueblo vecino de esta ciudad.
ligit que vaig Instamog, se nos adelantan Rantan tiene razón, Varios jóvenes de lo como la tiene invitaron y Filo y Falco, y lanza su candida más grabendo de la sociedad a una tambien cuando dice que Arturito, Tura Manolo Rodó, que se va na suculenta na que debía tener lue Adouis de la Cámara, por más ciendo popular a fuerza de toros y gur el sábado próximo pusado.
que a lo deseara para un paren arroz co polo, no hay más remedio Durante el dla hubo grandes tesco al cualquiera que sea, en que romper el hielo o romperle la preparativos: se chorreaba café se asuntos de la politica está conde caba a los que nos vegan con nado por una determinación qupreparaba la masa para los tamacomb haciones electorai.
Quebrantable del destino a ser pre les y el bizcocho eu.
Porque ahora sí que la cosa esta sidente eterno, pero de la Cámarā.
Cuando llegó noche, había que sería. Ya todos conocemos el jue Don Arturo dice ella será un Ver los apulos de las dimitas cogubito este de tner mayoria paencanto, Vivirá en Cartago, vendra locándose flores en sus recortadas lamntaria para cuando lleguen las todos los días en el tren, viajará a cc)nes de presidente, ya lo cocabelleras, acica lindose, arreglando Turrialba, bara lo que le de la Tocemos los tra es.
y conocemos también guna, pero silile del Congreso y Dieron las ocho, las ocho y meoche que da. Pues Do estuvo don dejar esa presidencia es como sacar diverto a punto de ser presidente an, qué desesperacion. los jóve.
Hay con la cooperación de sus trece, nes no aparecían. Unas iban de coi una ánima de purgator. o.
hombrey que nacen con su seña y que si llegan a ser catorce o 20. medor a a puerta y viceversa. se éste nació con la de Presidente de niguita Montufarito no desenvolvieron los tamales, sir.
se vuelen la Cámara De allí no saldra en se la eva? Ahí es vjeron los bizcochos y como no lledonde duele.
todos los dias de su vida.
Ahora las cosas van por el mismo garon los cumplidos caballeros, caLo único que nos queda por reCamino: cita uno de los proces da muchacha se comió su parto.
solver es si nos vamos con don Al clables pretende estar en sus trece y la de su comp.
berto o Con Jorge Volio, últimos para entonces Testos no muy gloriosos de la cumpaña recién pasada. digo yo, si tengo que buscarme DE TOROS tree, pues me meto en el número Yo, a la verdad, le tengo un ca y en lugar de trece resutarán doce riño filial e don Alberto por su nada más, y de esta forma Yo Soy bondades. mi parecer que don dlputado primero y presidente de Alberto tiene que ser presidente pués, como le acollteció a don Rialgún da; pero mi mujer está mcardo, sin quererlo, porque don R!
peñada en que dou Alberto no pacaldo nunca quiere lo que coge des sará de ellndidato, en tanto que de El domingo próximo ge efectua.
pués Jorga Volio tiene una op Dión muy Ahora que no sé con cuál de los rá en la Plaza Rodó el beneficio de optimista porque dice ela, que si treinn partidos que están en or. Almanseño II. diestro que con su tuvo la mitad del triunfo en la Tu mación debo ime. Tengo para marte y su valor ha sabido gararse cha anterior, quiere decir que en la que Ranrån tielle buºna Suerte, si al prill. co.
yenidera tendrá las dos terectas ha Ilsadoa Ministro pues con un Podemos asegurar que el encie.
partes. Por donde, con dos elecpoquito más, puede ser diputado y Tro de torog escogido para el bene ciones más, llegará a la Presidenficio de Almanseño, será de lo me.
sabo Dios hosta dónde pulve 119 ghr. pero entonces me coloco enor que pueda verge el San José.
Pero sea que Dios quiera, 06 frente de Filo y hay que ver que Almancio ha hecho arroglos con lo cierto que yo lanzo mi candida Filo tiene la cazada en la mano y os peñores Escribeno y Castro, que tura por alguna parte. Lo que es akim que Anda por allí del brazo son hasta ahora los únicos que han de la parte de fura, no me quedo con don Cleto Manuelito Castrologrado traer a la plaza Rodó toros 30.
et de Heredia, que es como andar diables, y estos señoreg Behan Con el que sta o contra quien con la 19y de un lado y con la con: comprometido a coryserulr reser que sea, yo voy en la papeleta de di tra del oto den trabajo a los lidindo combre. ttn escrito, tan eserito Es un verdadero problema. Todo hace esperar, pues, que des como candidatura a perptuidad ers bin, como siempre me ha pués de tantos desengaños como ha de don Carlos Di.
aconsejado que medite mucho acer sufrido la afición, el domingo ter e de la continencia de estar muy mos u yerdadera sortue MODESTO TILARAN: Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregon Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
libertad de los demás. El que cree pe seer el secreto de la felicidad de lo pueblos, lo que posee es una vanida peligrosa.
Pero sobre todo nos llamaba la ater ción en las ideas de Caso su contineata lismo. Si Bolívar pensó que con su es pada podría reunir una nación de vein te pueblos, Caso cree que con el acerca miento intelectual se puede realiza ahora aquel sueño grandioso del Li bertador Ameno es Caso, ameno e interesan te. En literatura tiene también noble ideas y juicios admirables. Tiene gran des admiraciones por la epopeya de libertad de la América del Sur. Par el Centenario de 1921, el señor Cas estuvo también en Lima. Por cierto qu se mostraba más contento de su prime ra llegada que de esta última Dos cosas le habían ocurrido de est vez, dos cosas que supo resolver con su valentía y con su orgullo personal mu: grande.
Las invitaciones oficiales pedían qu a ciertas recepciones se asistiera de uni forme y con medallas. Caso usó de la suyas que son muchas, entre las qu figura no en último término, la de Chi le. Si Chile le había obsequiado un medalla, no había razón para que Cas dejara de usarla munca. Pero un em pleado de Relaciones Exteriores acercó al señor Caso una tarde, y con todos los modos propicios para el lan ce, le manifestó al señor Embajador di México que lo era Caso, que el Prosi dente Leguía, y el pueblo del Perú, ve rían con agrado que no usara esa me dalla en las recepciones oficiales, Caso oyó el recado, silenció su res puesta, se despidió amablemente de si visitante, y al otro día Antonio Caso sin ostentaciones, sin escándalos, sit hacer incidentes indecorosos, lucía poi los salones oficiales su medalla de Chi le. Después la abandonó y refiriéndose al incidente, en la amable confianza coi que nos distinguía, nos Si hubiera en el Perú algún chile.
no, yo no dejaría de usar esa medalla Tal es Caso. Un hombre noble y ama ble e inteligente.
Más tarde la censura diplomática cayó sobre Antonio Caso por otro su ceso. Ante la estatua de San Martín Antonio Caso había pronunciado u enorme y solemne discurso lleno de be.
llezas y de conceptos, sin leerlo, contra lo protocolar y lo usado, y fustigant como él solo contra los Estados Unidos.
Había logrado una ovación, el mismo Presidente Leguía ante los sucesos ne pudo menos que felicitarlo y agrade, cerle el discurso como una honra pars el Perú; pero Caso cayó en pecado mortal, y los que se atienen al ritual de los protocolos, no dejaron de hincarle el diente por sus inusitados procederes. Qué quiere usted. nos decía aquella noche al volver de un baile del que nos había invitado a salirnos jun.
tos para disfrutar de la hermosura de cielo limeño alumbrado con el faro etei no de la luna qué quiere usted. Mi.
discursos los siento y no los pienso. Es casi seguro que si se escribieran antes habría que depurarlos de malezas y de cosas indecibles. En el de esta tarde Pershing me oía; pero no era posible dejar de decir mis ideas por esta aquella persona, cuando me oye el mundo entero mis docirao.
Ligeros detalles son estos que ape nas darán una idea de aquel gran pensador mexicano. Nosotros le manifestamos admiración y le dijimos que tan.
to su persona como la de sus compañeTos, nos reconciliaban con su patria contra la que tuvimos prejuicios muy hondos.
Si por estos detalles se logra también tener en Costa Rica alguna simpatía por aquel grande hombre que tanto admira a Costa Rica y que tan buenas referencias hace nuestras, y que ta robles ideas alimenta, y tan bueno gestos tiene, habremos logrado uno de nuestros objetos al escribir estas crónicas.
RAMON CALDERA El beneficio de Almanseño