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ANLEDICA US U OCLUDICE 1707 GEC CAMARA NACIONAL DE BANANEROS CN EL TRABAJADOR BANANERO LAS HUELGAS ILEGALES Recientemente, el Sindicato de Trabajadores del Ferrocarril Nacional al Atlántico fue condenado a pagar los daños y perjuicios que causó a un grupo de empresas productoras de banano, por una huelga que declaró y que los Tribunales de Justicia calificaron de ilegal.
La sentencia, dada a conocer hace poco, confirma la jurisprudencia establecida en el sentido de que las huelgas en los servicios públicos están expresamente prohibidas por el Código de Trabajo. señala, también, que como consecuencia de tal prohibición, al sobrevenir la calificación de ilegalidad para la huelga,. los trabajadores se hicieron acreedores a las correspondientes sanciones de orden represivo y sus contratos laborales con la empresa ferrocarrilera quedaron rotos, sin responsabilidad patronal, por mandato expreso del artículo 370 del citado Código.
El fallo sienta un precedente y constituye, a la vez, una advertencia. En lo sucesivo, el trabajador bananero debe meditar sus decisiones. Debe tener claro que las actividades agrícolas, relacionadas con la producción y exportación de banano, están catalogadas como servicio público y que una huelga lo expone a perder todos los beneficios que ha acumulado, comenzando por el empleo cuyo salario promedio mensual es el más alto de toda la actividad agrícola de nuestro país.
Debe pensar en las congojas que para él y su familia representa perder el trabajo, y tener presente que ningún dirigente sindical le va a tender la mano para aliviar sus penas.
Costa Rica atraviesa momentos difíciles. Hay fuerzas interesadas en acabar con la democracia y con toda manifestación de libertad.
Es preciso salirles al paso, unidos quienes creemos en los principios democráticos, para defender las instituciones que han hecho grande al país y para enfrentar los retos del deterioro de la economía.
El sector bananero. trabajadores y empresarios tiene una gran responsabilidad en esta hora. Está en su deber contribuir de nuevo a la consolidación de la democracia.
Los trabajadores están en el legítimo derecho de promover la ampliación de los beneficios que gozan, pero deben estar alertas para no prestarse al juego de los dirigentes extremistas que los arrastran a movimientos políticos dirigidos a desestabilizar el país, a pesar de estar disfrazados con el ropaje de una lucha reivindicatoria de los trabajadores.
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