B LA REPUBLICA DEPORTE total Lunes 15 de julio de 1996 Tarde de locura LUIS ROJAS GOMEZ DAGOBERTO QUIROS La República 990 CARTAC a fiesta empezó en el Morera Soto, pasó por la pista, atravesó San José, llegó a Tres Ríos y entró en Cartago, en donde hasta el firmamento se vistió de azul.
Finalizado el encuentro, miles de aficionados brumosos se tiraron a la calle para festejar el pase de su equipo a la final del campeonato. Entre risas, cantos, banderas y bocinas enloquecedoras la afición cartaga le dio rienda suelta a la alegría. Solo la estatua de Melico Salazar se quedó quieta con su mirada fija hacia el volcán Irazú; lo demás tuvo movimiento, acción y bullicio.
Entramos a la Vieja Metrópoli, dentro del bus del Cartaginés, a eso de las 3:30 de la tarde, y llegamos a la Basílica casi dos horas después. Era imposible ir más rápido. Cartago era una locura!
Dentro del autobús no estaban todos los jugadores. Marco Tulio Hidalgo, Henry Wood, Hermidio Barrantes, César Chacón, Erick Rodríguez y Jewisson Bennett se vinieron por otros medios; Norman el Pin Gómez se bajó en la parroquia del Carmen.
Miles de aficionados cartagos inundaban las aceras y las calles; la ilusión del subcampeonato y la esperanza de conquistar el campeonato se reflejaba en el rostro CERTO Abriéndose paso lentamente, el bus que transportó a los jugadores brumosos se dirige hacia al Basílica, mientras los jugadores saludan a los aficio nados.
Carlos González La República ព រ Aurelio Pérez La República LA FINAL. Un grupo de aficionados que vieron el partido en un bar cartagi LLENOS DE FE. Frente a la Basílica de los Angeles, cientos de parciales brumosos dieron rienda suelta a su nés, celebran a un solo grito de guerra. Cartago vive. alegría e incluso algunos manudos se dierancadaugelebración del rival.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas der Carlos González la República