Deportes Lunes de diciembre de 1995 LA REPUBLICA 3B 16 Henry Duarte explica su triunfo Ganamos porque la Liga atacó Por su parte, Badú Vieira achacó al calor la culpa de la derrota rojinegra.
lajuela itis.
ARROCERU Barcel Ah epública FELIX ACEVEDO RUIZ Corresponsal de La República Feliz por la victoria, el técnico porteño Henry Duarte señaló que el triunfo sobre la Liga se debió a que supieron contraatacar a un equipo que siempre fue al frente. Se ganó porque Alajuela en todo momento fue a ganar, jugó al frente y eso nos dio espacios que pudimos aprovechar con rápidos contragolpes. Los agarramos desubicados y les hicimos los goles en el momento oportuno. señaló Duarte, quien al finalizar el partido se fue a trabajar a la cancha con los jugadores suplentes.
Para el técnico Duarte, hay que alabarle a los rojinegros el hecho de que en todo momento fueron al frente y quisieron ganar el partido. El problema fue que trataron de forzar el ritmo y lo pagaron caro.
Ellos trataron de llegar al fondo rá.
pido y eso hizo que llevaran el gasto. explicó Duarte. esto, habría que abonarle las lagunas defensivas que dejó la Liga y los errores particulares que cometieron sus jugadores, comentó. El entrenador puntarenense resto importancia a la salida de Arnáez, único hombre de ideas en el mediocampo rojinegro. La Liga cayó porque fue valiente, porque quiso imponer el ritmo.
Pero quien domina el campo, domina las circunstancias del partido y ese fue el Municipal Puntarenas. concluyó Duarte.
Herberth Arley La Republica Trino de la ya soltó el gatillo. Joaquín Guillén ve pasar la pelota en uno de los mensajes poco amistosos del Puerto.
SELANOS desviado del lateral Vargas. Pero Leiner Villalobos sorprendió a la defensa eriza y clavó su zarpazo con el pie derecho.
Cada vez Puntarenas fue más equipo y Alajuela se fue desdibujando, casi como un espejismo bajo el azote solar del Puerto. Gómez perdió el camino en el mediocampo, Mullins quedó solo en punta y la defensa volvió a los viejos problemas.
El cambio de Ricardo Chacón por Mullins también fue un fracaso. Badilla abandonó el lateral para ir a la aventura ofensiva, pero el sacrificio fue vano. Una de sus jugadas dejó a Ledezma frente al portero, pero un regate innecesario lo dejó hablando sin pe lota. por si fuera poco, Chacón protagonizó dos jugadas que pusieron lápida a las ilusiones manudas. En la primera regaló una pelota que conducía y Alexander Cháves se fue sólo contra el portero Mesén. El genial delantero sacó a Marín con gambeta e hizo lo mismo con Mesén, y el portero echó mano al último recurso. Penal.
El tiro justiciero lo ejecutó el mismo Juan Milton Chéves. Poste y red, tensión y júbilo en las gradas. Lunar en el festejo: Alexander vio la segunda amarilla por festejar en la malla.
En la segunda acción Ricardo se fue por la posta angosta, tras golpear a Banana Aguirre por la espalda. Trágica tarde para el defensor.
Como trágica fue la faena manuda en la tormentosa cancha del Lito Pé rez. En ella quedaron disipados sudo res y frustraciones, tras una lucha en alta mar donde naufragaron sus ideas.
Dos hombres de la misma sangre, igual estampa y clase, se encargaron de hundir la nave de Badú. Nunca antes un triunfo tuvo encima el peso de una etiqueta familiar.
Nos afectó el calor Por su parte, el técnico manudo Valdeir Badu Vieira, achacó la derrota al fuerte calor que hizo en el Lito Pérez. La alta temperatura desequilibró psicológicamente a la mitad de mis jugadores. confesó Badú siempre amable con la prensa.
Vieira agregó que en el segundo tiempo se cometieron errores, que también deben atribuirse al calor excesivo. La Liga salió en el segundo tiempo con el pedido mío de mantener la pelota y jugarla en el piso.
En el último intento, el mejor recurso de la Liga es su toque, aunque en esta cancha es muy dificil hacerlo.
Aquí también es muy dificil emplear la velocidad de nuestros hombres de punta. La Liga quedó reducida a la esperanza de que el toque funcionara y no fue así. señaló el estratega liguista. Badú reiteró que el calor fue fundamental en el equilibrio emocional de su equipo y felicitó a Puntarenas, que a todas luces mereció los tres puntos.
ca Herberth Arley La Republica Harold Wallace intenta frenar a Oscar Vargas. El lateral porteño minó de peligro su carril. Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.