TAICS uue reurero de TRIBUNA Página El Cementerio del progreso será que por allí, por esos monumentos, por esas estatuas, por esos edificios es por donde se han ido por un tiempo, los mejores ideales, los más gratos recuerdos, los más caros y más santos haberes.
Cuántas inauguraciones fueron la non ta lujosa y fantástica de estas fiestas centenarias. Son innumerables y bastarian para acallar las rebeldías del espíritu, si no fuera que el espíritu al contemplar todo pasaje, toda obra, todo individuo, no busca sino espiritu.
La estatua de Sucre, que como las otras estatuas de los libertadores se le vanta amenazante y destructora, aun así, podría ser la consagración de su recuerdo; pero a la orilla de esa esta tua deben estar gimientes, dolorosas, tétricas, las tumbas de quién sabe cuán tos sacrificios, y el recuerdo del héroe irá unido al recuerdo de la infamia. El museo arqueológico en donde la habi lidad de los inteligentes ha logrado re Replicando a la Sra. Rodríguez de Cornick Con todo el rendimiento debido a forma anhelada, antes de que este gablecido, cuya BASE FUNDAMENTAL la distinguida señora honra y prez del nadn la partida en lo principal; por CONSISTE EN EL SUFRAGIO UNI.
bello sexo co terráreo, tengo que deue esos detalles pueden fácilmente di VERSAL cir, ante todo, que me era completar las fuerzas llamadas a unirse co El señor Tinoco Intentó can biar mente desconocido el seudónimo de oamo solo hombre para el vencimiento dicho sistema y no hay probabilidad de galana escritora y tuvo por cierto del ploto cardinal quo haya quien quiera seguir sus hue.
equivocadamente. lo confieso que solo Coristada esa vietoria, tiempo hay llas un enemigo fireconciliatio de la muer para fathr detalles, Ni hay razón alguna que abone un eabria fuese autor del acrito entr Procode de otra manera, equivals sistema mixto, en que el sufragio sea el cual suponiendolo del sexo fe. arre dejar que la res pers:gulda en el universal para el sufragante mnaonica metl ron alguna dureza, mi ver bien campo se ponky a salvo, mientras los y limitado y condicional para el sura merecida.
cazadores disputar sobre el se apunta sante femenino, Sabida la verdad dil caso, presento al tronco, a la cabeza o a las patas. Un sistema semejante, democrático mis excuss a la digna señora do Cor. Nuestra resta ahora en pleno o popular en parte y oligarquico o at niek, en la esperanza de que se in bon campo, el cismi que distinguida tocrático en parte sería una cercepción dadosamente acogidas escritora levanta. puede muy bien ha. absurda Entrando en el fondo det asunto, cer que re plerda los por buscar Considero inoficioso tratar con más añadire que de acuerdo en los más o menos, extension de la materia.
triviales principios de toda polémica, he Lo peor de chines que no estil en Respetuosamente pensado y plenzo que es un grave e or in mano del Congreso Constitucional PEREZ ZELEDON traer al debate los detalles de la re. alterar el sistena do berno esta. Alajuela, de febrero de 1925.
sempre hemos creído que los progre nile los pueblos, deben ser la obra esánea de ellos mismos, la que reve10 propia indiosincracia, la que le cabrice para siempre, la que simbolice spíritu y la que haga la inmortalide la patria. Toda imposición, todo Solo personal de gloria, toda obra de ntad individual, puede ser más o os bella, de mayor o menor utilipero si sus cimientos se levantasobre el terreno de una convenienpronto el terremoto del odio la cona la muerte. es que los pueblos como los individuos, que pueden Stir el espejismo de los bienestares habidos; pero sintiendo dentro de onciencia el remordimiento y el des io que les impulsa a limpiar un día ro de malezas su propio espíritu.
uando para justificar las inversiodel dinero de la nación o para jusar con piedras preciosas actos conios a la libertad o a las democracias los derechos sagrados de los ciudabos, hay Gobernantes que construyen Icios, erigen monumentos y realizan is de sospechosas fastuosidades, enNies, ese progreso, lejos de ser la cuad del pueblo, lejos de ser el anhelo un país, se convierte en arma que a, que destruye y que aniquila, en raltante realidad que se levanta para ndir el pavor del poder sobre los adanos. Ningún gobernante podrá er desaparecer sus pecados contraa la libertad o contrarios a la ley, más que sobre los despojos de esa mrtad y de esa ley levante una mara1 tal, que fuera la octava del mundo.
progreso no es la obra de un hombre la resultante de la vanidad de un ierno. Es la propia necesidad de un Lblo que impera y se cristaliza, o es lusión de patria entera que vuela al con las alas de su propio anhelo.
Asistiendo a todas estas inaugurajes de Lima que fueron la parte Licipal de los programas oficiales ante las fiestas del Centenario de ucucho, nos hacíamos todas estas re ciones. Aquellas obras, bellas o 00, ia para echarnos un poco de tierra os ojos de modo que a nuestra visde ocultaran las llagas que debieran rojar a quienes las causarun. Penamos en que aquellas obras nontales, aquellos edificios suntuosos, ellos palacios de cuentos de ladas, de ser las manifestaciones de la del progreso eran los prerusores su muerte. Pensalmoe en que si un momento hubiera desaparecido la nuestra mirada la noble cindad Los vireyes para leiurnos en conjun olamente las obras de la tiranja, la imos creido que estábamos en el iniso cementerio de los ideales redupus a la piedra al lodo. Aquellos gumentos son tumbas, son lápida: erarias, son, como dio el antiguo 0, sepuleros blanqueados. pueblo de Lima y los cue asi ti.
a estas fiestas veíamos con ojos al ecer de admiración satisfactoria pa os impositores del progtes, aquemaravillas arquitectonicas que se Intan en medio del dolor de la ciupero cuando hayan pasado los mips de la sorpresa, lo que verá el prede Lima y lo que veremos root:os, hacer las reliquias de los incas, puede ser muy provechoso: pero es sobre todo una afrenta. Para construirlo ha habi do necesidad de despojar a muchos ciudadanos de sus propias reliquias, todo porque este gobierno que quiere rendirle hasta el tributo debido a los an.
tepasados, no ha sabido hacer volver por donde se fueron los mejores y más grandiosos recuerdos de aquella raza, fuerte, invencible, enorme como su padre el Sol. El Hospital es un palacio, es una ciudad, es suntuoso. En aquellos pabellones cabría toda la humanidad doliente. Al pronto, se diría que una piadosa mano ha tocado el espíritu de sus constructores, pero cuando se pien.
sa que esos salones de caridad han de servir más que para la humanidad doliente para las mismas víctimas de quienes lo construyeron, entonces la admiración se convierte en indignación, Aquella misma tarde las tropas del Gobiero, habían dado muerte cruel a unos cuantos jóvenes de Cajamarca y habían flagelado a otros. mientras las doctas manos del Arzobispo sobre el altar echaban bendiciones, nosotros estábamos pensando en que no tardaria la hora en que por esas puertas abiertas a la caridad, han de entrar las víctimas propiciatorias. El Palacio Epis.
copal hecho como una joya, tal cual si hubieran resucitado para sólo ello los orfebres de la colonia con su espíritu morisco y su tradicional arquitectura, era también otro símbolo terrible, lejos de ser un orgullo de los creyentes. Era el símbolo del perdón para todo, el sím bolo de la humildad humillante, de la divinidad reducida a instrumento de pa siones humanas. aquel panteón de los Héroes, digno de Grecia, en donde están los bustos de los libertadores fué, a decir verdad la obra más hermosa, si no fuera que fué también la más expresiva, el Panteón de Los Libertadores.
y acaso también de la libertad.
STUDEBAKER Studebaket na Todo aquello, toda esa hermosura, toda esa belleza no era más que el polvo de lo antiguo despertando el romanticismo de los pueblos y cegando los ojos a la libertad y al derecho del presente.
Cuando lográban. os salir del bullicio de las inauguraciones, de aquellas valias de bayonetas que obligaban a la reverencia por todo, y nos encontrábamos con los ciudanos traginantes en la lucha por su propia vida, lejos de las fastuosidades, en sus ojos sabíamos leer el gesto de una rebeldía que no tardará en ser el de la república perua en donde si hay malos hombres, también los hay que luchan desesperadamente porque las celebraciones de los aniversarios de la epopeya de la libertad, dejen de ser una agresión a los héroes para convertirse en un homenaje de conciencia y de alma y de verdad.
Quizá para entonces, se inauguren en Lima las verdaderas obras de su propio progreso, de su propio anhelo, de su propio afán. escuelas, centros de cultura, manifestaciones democráticas, alas de libertad, cosas vivas, cosas dignas, cosas que son y han sido siempre el distintivo del noble y valiente pueblo del Perú.
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