En el mundo existen aproximaLos robles damente unas 450 especies de robles. El roble adopta todas las formas: un gran árbol, un arbusto, un árbol achaparrado; los hay de hoja caduca y de hoja perenne; se encuentran en Europa, en Asia y en América, pero el roble de los grabados es el roble inglés, el carvallo.
Quercus robur: amplio y de lento crecimiento, anguloso y de robustas ramas.
Debo apresurarme a mencionar que en Inglaterra y en el norte de Europa existen dos especies: robus y petraea y que son bastante distintos. aunque se hibridan a menudo) y que además me es imposible decir cuál de las dos ha servido de modelo para construir la imagen típica del roble.
Esencialmente el robur es el árbol ancho, no muy alto, de que nos habla el Autocrat mientras que el roble albar. petraea, es más alto y con un aire ascendente más marcado.
Aunque la verdad es que todo depende del lugar en que crecen: cuando lo hacen a cielo abierto ambos forman árboles abiertos de gran envergadura; en un bosque cerrado ambos tienden a dirigirse hacia las alturas en busca de la luz. Por tanto, lo que hace falta recordar es que el robur tiene sus bellotas colgando de un pendúlo mientras que en el petraea están casi pegados a las ramillas. Con las hojas ocurre lo contrario: las hojas del primero tienen un pecíolo muy corto por lo que forman apretados grupos en el extremo de las ramillas de forma que a través de ellas se puede ver el cielo. Las hojas del petraea forman una masa continua y densa que da una sombra uniforme y regular.
Hacia la mitad del siglo XVIII la mayoría de los robles que pobiaban Europa y las regiones mediterráneas eran bien conocidos y cultivados entusiásticamente. En los viveros se obtuvieron gran número de híbridos valiosos procedentes de un cultivo intensivo de las distintas especies de robles, unos al lado de los otros sin importar su lugar de origen.
El roble de Turner, el roble de Fulham y el roble de Kew son ejemplos que en su tiempo tuvieron merecida fama. El más conocido y el más utilizado en la actualidad es un híbrido obtenido por azar en el vivero de Lucombe Pince, en Exeter, en 1762. Sus padres fueron el vigoroso roble de Turquía (Q. cerris)
y el alcornoque (Q. suber. de hoja perenne. El roble de Lucombe (Q. Hispanica Lucombeana. ha heredado de sus padres las mejores características excepto el producir corcho. Es un árbol gigantesco y elegante, cuyas hojas son casi perennes y de un color verde resplandeciente, con reflejos dorados.
Los robles continúan reproduciéndose de modo natural en la actualidad pero han dejado de ser cultivados seguramente debido a que su crecimiento es muy lento.
Sobre un terreno que fue total mente desbrozado hace 15 años se elevan actualmente robles de me.
tros de altura que posiblemente proceden de bellotas que los arrendejos diseminaron sobre el campo el mismo año en que fue desbrozado.
Claro está que si hubieran sido álamos podrían tener en la actualidad unos 18 metros, pero creo que, a pesar de ello, metros en 15 años (o lo que es lo mismo, más de me.
tros en 10 años) no puede decirse que sea un crecimiento muy lento.
No deben subestimarse los robles jóvenes como árboles ornamentales.
Los nuevos brotes que a mediados del verano cubren de esplendor todos los robles producen un magnífico efecto en los robles jóvenes.
Alguno de ellos aparece de vez en cuando tan cubierto de hojas nuevas, rosadas y doradas, que ningún cerezo en flor podría superar su espectacular efecto; y además tardan seis semanas en pasar de un encantador verde pálido a un verde oscuالر APRENDAMOS Replica Los grandes robledales de la zona central de Francia, en donde se encuentran los robles más grandes de Europa, en particular el bosque de Troncais plantado durante el siglo XVIII por Colbert para cubrir las necesidades de la Niarina, son bosques de roble albar. En la parte oeste de Inglaterra predomina el roble albar.
ro.
El roble blanco americano, la más típica de las especies americanas, con su poderosa cima.
Por el contrario en el este, el centro y el sur de Inglaterra, los gigantescos árboles de cabeza truncada, de los que se dice que tienen más de 500 años, y sus descendientes de nudosas ramas y poderoso follaje son carvallos. En lo que concierne a las necesidades de la Marina, nun.
ca ha habido suficientes robles. Gracias a su desmañado y anguloso crecimiento, sus ramas son tan robustas que suministran a los astilleros el tipo de maderos necesarios para la construcción de sólidos navios.
Lord Burghley, ministro de Hacienda de la reina Isabel, fue el primero que plantó robles. Sembró a la vez bellotas y bayas de acebo, con lo que logró que el terreno estuviera siempre verde. Dióse cuenta de que las bellotas de mayor tamaño eran las que formaban los mejores árboles por lo que las seleccionó y plantó únicamente éstas.
Su cultivo intensivo ha dado lugar a gran número de variedades or namentales, de las cuales tal vez la mayor sea una versión erecta del carvallo, con un porte semejante al del álamo de Lombardía (Q. robur Fastigiata. Las otras son variedades poco frecuentes entre las que cabe citar una variedad de hojas pinnadas (Q. rosacea Filicifolia. otra púrpura (Q. robur. Atropurpurea. otra dorada (Q. robur Concordia. y una variedad variegada muy poco vigorosa (Q. El roble, durante su floración en la época robur Variegata. seca, impregna el ambiente circundante visitantes.
con su aroma y el zumbido de los insectos Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
El roble negro americano (Q. velutina) es una de las especies de roble más altas.
Forma una torre maciza de follaje verde oscuro