2 EL PABELLON LIBERAL CARTA AMOROSA DE UN MARINERO.
un atentado el lunes de la presente semana. Será de veras nacional el rifle con que se hicieron los disparos?
Habrá tomado cartas en el asuinto la respectiva autoridad?
Ya informaremos a nuestros lecنی tores.
Para correr un sudeste de aquesos de rompe y rasga, salíme un dìa toda vela de la bahía de mi casa.
Iba yo por esas calles echando diez millas largas, con más arranque y más tumbos que una barca colombiana.
Cuando alcancé distinguirte, hermosísima fragata, navegando toda vela con bandera desplegada.
Ibas caminando un largo ligera como una barca, con el codaste de popa de buen ajuste en la manga.
Pùseme, al verte, en franquía, dejando pique mis anclas, y después, todo trapo, comencé seguir tus aguas.
En la taberna de enfrente hice temprano mi aguada, y habian perdido la brújula las nublazones de mi alma.
Mas los fuegos de San Telmo que por los topes llevabas, cual dos ristosos fanales hicieron rumbo mi marcha.
Los cabos de tus penoles iban tocar las gavias, cada tumbo de popa que balanceándote dabas.
Orzabas tú en las esquinas y orzaba yo cuando orzabas, y seguía cuando seguías, un largo dándote caza.
Si andabas de vuelta y vuelta, de vaelta y vuelta yo andaba, tu marcha prueba poniendo el timón de mi constancia.
Al verte correr sin rumbo surcando calles y plazas, con la bandera al trinquete cual si practico buscaras.
Dí luego andar, y al momento me puse contigo al habla, diciéndote mis afanes con las bocinas del alma.
Viraste, al verme, de pronto y largaste una andanada que de babor al costado mil rumbos me hizo de cuarta.
Icé mi bandera al punto diciéndote que marchaba, de bolina y viento fresco para el puerto de casaca.
Aferraste vela entonces, echaste bandera blanca, y yo, quedándome al pairo, puse mi apa rejo en facha.
Pero te dije que en lastre pobre de mí! navegaba, y que mis pocos lingotes no eran lingotes de plata. virando por redondo cual si dijera una infamia, con alas y arrastraderas, y derribaste hacia tu casa.
Pasaron dos zingladuras, y tú en el puerto abrigada, calaste los masteleros y afianzaste tus amarras.
Yo navego desde entonces con la bandera media asta, bloqueando todas horas la barra de tu ventana.
Si me acodero tu puerta echo tus rejus mis anclas, zafarrancho de combate hacen todos en tu casa.
Si tienes práctico bordo, dílo y picaré mis anclas, pues no lo sabe tu tìa que es mi diario de vitácora.
Dimelo para que al punto de la vuelta afuera me haga, porque antes daré de quilla que remolcar otra barca.
Pues soy celoso en extremo cual buque de poca manga, y que me rocen los cables mi arboladura no aguanta.
Deja que mire en tus ojos los faros de mi esperanza, y que aspire yo en tu aliento las brisas de la mañana.
Tú eres mi Estrella del Norte. y mi brújula se halla buscándote todas horas, por el imán de mis ansias.
Eres mi horizonte claro, eres mi mar en bonanza, y después de la tormenta serás mi apacible calma.
Eres mi puerto querido; deja que en él eche anclas, pues el viento de tus iras puede romper mis amarras.
Déjame atracar, bien mío, tí por cualquiera banda, y navegar en conserva hacia el golfo de mi estancia.
Que por no andar al garete, pues que ya el timón me falta, voy con la sonda en la mano dar fondo en tu ventena.
Mira que me voy pique, hermosísima fragata, y que sólo me sostiene el ancla de la esperanza.
EL SEÑOR General don Leónidas Correa, nicaragüense distinguido por sus méritos militares, acaba de llegar este país.
Con el mayor gusto le enviamos nuestro respetuoso saludo. Serían LAS RATAS. Las dos inocentes criaturitas, que primera vista parecían ser víctimas de estos roedores, fueron ayer objeto de examen minucioso por parte de la respectiva autoridad.
Un joven Casasola es su padre.
Ojalá que se haga luz en la averiguación de este crinen. porque si son ratas, hay que quemarlas con petróleo, y si no fueron ellas. hay que buscar esos otros animales para lincharlos siquiera.
PALACIO. Es innegable que es la mejo: cautina que existe hoy en esta capital. Tant, los propietarios como los dependientes procuran complacer los que concurren aquel panto de recreo, en donde se pasan horas de verdadero solaz.
Los coktails, bitters, limonadas, ponches y sangrías no tienen rival.
Por lo deniás, bien sabido es que esta casa es obsequiosa y hasta espléndida con sus numerosos marchantes.
Los sanwichs y demás cosas buenas para hacer boca, no pueden ser más baratos (se regalan. José María Esteva.
GACETILLAS AVISO Grave. Según asegura Un ciu.
AL 1y SE SOLICITA 900 dadano en La Prensa Libre del al interés, con hipoteca.
de los corrientes, el señor don Pedro En esta imprenta se darán inforBrenes, de Escasú, fué víctima de mes.
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