LA REPUBLICA. Miércoles 23 de junio de 1982 ¿Está ofuscado el EI OIJ había venido conquistando un prestigio magnífico y, desde luego, las alabanzas de los patriotas. De súbito, zas. comete un error gigantesco. Debemos atribuir la equivocación a fallas visuales: sus detectives son ambliopes o astigmáticos. Esto se reveló en el caso de Manuelito Mora, el chico más obediente de Costa Rica. Digan. cuándo ha imcumplido los ucases de los jerarcas o los mandatos familiares. Jamás! Los lee para memorizarlos o los escucha para grabárselos y ejecutarlos como fueron ordenados. En lo que se refiere a bondad, nadie lo supera; no mata ni una lepisma devorándose los textos sagrados a cuyas enseñanzas se ajusta rigurosamente. Ay de él si no. Nunca le permiten hojear otros libros, los que ponen en duda o aniquilan creencias.
No teman, señores distantes: nada alterará su fonología. Las comillas manifiestan que es palabra ajena: de Unamuno.
Afirma que los comunistas no esgrimen ideas: todo se reduce a sonidos. añado: a frases u oraciones estereotipadas de origen moscovita, que todos los secuaces iteran, haciendo los mismos gestos y ademanes.
Vuelvo al OIJ. Allana la casa donde vive don Manuel y está segura de haber enespejismo! Mis anteojos nuevos me dan las imágenes verdaderas. Los rifles son para bromillas: lanzan agua limpia. Los tiros, canicas. Las granadas: bolas de fútbol. Los gases lacrimógenos, perfumadores para neutralizar la contaminación.
Hay que enseñar a los niños a ser útiles.
Varias cosas que ustedes creen haber des cubierto, son cuadernos, folletos, lápices o conjuntos de boliche. No son artefactos bélicos. También hay juegos educativos, mecanos, por ejemplo, para agilizar la inteligencia y la retentiva. Muchos rompecabezas. Explosivos. No. son las sustancias para hacer las inocentes luces de Bengala.
Lo más grave es que el OIJ acusará a los menores de guardar bazucas. Si son los calidoscopios con los que el niño se recrea al hallarse muy solito: cuando al vecino le llegan dólares y vuela a adquirir más objetos, nuevos y sofisticados. en las jugueterías ad hoc. Hoy es uno de estos días venturosos: el inquilino halla una cajita de música, con La Internacional, último estilo de la fidelidad. su regreso, los habitantes de ambas moradas. Muy burgueses. la cantan con la más honda religiosidad.
Mis duendecitos Numen y Estro suelen burlarse de mi atraso e ingenuidad. Aprovechan mis insomnios para hacerlo. Entonces me enteran: hay otros infantes que también poseen juguetes iguales: Rodriguito y Juancito Jota. Además. qué asombro! Numen expresa. Lilia. Por los cuerpos de la luna. Yo desconocía la novísima interjección. De qué le sirve la sicología. Qué intenta decirme. No se percata usted de la realidad?
Manuel, Rodrigo y Juan José. los tres con el sufijo ito. son adultos que están satisfaciendo una carencia infantil. No tuvieron juguetes en la edad temprana, y ahora que disponen de millones de billetes orgánicos, la resarcen. Qué gusto se dan! Estro sigue. La inflación nos tiene anémicos; estamos débiles de cuerpo y de alma. La vista sufre mucho, pero el ágape que me dio una hada a quien llaman Utopía, me fortaleció. Ahora veo claramente. Pude lograr esta fotografía. Quién se atrevería a negar que es un arsenal gigantesco? EI OIJ dio con él y encontrará innumerables si continúa con el talento y la astucia que ha demostrado. Sé de fuente confiable que será para que jueguen los burócratas de la Universidad de la Paz. Son jovencitos de corazón muy puro. No han escuchado su verborrea?
Ay. Unamuno otra vez! Asoma y sólo emite dos palabras: Oquedad sonora.
Mis duendecitos son alertas y retozones. Estro calla: Numen le roba la ocasión Lilia, como usted ama a los niños, los ve en todas partes. También acuérdese: ya pertenece a la última edad. Tal vez esté sufriendo las alucinaciones del que llaman deterioro senil. Después de todo, es una bella fantasía, asegura Estro para consolarme. el otro malvadillo. Para el nuevo libro, hermano de Nausicas y de Almofar. antes de replicarles, Numen y Estro, se han desvanecido en el aire tábido que estuvo intoxicando a nuestra adorable tierra.
Lilia Ramos contrado un armamento riquísimo. Lamentable yerro. son los juguetes del chico amenazado de secuestro. siempre obtemperante, los acomoda luego de entretenerse unas horas con un vecino, tan bien o mejor provisto como él. Manuelito es el enfant gate de sus allegados aquí y por control remoto: lo endulzan, lo sostienen y él. tiene que reciprocar en alguna forma. Por eso los deja gozar: es el robot mejor fabricado.
Es urgente que los señores del OIJ vayan a consultar a un buen oftalmólogo.
Manuel es un defensor integérrimo de la paz. de ahí que en las fotografías no aparezcan los soldaditos de plomo. esto que aún se venden en algunas tiendas cerca del Mercado Central. Atención a su Las opiniones que contienen los artículos que se publican en esta página, son las personales de quienes los firman y no coinciden, necesariamente, con las del periódico.
La guerra del opio No es la usurpación de las islas MalviTenía que abrir sus puertas y frontenas y Georgias en perjuicio de su legítima ras al comercio internacional (lease dueña, Argentina, la página más bochorcomercio británico) y virtualmente no oponosa en la historia de Inglaterra, país tranerse a la entrada masiva de opio en su tedicionalmente agresor y rapaz con los rritorio. También se le exigió como pueblos débiles, sino la guerra del opio indemnización por el comiso de las que obligó a China a abrir de par en par 20. 000 cajas de opio, que habían sido sus puertas a la fatídica droga, para que quemadas, la suma de 21 millones de fuera el vicio nacional masivo y degeneratiPor Guillermo Loría dólares, que también cubría la humillavo y, en consecuencia, la muerte y la ruición sufrida por varios funcionarios inna de millones de seres humanos.
que tanto estaba afectando la balanza de opio que iban a entrar de contrabando y gleses que fueron hechos prisioneros por En los primeros quinquenios del siglo pagos con China en perjuicio de los sacro la tripulación de un barco británico mató los chinos.
XIX se habían puesto de moda en Euro santos intereses británicos, a golpes a un alto funcionario imperial Además, Inglaterra le exigió a China pa muchos productos chinos a causa de Y, claro, dieron con la solución ideal o mandarin, lo que motivó que las auto que debía pagar esa indemnización antes su exotismo. En primera línea estaba el que también se le habría ocurrido en igua rida des chinas exigieran la entrega de los del 31 de diciembre de 1842, so pena de té y le seguían la porcelana, la seda, los les circunstancias, al siniestro personaje culpables, a lo que se negó el capitán de la quedarse con algunas islas del litoral chimuebles laqueados, los biombos, kimonos shakespeariano Shylock, que exigía un nave. Como réplica vino otro edicto im no.
y abanicos pintados o bordados a mano y pedazo de su corazón a sus deudores co perial prohibiendo a todo ciudadano del Al ver que no podía detener la avalanlas estatuillas y filigranas de jade, bronce mo garantía de pago: había que obligar imperio avituallar barcos ingleses, es cha de la nefasta droga, China se dedicó coral y marfil, etc. En cambio a los chi a los chinos a aceptar opio en vez de ba decir, proveerlos de agua y viveres. a cultivarla en grande escala, con la innos, dueños de una civilización que se rras de plata en pago de sus mercancías. Lo anterior bastó para que Inglaterra tención de abaratarla por la abundancia perdía en la noche de los tiempos que Claro que la moral anduvo fugitiva de esta declarara la guerra a China, Escuadras de y desanimar a los ingleses del sucio coconsideraban bárbaros a los europeos no fórmula. Como el emperador de Roma esa nación bombardearon y ocuparon is mercio. Pero a estas alturas surgió otro les interesaba las mercancías que éstos les Vespasiano que impuso un tributo so las y puertos del imperio. Murieron interesado: los Estados Unidos de Norteofrecían y que estimaban de inferior cali bre las letrinas de Roma y al afearle su muchos chinos pocos ingleses, porque el américa que querían participar en los bedad a las suyas, como productos toscos y codicia su propio hijo, sacó un denario armamento de los primeros era anticuado neficios del tráfico odioso, comprando rústicos de pueblos poco civilizados. Exi. moneda de la época) y al tiempo que la y el de segundos la última palabra en esa la droga a Turquía, país tradicionalmente gieron a los mercaderes ingleses, que esta acercaba a su nariz, exclamo: Non olet época. Esta guerra comenzó en 1839 y productor de la misma, y vendiéndola a ban ansiosos de comerciar con ellos, que o sea que el dinero no huele. Para la moterminó en 1842. China tuvo que pedir los chinos.
sólo aceptarían barras de plata a cambio ral victoriana de entonces, el opio tampola paz y ésta se firmó en la forma más Es decir, estas dos respetables nacio de sus productos. Los ingleses estuvieron co tenía olor. Inglaterra podía proveer onerosa para ella en el barco de guerra nes que precisamente ahora son aliadas de acuerdo. El gobierno imperial de Chi se masivamente de esta droga, gracias a británico Conrwallis anclado en la rada para aplastar a la Argentina, más de cien na les dio licencia, aunque muy condicio las plantaciones de adormidera que culti de Nankin el de agosto de 1842. En años antes de los gansters norteamerinada, para abrir al comercio británico, vaban los nativos de una región del Sures virtud del tratado, China perdía su sobe canos, se dedicaban al apestoso comercio el puerto de cantón. El Gobierno ingles te de la India. Se les ordenó que amplia ranía sobre varios puertos suyos, incluso de las drogas, envenenando a un pueblo nombró a Lord Napier como superinten rán los cultivos y se les brindó créditos Hong Kong de millones de seres humanos.
dente suyo para el comercio con China a y asistencia técnica. No tardaron en introtravés de Cantón, pero como éste falleció ducirse en China grandes cargamentos de a poco tiempo de ocupar el cargo, fue sus opio, a pesar de la vigencia de un edicto tituido por el futuro almirante Elliot. del emperador Tao Kwang (1820 1850)
El comercio entre Inglaterra y China que prohibía la importación, cultivo y marchaba pero con beneficios muchos consumo de la mal di ta droga, so pena de mayores para China que para Inglaterra, la vida, Por este tiempo en China se cultiTeresa Randulfe de Constenla Se decía entonces que cuando un barco vaba en pequeña escala la adormidora inglés zarpaba hacia China, las nueve dé y rara vez se fumaba el opio, al que se Estamos aún bajo la impresión de unos presentar síntomas de evidente ayoría cimas partes de su largos meses de ansiedad, de entusiasmo y de edad y la necesitamos, porque tenemos le atribuían virtudes medicinales, pero carga eran barras de plata y una décima, mercancias europeas muchos problemas que resolver, muchos esta avalancha de la droga fue algo dis de zozobra. No podemos todavía cantar principalmente inglesas, por si los chinos victoria, no está la lid definitivamente los exclusivos y privativos. Hemos sabido tinto. Los jóvenes de la clase rica comenganada. Tampoco es aún el momento de exponer los derechos y no debemos cejar se dignaban aceptarlas.
zaron a fumarlo por esnobismo, muy la crítica. Sin embargo podemos ya enjui en la demanda, pero debemos mantener Muy pronto esta situación se convirtió pronto le siguió el resto de la aristocracia, ciar en globo, en algunos de sus aspectos, una actitud serena, serenamente enérgica, en un enorme drenaje monetario para la los altos dignatorios del imperio, los este mes largo de nuevos rumbos. he más altivamente civil, defendiendo los deGran Bretaña. Había que parar esto a tosacerdotes taoístas y budistas, la clase mos de enjuiciarlo sin espíritu de partido, rechos sin temor ni retroceso y acuerpanda costa y los ventrudos potentados de la media y últimamente, hasta la clase más ni de clase, simplemente como costarrido las decisiones de gobiern cuando las City, de la Cámara de los Lores, de la miserable, para aliviar su vida in frahuma censes. tenemos que resaltar un suceso circunstancias nos lo exijan, respaldándoBolsa y del Lloyd, así como los primeros provechoso, hemos visto un avance en lo y exigiendo firmeza con ese respaldo na.
ministros de Su Graciosa Magestad la Reinuestra reconquista espiritual, un acrecen. sobre todo cuando las medidas a tomar De ser el opio una rareza se convirtió tamiento de solidaridad y de civilidad en no sean precisamente las más populares o na Victoria, los señores Lord Melbour en un vicio nacional. Vino entonces otro nuestro pueblo. Empezamos a saber senlas que más complazcan a grupos aislane y Robert Peel, este último de ascendecreto imperial a reafirmar lo dispuesto tirnos unidos y a saber luchar por el dedos, y siempre que tengamos el franco e dencia judía, pondrían en prensa sus se por el anterior en contra del opio, lo que recho y la justicia y a dolernos de la intimo convencimiento de que estas nuessos para dar con una conveniente solu agrió las cosas. Para peores los aduaneros situación de los más necesitados.
tras aspiraciones abarquen todo lo que el ción al engorroso y ruinoso problema, chinos detectaron unas 20. 000 cajas de Los costarricenses comenzamos ya a costarricense necesita y se le debe en justicia.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
Será posible la victoria