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LA REPUBLICA. Martes de junio de 1984 Campo pagado ANTE EL DOLOR DE MADRES COSTARRICENSES LOS VARONES DE COSTA RICA sepan hacer homenaje a nuestra historia, y que, sin dobleces, sin importar cuándo, cómo, ni dónde, juntos demos el frente como si supieron hacer nuestros antepasados.
No tenemos tiempo para titubeos, QUEREMOS a nuestros hombres a la altura de las circunstancias y queremos que, con nosotros, le reclamen al gobierno de don Luis Alberto Monge definiciones, no permitiendo genuflexiones de cintura frente a los nueve comandantes para quienes Costa Rica es una espina clavada en el costado.
Sin debilidad ni claudicación, mirando a los ojos al tigre que está devorando a nuestros compatriotas y porciones de nuestro sistema republicano; conscientes de que la Patria costarricense está atravesando los peores momentos de su historia, comparables apenas con aque llos aciagos días en que don Juan Rafael Mora se vio obligado a llamar a las armas. Pero, guardando la distancia entre la magnitud de la amenaza de entonces y la estatura de aquel Benemérito y de quie nes lo acompañaban, y de algunos de los que hoy nos gobiernan y se dividen en procura de ayudar a los rojos vecinos del Norte, venimos como mujeres costarricenses, madres, esposas, hermanas, seres que amamos y sufrimos, que reímos y lloramos, a plantearle a los hombres de esta Nación, la necesidad de vestir ropajes viriles y de decirle, a voz en cuello a los Comandantes nicaragüenses que nos amenazan, nos colocan en un nivel denigrante de hipotética inferioridad, y matan a nuestros hermanos, que no somos nosotros los que al primer gesto de amenaza, peor aún de agresión asesina, vamos a salir corriendo, ni los que, por altas que sean las voces de los que nos amenazan, o fuertes las armas que nos hieren, vamos a temblar, porque, ante el peligro en que se sume a la Patria, más fiero, más heroicos sabremos ser los costarricenses.
Como mujeres no estamos llamando a la guerra. QUEREMOS una Patria digna y libre para todos nosotros ahora, que será el legado para nuestros hijos. No es nuestro afán agitar banderas de lucha, pero si estamos llamando a ser decorosos y enarbolar la bandera de la Patria, por encima de simpatías políticas o de compromisos ideológicos, porque, en estos momentos cruciales, SE ESTA CON LA PATRIA, costarricenses, SE ESTA CONTRA ELLA.
Malditos los hijos de nuestro suelo que abjuran de esta Patria para entregarla a la fiera comunista. Benditos los que, en caso llegado, sepan regar con su sangre los campos de esta tierra de libertad, de justicia y democracia. Mil veces benditos los que enhiestos sepan defender a Costa Rica con el candor heroico de Santamaría, el valor te merario de Alfaro Ruiz y la hidalguía del General Quirós!
Esperamos que Uds. esposos, padres, hijos o hermanos nuestros, NOS CONSTITUIMOS EN SESION PERMANENTE Claudia Cascante de Rojas Olga Marta Ulate Elena Sobrado de Murray Tirsa Bustamante de Rivera Vera Tinoco de Iglesias Rosa Riba Muñoz María Eugenia Alfaro de Carazo Vilma Agüero de Cruz Orfilia de Cortez Sarita Struck Gutiérrez May Zürcher Acuña de Morales Ofelia Calvo de Lara Luz Argentina de Obregón Emilia Herrero de Hernández Clarissa Mora Carmen Cornejo Méndez Céd. 094 2613 380 153 012 3160 219 751 052 5113 106 442 106 051 307 353 041 7890 121 261 039 154 105 2833 053 6056 134 200 056 4018 145 899 El ser cip me Para mayor información llamar a los teléfonos: 28 25 45 21 32 35 22 71 22 24 27 23 28 12 41 28 21 11 Firma Responsable, Olga Marta Ulate Rojas Céd: 380 153 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
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