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GALERIA Domingo 17 desetiembre de 1995 LA REPUBLICA 5B Fórmulas para el amor TONY HIGHGATE ANSA xiste desde hace milenios y parece dispuesto a sobrevivir. Sigue siendo objeto central de las atenciones humanas y motivo de discusiones y confrontación de puntos de vista: es más universales de todos los tiempos, que sobrevive, pero transformado, y en cada época se manifiesta de maneras diferentes y es estudiado bajo nuevas ópticas. Quien quedó atrapado en las redes teóricas del amor es esta vez el sociólogo Anthony Giddens, de Cambridge, que dedicó a este tema su libro La transformación de la intimidad Sexo, amor y erotismo en la sociedad moderna. Un largo estudio donde se descubren los entretelones de las relaciones amorosas y las etapas de su evolución, desde el amor contractual hasta el amor romántico, concluyendo con un análisis de la pareja y el sexo en el siglo XX.
La cara del amor en los tiempos modernos se basa en lo que Giddens llama el sexo dúctil. una síntesis del amor concebido no como sentimiento eterno sino como contrato renovable, en una relación pura sin interferencia de otros intereses que no sean los atinentes exclusivamente al amor y la confianza entre los miembros de la pareja. La palabra clave entre hombres y mujeres de hoy es así negociación. en ella se basa la continuidad de toda relación.
El amor romántico La República El amor, romántico o más intimo, es el tema de la investigación de un sociólogo británico. Qué queda?
El cambio que derivó en la pareja actual empezó con el amor romántico, el primero que se atrevió a cambiar radicalmente la concepción del matrimonio. Maridos y mujeres comienzan a aparecer como socios en una empresa sentimental común. el lenguaje de Giddens parece comercial, pero se refiere precisamente a lo contrario, es decir, que el matrimonio se empieza a concebir a partir del siglo XVIII como el fruto de la fatal atracción del amor. antes? Matrimonios por conveniencia, arreglados por los familiares, establecidos por razones económicas, impulsados por el interés o razones de nobleza y sangre azul. No en vano los trovadores, reyes del amor cortés, habían establecido que no existía amor posible dentro del matrimonio, que el sentimiento verdadero solo cabía en los lazos de una platónica relación con la mujer casada. pero con otro.
En el siglo XVI nace el amor romántico. con él las novelas, el género despreciado por los literatos por ser preferido de las mujeres, que se convirtieron también en sus grandes heroínas. Con el nacimiento del amor romántico por primera vez se asocia el amor a la libertad, a la evasión. Fue la hora de la revolución pálida comparada con la de nuestros días que llevó a la creación del hogar doméstico con la mujer en el centro, adorada como esposa y madre conductora del hogar.
El mismo lugar del que precisamente ahora tratan de escapar las mujeres que viven con un pie casi en el tercer milenio. La mujer fue hilando así su propia libertad, democratizando silenciosamente a la familia en el seno de lo que fue una auténtica revolución de la vida privada. En cuanto a los hombres, la vida solo les reserva duros golpes: hasta su sexo símbolo mítico, valioso amuleto de continuación de la especie no es ahora más que un trozo de carne oscilante que perdió hoy toda relación específica con la reproducción.
El nacimiento de los métodos anticonceptivos es palabra de liberación en la vida sexual femenina, a la vez que los sistemas de fecundación asistida terminan de corroer el papel dominante del hombre en la relación sexual y reproductiva. Así comienza la historia de la sexualidad dúctil. donde hay espacio también para el placer de la mujer, para sus decisiones, para la negociación en el terreno de la pareja, donde ambos están en pie de igualdad.
Anthony Giddens atribuye a los homosexuales un importante papel en la revolución de las costumbres, en la era de la flexibilidad: el sociólogo los une a las mujeres en cuanto pioneros de la reestructuración de la vida privada, en la reformulación de una esfera íntima basada en la satisfacción de las necesidades emocionales.
De las fuertes tensiones que produce el proceso, afirma el sociólogo, está surgiendo la relación pura. destinada a durar en tanto y en cuanto los miembros de la pareja consideren que los beneficios justifican su existencia.
La pareja de hoy pierde también los vínculos: ni parentela, ni conveniencia práctica, ni fines biológicos.
Todo se establece, se contrata sobre la base de los sentimientos y la confianza. Lo que provoca bastantes dificultades a los hombres, no muy acostumbrados a manejarse con tales códigos. Qué queda en la pareja de hoy?
Flexibilidad, pero Giddens no se anima a negar tampoco la precariedad que tanta flexibilidad implica.
El autor del análisis de la vida intima propone que la política de la vida personal exige una renovación de la espiritualidad. Aunque todavía nadie sepa cómo, y aunque Giddens se limite a hacer una historia de la vida intima sin arriesgarse a aventuradas predicciones del futuro, por lo menos esta vez las mujeres esperan no ser las únicas en llevar adelante la tarea. Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
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