EL PABELLON LIBERAL. es Si la faz demacrada y burlona de Quo esla mujer? Eovidioso la mira, y con tristara la desgracia se muestra þá tiempos.
Inclipa taciturno la cabeza Geográficamente considerada, Edusta y severa contigo, abigo Or.
sobre su roca incunmovible y dura.
wua catarata, que com la del trga, sabe, al menos, que busoNiagara; nos Relista ya nos atraee al Sirve de escarnio 31:9 demás condore tros 10 fomos agenos fus sufricontemplarla.
Que saidan en las cambres de granito, mi ntos, Astronómicamcote un astro que del hondo espacio triunfadores, Eo el trance terrible que tu señora encantador, rodeado como Satórno Banan su cuello en mares de eolores tú acabar de pasar, no podemos de un anillo de oro que gira en una Al desgarrar la aurora el infinito.
hacer otra cosa que desear resignem órbita muy limitada.
En la noche, en los bondos agujeros ción para ambos. Fisicainente es un término meDe sa peñión, donde las brisas suaves.
Se refugiad, el sueña cosas graves: tálico que se dilata al calor del orNunca está uno Ya, que eleve en el aire los corderos, yapidad gallo o ta y bien, que no Políticamento és el Poder le Ya, que agarra en las nubes las aves, desee estar mejor; ni tan mal, que Mas, se mira las alas compongido no pudiera estar peor.
gislativo que se impone al EjecutiY no balla en ellas ni siquiera rastros.
vo y el partido constante de oposiProverbio italiano.
ció, De aquel tiempo en que bahiera basta dido El orgullo es el complemento de Socialmente es la compañera Colgar su enorme y silencio Aido la ignorancia.
inseparable del honbre, la cauca De las rubias pestañas de los astros Fontenelle. principal de sa felicidad su derdiCuando, al alzarse en ipauditos vuelo cha, el abrigo el verdugo de sus Bozaba con el arco de sus plamas hijos.
Decla un scjeto cierto amigo Los bruñidos cristales de los hielos. Magnéticamente es una brúju Al hundirse en el polvo de las brumas pobre: la que sirve de guía al hombre en Bajo el zátiro inmengo de los cielos; www. Me pareces que llevas un pan.
Bu peregrinación por el mundo.
Lalón muy corto Cuando, al ragir el Rey de los titanes. Botánicamcato es una hermost.
El hondo mar que eterna rabia aliénita. Dejáte, replicó tél; que antes sima planta que produce la vez de que yo pueda hacerine otro, tiem flores y espinar, frutos dulces y 8Llegaba a los igalvomos vulcanes Por sentir estertores de tormenta po habrá tenido para crecer. margos, dando aroma de vida jugo y escuchar aleteos de huracanes; venono Cuando, ávido de luz y ambientes puros Zoológicamente es un lindísimo ¿Qué puede causarme enojos Del sol siguiendo el luminoso paso, bípedo, pero feroz inilomable.
Si en cualquier parte del suelo, Desde los altos peñascales duros Teológicamente et un misterio He alumbran desde este cielo Iba alumbrar sus ojos. verdi oseuros Los dos soles de tus ojus?
incomprensible ante el. cual bay que en los rojos incendios del ocaso.
doblegarse sin razonar, cerrando los Fi de Quevedo.
ojos y prestando fe a los que nos diYO CODOzco un poeta desplomado Quien dice ignorancia. dice ce ce, porque de lo contrario se incuComo el condor aquel, cuya presencia guedad, preocupaciones, error, surre en su indignación.
Es un mísero eseombro del pasado.
peretición, deepotismo, arbitrarieciad. Espiritualnente es el ángel o ¡Ya no puede volar! Hay vive aladó humillacióll, miseria inmoralidad. el demonio del hogar doaréstico, el la roca fatal de la impotencia.
Victor Hugo.
consuelo la desesperación del alEso pensé de tt; mas hoy que he visto Materialmente es ci ser más Que tú, viejo condor, con rudo aliento DESDE el martes próximo; conprecioso de la creación, sin el cual Subes aún, rasgando el firmarento, no se puede vivir en el mundo. Mo esparto de mi error y me contristo tinuaremos la lista de los suscritores Presa del más atroz remordimiento. Del Diario de Occidente)
morosos; pues es bien sabido que a El mismo ores de eyer. La artera, bala nosotros no nos regalan eu trabajo Que cierto cazador disparó un dia los operarios; ni el papel y la tinta EL CONDOR VIEJO Contra ti, no logró romperte el ala; los fabricantes, y que nuestra labor Rafael Pambo.
No eres monia ambulante todarís en algo debe apreciarsė.
To espíritu inmortal vigor exhala!
En una roca de la sierra umbria Esperamos, pues, que nadie se dé Vire un condor ya viejo y desplazado, Perdóname, poeta, si atrevido por resentido, puesto que nuestro Que comtempla la bóveda vacía Quise herirts también; fúlgidos rastros propósito solo se reduce que nos Con tan horda y tena2 melancolia, Nos dejas al rolar, no estás vencido!
paguen lo que se nos debe.
Cual si estuviese alli petrificado.
Puedes aún colgar ta enorme nido El que desee ser auscritor gratis, Ya no puede volar y cuando empieza De les rubias pestažas de los estros!
que lo avise con tiempo.
La blanca nubos coronar la altura, JULIO FLOREZ.
ma.
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