24 LA REPUBLICA. Domingo de mayo de 1982 La Orden de Buridan Estaba la pájara pinta sentadita en su verde Limón, y apenitas no más se descuida, San José ya le quita a Garrón.
GEVEGUERRA LU pilapia Ahora todo el mundo alega ser judío: el sábado es de descanso.
Desalojaron las piapias el amplio local que tenían en el ombligo del Hotel Ambassador, pues ya allí no quedaba nada que orejear y regresaron a su viejo ostugo de siempre, donde aprestáronse a realizar su improba semanal tarea de espulgar los expedientes levantados sobre todos y cada uno (como dice Canal 7) de los aspirantes a poseer el más alto de los honores que las piapias de ben, pueden, saben, acostumbran, temen, suelen y quieren conferir en su con ticinio dominical y No es lo mismo trabajar también el sábado que trabajar siquiera el sábado.
ABANDERADOS DEL SAGRADO DERECHO VAGABUNDEAR LOS SABADOS RESULTANDO: Año XXII No. 848 EDITORES: Alberto Cañas Alvaro Fernández Roberto Fernández Durán Que desde el día de ayer rige los destinos de esta patria, que quedó mejor para todos, don Luis Alberto Monge, de generales de ley conocidas, 2) Que el hecho apuntado en el resultando precedente indica a todos los que lo quieren entender, que ya don Rodrigo Carazo dejó de regir los destinos de esta patria que nos dejó mejor para todos, desalojó el Zapote, las cadenas rompió, y se fue para su casa, que es de donde había venido.
3) Que con este hecho inexorable, producto de cierta disposición constitucional que lleva el número 134, termina para las piapias una época de bíenan danza, prosperidad, regocijo, petroglifos, altmanndoses, cocodrilos, trasiegos, duetos, manos en el torso, araucarias, cadenas televisibles, inauguraciones, monumentos, fugas de vocales, arnulfos y corderos.
CONSIDERANDO: No es lo mismo deja la maleta en Kansas City que deja la maleta si te cansas. Total, donde hay que poner la mano para escuchar el Himno Nacional?
EL MEDICO CAZADOR TQue hoy las piapias están huérfanas, y que esa orfandad las obliga a la trabajosa tarea de buscar entre la nueva turba gobernante fuentes nuevas de regocijo, nuevos esquemas y parámetros, diferentes modelos, sustitutos para Wilburg y, en fin, a emprender de nuevo la tarea, trepar de nuevo la cuesta y sentirse como pobrecita la huerfanita, que no tiene padre ni madre.
II Que no sólo las venerables piapias sino el país entero, desde la Barra pastoral del Colorado hasta Punta Burica, lamenta la desaparición definitva del carazoalfaroidal gobierno que nos gobernaba y lo gobernaba a usted, y que tan contentos, tan prósperos, tan sonrientes, y tan felices nos tenía a todos, que, al comprender que esa época resplandeciente y deslumbrante de nuestra Patria Historia ha desaparecido para siempre, como la cucarachita mandinga lo siente y lo llora.
III Que este profundo dolor que nos atraviesa y nos lacera, que nos compunje y nos conmueve, sólo se lo debemos al descono cido malsín que en las épocas pretéritas de la Constituyente del 49 introdujo en la Constitución que nos constituciona la imperdonable, cruel y sádica disposición que nos ha obligado a interrumpir el Gobierno de Carazo en el momento en que la patria más esperaba de él y este profundo duelo de la patria llega a nuestra alma al son de lentas campanadas.
POR TANTO: Un doctor muy afamado que jamás cazado había, salió una vez, invitado, a una alegre cacería.
Con cara muy lastimera, confesó el hombre ser lego, diciendo: Es la vez primera que tomo un arma de fuego.
Como mi impericia noto, me vais a tener en vilo. dijo el duelo del coto. Doctor, esté usted tranquilo, Guillermo, el guarda, estará colocado junto a uste, él es práctico y sabrá indicarle. Así lo haré. dijo el guarda. Si señor.
No meterá usted la pata.
Verá usté, señor doctor, los conejos que usté mata.
Siga: en todo mi consejo.
Que un conejo se presenta?
Pues yo digo. Ahí va el conejo. usté tira y lo revienta!
Bueno, bueno, siendo, así. Nada, que no tema usté.
Quietecito junto a mí, chitón y yo avisaré.
Colocóse tembloroso el buen doctor a la espera, cuando un conejo precioso salió de su gaz apera. Ahí va un conejo. le grita el guarda. No vacilar! el doctor se precipita, y ¡pum! dispara al azar. es claro, como falló diez metros la puntería, el conejo se escapó con más vida que tenía.
El guarda puso mal gesto y rascóse la cabeza.
Hubo una pausa, y en esto saltó de pronto otra pieza. Ahí va una liebre, doctor!
jTire usté pronto, o se esconde! pum. el pobre señor disparó. Dios sabe dónde!
Gastó en salvas, sin piedad, lo menos diez tiros. diez!
sin que por casualidad acertara ni una vez.
Guillermo, que no era un zote, sino un guarda muy astuto, dijo para su capote. Éste doctor es muy bruto. No lo pongo como un trapo, mas ya sé lo que he de hacer! al ver pasar un gazapo corriendo a todo correr. Doctor. exclamó Guillermo con rabia mal reprimida¡Ahí va un enfermo. Un enfermo!
y ¡pum. Lo mató enseguida!
VITAL AZA Otorgase la Orden de Buridán de esta semana al desconocido constituyente, vivo o muerto, que tuvo la trágica iniciativa de fijar en cuatro años el período presidencial, sin tener el talento y la visión necesarios para comprender que en 1982 los habitantes de esta patria le cobraríamos y le demandaríamos el habernos obligado a interrumpir el período más brillante de la historia. Decrétase duelo nacional, Instase a los costarricenses a desgarrar sus vestiduras, a gritar cual plañideras, a llorar lágrimas de sangre, a esparcir ceniza sobre sus cabezas y a lamentar de viva voz y por escrito que el régimen que ayer expiró no hubiese sido inmortal, o por lo menos vitalicio. No conociendo las piapias la identidad precisa del recipiente, ordenan que las preseas simbólicas sean colocadas para siempre al pie del monumento al monumento a la bandera, para etema reflexión de los transeúntes y perenne reproche al imprevisor que nos tiene hoy sumidos en las tinieblas, en el dolor y el pésame. Con el fin de que pesquen chamba, ruégase a los ex Maestros Cantores del Zapote a hacerse presentes en la ceremonia, y entonar allí, a dos voces, los macabros acordes del Maestro Chaves. Las delegaciones que asistieron a la triste ceremonia de ayer, quedan convidadas a presenciar y compartir el profundo dolor que am barga a los hijos nobles de esta tierra, invencibles guerreros encontró.
Dado en la Villa de San José de la Boca del Monte a los nueve dias (segundo de los cien) del mes de mayo de MCMLXXXII, año del trasiego de gobierno, de la sintonía pastoral, la fianza de haz de Rabelbayer, el famoso 33. el peaton legislativo, el domingo siete, la volvida a la tierra, los sábados laborables, y el duelo de la patria. Centésimo sexagésimo segundo de la Independencia y cuadragésimo de la segunda misma, según los calderonistas previos a las garantías económicas y Manuel Mora. Año primero del monjato, trigésimo tercero de La República y primero también de la volvida a la tierra de su director, el ex piapio Jota Jota Vargas Gé, Confundida con su séquito de planideras, escoliastas, historiadores, siquiatras, diputados, sindicalistas, médicos, huelguistas, boxeadores, coligalleros, perforadores, escribientes y chupatintas, la Piapia Economa asume la responsabilidad (que es todo un reto) de cumplir con las liturgias, ritos y reglamentos impuestos por la fineza y el carreño para que las personalidades citadas en la presente sentencia puedan recibir con rapidez y limpieza los pergaminos que serviránles de entrada al homenaje. De súbito se procede a emboscar los documentos del caso, que se someten al arrollamiento y maniataje simultáneamente con la pegamentización de los timbres de ley, incluídos los del Sacro Colegio de Periodistas, a los que se les moja la parte de atrás previamente, con el fin de que sirvan de algo al inutilizarse así.
Antes de dar la orden final de remitencia con senda y dulce voz, la y Economa somete todos los pergaminos al vomitivo olor a pestilencia que sale de los gases que emanan de los lacres con que sella la Soberana y hoy Mongil Orden de Buridán. Por una reforma al artículo 134 mejor para todos.
Well doll kweli TUR El sueño dominical compensará con creces las madrugadas sabatinas, que son castigo por haber disfrutado de una Costa Rica mejor para todos.
Doh Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.