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4C VENTANA. Domingo 19 de febrero de 1995 Portada SEGURS EN TU NOMBRE SENOR CODIG 10 01 0380 01 0383 a suya es una misión noble, llena de sacrificio, dedicación y vocación. Su vida es un ejemplo de superación y crecimiento espiritual. Mi vida sacerdotal ha estado guiada por el respeto y el amor a Dios.
Por esas razones, Francisco Ulloa ha decidido que el lema que regirá su vida como el futuro y primer Obispo de Limón sea En Tu nombre, Señor.
Una vida llena de piedras y montañas empinadas, como la tierra en la que están sus memorias de infancia, en Cipreses de Cartago. la tierra que lo vio crecer y donde, según dice, no recuerda y ninguna travesura. Yo era un niño muy bueno. expresa, mientras deja ver una sonrisa pícara, y agrega, pregúntele a mi hermano.
Este, José Rafael Ulloa, de inmediato reacciona entusiasmado. Que va. nosotros teníamos una barrita de chiquillos y Pancho (así le llaman sus amigos y familiares al futuro Obispo. era el líder.
Monseñor sonríe y lo mira con ojos de súplica ¿Qué vas acontar?
Poco a poco las anécdotas empiezan a llegar, y el dúo comienza a contar su vida.
01 038 01 135 01 143 01 144 01 634 02 04 02 16 02 41 04 07 06 1: 06 10 LA POBREZA FORTALECE 13 13LUCIA CORTES 2425 La República 30 Lucía Cortés La República Francisco Ulloa creció en las montañas de Cipreses de Cartago, donde moldeó su carácter para el sacerdocio.
32 41 42 43 No me arrepiento de lo que he hecho con mi vida. No he dudado de mi decisión y en el nombre del Señor recibiré este nuevo ministerio. afirma Francisco Ulloa, futuro primer Obispo de Limón.
Su infancia estuvo rodeada de pobreza y de trabajo duro para los tres hermanos Ulloa: Francisco, José Rafael y Ana.
Detrás de ellos, cuidándolos, desvelandosey madrugando para ordeñarlas vacas, sembrar y sobrevivir estaba su madre, doña Berta, viuda de Tarsicio Ulloa. Teníamos que ayudar a mamá, ella quedó viuda muy joven y si queríamos comer teníamos que trabajar muy duro. explica monsenor.
Los hermanos recuerdan con cansancio y orgullo todo lo que hacían: cortar zacate, buscar las vacas (porque no tenían dónde dejarlas y pastaban en la calle. sembrar. mientras Ana ayudaba a su madre en la casa. Te acordás aquella vez que sembramos vainicas y que las ganancias las invertimos en unos colchones. pregunta monseñor a su hermano José Rafael (al que llaman Chepito. Claro. las esteras que teníamos eran durísimas, aunque servían para rascarse las niguas. y se sueltan a reír como en los años de infancia, cuando las travesuras se combinaban con el trabajo. hablando de travesuras, Chepito rompe el hielo, y monseñor lo mira de reojo, silencioso. Recuerdo que en la escuela había un compañero guanacasteco grandote, morenoy muy peleón que nos molestaba y pegaba a todos. Pancho reunió a la barrilla que teníamos y nos comunicó su plan: Primero yo lo ofendo y cuando él me va a pegar todos ustedes se meten a defenderme.
De inmediato interviene su hermano. Pero el plan no funcionó, porque cuando él se devolvió a pegarme (era casi el doble de mi tamaño) los demás se asustaron y me dejaron solo. lo peor fue que mi hermano le dijo a mamá que yo me había quedado peleando en la calle y el recibimiento no fue muy grato. sacerdocio. El líder de la pandilla también reunía a los niños para celebrar misa. En misa, yo admiraba al sacerdote pero creía que era imposible llegar a ser como él, porque éramos una familia humilde. solo podía soñar.
Su interés se confirmó cuando un grupo de misioneros llegó a la escuela y lo invitaron para que les acompañara. Yo era el presidente de la escuela y me preguntaron si tenía interés en hacerme misionero. Les dije que sí, pero que no tenía medios; ellos me propusieron estudiar en España, pero salir de mi país no me gustó, por esa razón no los acompañe. recuerda monseñor.
Su maestra de religión, Rosita Rodríguez, hizo los contactos para que entrara en el Seminario Menor. Después de una entrevista con monseñor Rubén Odio lo aceptaron y pudo ingresar con una beca que el padre Enrique Bolaños (quien luego también fue Obispo) consiguió.
Desde los 12 años su vocación fue creciendo: primero el Seminario Menor y después el Seminario Mayor, bajo la estricta tutela de formadores alemanes. Después de su ordenación sacerdotal, en diciembre de 1964, realizó estudios de sociología en Roma y pastoral en México. en todo este largo camino, monseñor Ulloa es enfático: No me arrepiento de lo que he hecho con mi vida. No he dudado de mi decisión y en el nombre del Señor recibiré este nuevo ministerio.
Lucia Cortés La República El padre Ulloa con el Obispo de Pérez Zeledón, monseñor Ignacio Trejos.
AL SEMINARIO MENOR Desde muy niño Ulloa sintió el llamado del Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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