GALERIA Cinë Mario Giacomelli Thriller a la francesa Nada más que acrobacias Zona mortal (Drop Zone)
Dirección: John Badham. Guión: Peter Barsocchini y John Bishop. Fotografía: Roy Wagner. Música: Hans Zimmer.
Montaje: Frank Morris. Escenografía: Joe Alves. Vestuario: Mary Vogt. Producción: Caruso, Wallis Nicita y Lauren Lloyd. Reparto: Wesley Snipes, Gary Busey, Yancy Butler, Michael Jeter, Corin Nemec, Kyle Secor, Luca Bercovici.
Duración: 103 minutos. Origen: EE. UU. 1994.
Jean Reno y Natalie Portman protagonizan El perfecto asesino. El perfecto asesino cina de 12 años de edad que le pide ayuda: es la úni(The Professional)
ca sobreviviente de una familia masacrada sin piedad Dirección: Luc Besson. Guión: Luc Besson. Foto por asuntos de drogas. Después de cierta reticencia grafía: Thierry Arbogast. Música: Eric Serra. Mon inicial, León adopta a la chiquita instaurando un extaje: Sylvie Landra. Producción: Patrice Ledoux. Re traño enlace de padre hija: ella le enseña a leer, él a parto: Jean Reno, Natalie Portman, Gary Oldman, disparar.
Danny Aiello, Peter Appel, Michael Badaluccio, Las cosas se complican cuando Mathilda descubre Ellen Greene. Duración: 99 minutos. Origen: Fran la identidad de los homicidas de sus parientes e intencia 1994.
ta vengarse: son funcionarios de la DEA al mando del sicópata Stansfield, quien realiza turbios negocios certó el aclamado cineasta francés amparándose bajo un halo de legalidad.
Luc Besson, cuando decidió filmar Los paréntesis intimistas quizá no satisfacen tan El perfecto asesino en inglés y con to como las impactantes secuencias de acción, pero un reparto internacional. Así, puede marcan la diferencia con thriller similares de Hollycompetir directamente con los nortea wood. Besson trata de definir los personajes de mamericanos y evitar el peligro de escuá nera realista, sin agotar la emoción en puras y simples lidos remakes. su anterior hito Ni balaceras.
kita (1990) había sido (mal) copiado El autor camina en la cuerda floja, siempre a punpor John Badham, dando lugar a la in to de precipitarse en la apología de la violencia; sin sulsa La asesina (1993. embargo, mantiene el equilibrio y, en lugar de gloriEste nuevo trabajo podría ser considerado como ficar al matón, lo pinta como una figura trágica.
una prosecución de Nikita. un sujeto secundario de Difícilmente se podría conseguir un intérprete con esa cinta retorna aquí asumiendo el rol protagónico. un rostro menos glamoroso y más interesante que Se trata del solitario y callado León, de profesión Jean Reno. El filme goza de su caracterización intros limpiador. lo cual significa, en la jerga del bajo pectiva, bien acoplada con la espontaneidad de la pemundo, asesino a sueldo. Se encarga de eliminar, en queña debutante Natalie Portman. Gary Oldman, en forma drástica, a los enemigos de importantes jefes cambio, es demasiado histriónico, exagera con los dede la mafia italoamericana.
talles dramáticos y su actuación degenera en una caLeón es analfabeto, toma dos litros de leche dia ricatura, intensa pero poco creíble.
rios, aplancha su ropa, cuida de una mata como si fue Está reconfirmada en pleno la suprema habilidad ra un bebé y casi nunca sale de su pequeño apartamen narrativa de Luc Besson, al grado de impactar con su to alquilado. Su distracción favorita es el cine: lo apa técnica estilizada, pero también de enfocar claramensionan las comedias musicales con Gene Kelly, esca te los temas centrales del filme: la redención moral de patorias del sórdido universo que lo rodea.
un villano, salvado por la inocencia de una niña; y una Su vida cambia cuando conoce a Mathilda, una ve tocante relación destinada a un fracaso inevitable.
Aquí está una muestra ejemplar del cine de acción producido actualmente en Estados Unidos: Zona mortal es un filme de segunda categoría realizado con un presupuesto de primera, tan ruidoso como insignificante, el espectáculo por el espectáculo Mezclando en un solo coctel ingredientes de otras películas recientes como Duro de matar (1990. Pasajero 57 (1992. Caída libre (1993) y unas cuantas más, el guión cuenta las gestas heroicas y pronosticables de un agente de policía, Pete Nessip, quien se opone en forma solitaria a los planes criminales de Ty Moncrief.
Con el apoyo de un genio de la computación convicto, a quien libera en el transcurso de un clamoroso secuestro aéreo, Moncrief organiza asaltos a distintas oficinas de la DEA. Su negocio consiste en vender a la narcomafia información secreta sobre los agentes clandestinos de esa institución.
Nessip actúa también por razones personales: quiere vengar la muerte de su hermano, víctima de los pandilleros. Gracias a su olfato, descubre que ellos cumplen sus misiones utilizando paracaídas y sigue esa pista involucrando a Jessie Crossman, campeona mundial del deporte. Zona mortal no ofrece ningún tipo de sorpresas. El mediocre director John Badham abarcó muchos géneros, sin sobresalir en ninguno: en su filmografía aparecen títulos poco entusiasmantes, aunque taquilleros, como La fiebre del sábado por la noche (1977. Juegos de guerra (1983) y Corto circuito (1986. La labor de Badham es funcional al relato, donde sobra movimiento y violencia, pero le falta estilo e imaginación para traducir un argumento trivial en algo fuera de lo común.
En ello radica precisamente el problema principal de la cinta: nada, ni la abundancia de estrepitosas acrobacias aéreas, hace trascender la absoluta banalidad de la materia.
Wesley Snipes, en un papel que estaba confeccionado para Steven Seagal, demuestra poder cargar sobre sí mismo, con mucha desenvoltura, una película de esta clase, tan repleta de aventuras como vacía de contenido. Ese es el logro de Snipes y, al mismo tiempo, su gran limitación.
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