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Son casi como dos gotas de agua, y así administraron el país durante los últimos 20 años. Ahora dicen que son diferentes y que harán las cosas de otro modo. El problemas es… ¿cómo creerles?
Tuvieron que recibir un «combazo», primero, y un «balotazo», después, para que se detuvieran a escuchar. De no haber sido por la movilización de la ciudadanía costarricense, no habríamos podido ni siquiera leer, en su principal diario nacional, los artículos del renegado execonomista jefe del Banco Mundial, Joseph Stiglitz, o del crítico profesor de Harvard, Dani Rodrick.
Sin esos golpes, muy probablemente los partidos Unidad Social Cristiana (PUSC) y Liberación Nacional (PLN), la dupla del impopular bipartidismo, seguirían caminando sin ambages hacia la más utópica apertura comercial, la minimalización del Estado y, por supuesto, la nueva acumulación de capital, por medio de la privatización de las rentables empresas y bancos públicos.
Pero, el «combazo» de 2000, y el «balotazo» del pasado domingo 3 de febrero, han obrado tales milagros, que monseñor Román Arrieta bien podría gestionar ante su santidad, en el Vaticano, la beatificación «express» del pueblo de Costa Rica, con el antecedente de la realizada con el fundador del Opus Dei.
Sin embargo, ¿cuán profunda es esta escucha? Más allá de la retórica electoral ¿ha cambiado algo verdaderamente en el PLN y en el PUSC?
Si la economía es la base material para la vida, quienes el 7 de abril acepten elegir entre Abel Pacheco y Rolando Araya, ¿pueden verdaderamente esperar que el país sea conducido por un camino de mayor equidad y solidaridad? ¿Qué dicen al respecto los programas económicos de los candidatos? Y, sobre todo, ¿qué representan quienes integran sus equipos?
PASOS DE ANIMAL GRANDE
Helio Fallas, miembro del equipo económico del candidato del PUSC, parece haber recobrado el optimismo. Recuérdese que ya fue Ministro de Planificación de una administración socialcristiana, y que se vio obligado a renunciar precisamente por no estar de acuerdo con el rumbo económico que se le daba al país.
Y no le faltó razón. Entre tirios y troyanos, Costa Rica fue sujeta de una brutal cirugía plástica. De un país ejemplar por los grados de equidad social logrados, cambió el rostro por el de uno en el cual la riqueza se concentra y la pobreza se estanca y amenaza con crecer.
Desde su labor como coordinador del equipo económico del Proyecto Estado de la Nación, Fallas continuó trabajando para persuadir sobre la necesidad de cambiar el rumbo. Y ahora que la figura de recambio en el PUSC lo ha invitado a volver a creer, ha asumido el reto.
Antes de salir fuera del país, dijo a UNIVERSIDAD que en cuanto al tema de la apertura comercial, lo importante, para el equipo del PUSC, «es el grado de preparación de Costa Rica para participar en tratados de libre comercio». Y agregó que esto incluye la capacitación de la fuerza laboral, el equilibrio entre las distintas naciones, la protección del ambiente, y que la firma de acuerdos comerciales no se lleve a cabo de manera indiscriminada.
Su compañero, y coordinador del equipo económico de Abel Pacheco, el diputado Álvaro Trejos, desarrolló un poco más estas ideas. (Ver recuadro «Seremos pragmáticos»).
Aunque su entusiasmo ha probado ser a prueba de balas, ¿durará el optimismo de Fallas? Su respuesta fue una carcajada.
Esto podría ser una manifestación de un sano budismo, si se tiene en cuenta que el equipo también está integrado por reconocidos neoliberales, como Óscar Barahona Streber, el propio Trejos, Alberto Franco, Javier Chávez (de quien, en la ilógica del patriarcado, habría que decir que es el esposo de la exviceministra de Hacienda, Edna Camacho), y Ronulfo Jiménez.
Por el barrio verdiblanco, las cosas no son tan distintas. Una fuente bien informada dijo a UNIVERSIDAD que el economista y académico Juan Manuel Villasuso, se retiró de la campaña de Rolando Araya porque, a pesar de las afirmaciones en contra, Fernando Naranjo y otros economistas de CEFSA Consultores, como buenos aliados de CINDE -la promotora de intereses estadounidenses-, tomaron el control e impusieron sus enfoques pro apertura, libre mercado y privatizaciones.
Por el contrario, Villasuso es un crítico sistemático de la estrecha e interesada visión globalizadora del FMI y del Banco Mundial, y ha abogado sostenidamente por desarrollar la producción nacional.
Ante la imposibilidad de lograr una entrevista con Naranjo, pese a reiterados intentos, preguntamos acerca de esto al diputado Guido Alberto Monge, jefe de la fracción legislativa del PLN, quien aseguró que su partido ha aprendido la lección. (Ver recuadro «Ni más ni menos neoliberales»).
Pero, ¿cómo apaciguar la duda cuando otros integrantes del equipo económico de Rolando Araya son los economistas Eduardo Lizano, Luis Liberman, Francisco de Paula Gutiérrez y Félix Delgado?
Luego, si a estas alturas de la vida política nacional fuera posible creer en las palabras, está la comparación de los programas de ambos partidos. (Ver recuadros «Todos por Costa Rica» y «¡Entre todos sí podemos!»)
De no ser por sus estructuras, de lo parecidos que son, ambos discursos parecen desarrollar un diálogo -o más bien monólogo- narcisista en el espejo, como muestran algunos trozos tomados de sus respectivos programas de gobierno.
Y es que el bipartidismo no es una actitud, y ni siquiera un discurso. Es un entramado de intereses financieros y empresariales que, con toda seguridad, no cederán así nomás sus espacios de poder político. O, como escribiera el sociólogo Carlos Sojo en «En el nombre del padre: Patrimonialismo y Democracia en Costa Rica»: «La alternabilidad es posible porque en ninguno de los dos partidos los intereses empresariales están desprotegidos. Es sabido, aunque se desconoce la magnitud de sus aportes, que los grupos más poderosos económicamente contribuyen con ambos partidos en los períodos electorales.»
La diferencia ahora es que, como dirían los franceses, la clef, es decir, la clave, (¿o se dice Laclé?) está en la sui géneris composición de la Asamblea Legislativa, con una sustancial tercera fuerza no bipartidista. …Y, por supuesto, en las calles, cuyos intereses representa esta tercera fuerza, o debería representar…
Guido A. Monge:
Ni más ni menos neoliberales
El alejamiento de Juan Manuel Villasuso de la campaña de Rolando Araya, es interpretado como la consecuencia de que Fernando Naranjo y los economistas de CEFSA Consultores tomaron el control del equipo económico, con posiciones más neoliberales y aperturistas. ¿Es esto lo que está pasando?
-Hay un convencimiento muy claro de que el péndulo ya va de vuelta y de que, si en algún momento Liberación Nacional adoptó posiciones con algún grado de afinidad a esquemas más aperturistas o de minimización del Estado, o que pudieron haber sido percibidos de esa manera, han quedado claramente saldadas en un programa de gobierno en el que participaron muchos compañeros y compañeras, entre ellos las personas que usted acaba de citar, para darle un nuevo direccionamiento a la estrategia de desarrollo del país.
Si bien es cierto durante los últimos 20 años se aplicaron esquemas avalados por el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, hoy reconocemos que es absolutamente necesario volver los ojos a un segundo motor de crecimiento, que es el apoyo a la producción nacional, y no solo a la inversión externa. Eso no nos hace más ni menos neoliberales. Simple y sencillamente estamos conscientes de que si no hay un viraje en la estrategia de desarrollo, que se ha tornado excluyente y empobrecedora, es muy poco lo que como país vamos a avanzar, mucho más si se piensa en conceptos como solidaridad y justicia social.
Hay un programa de gobierno que fue avalado por el partido, en el que quedó claramente sustentado que había que darle un viraje a la estrategia de desarrollo, que el modelo que hasta ahora hemos adoptado se tornó empobrecedor y excluyente, que si Liberación Nacional no hace las correcciones en ese campo, incluido un viraje en favor del productor nacional, va a ser muy difícil que Liberación Nacional recupere vigencia política en los próximos años.
¿Puede deducirse de esto que ustedes van a dar prioridad a la producción nacional frente a la apertura comercial?
-No, un equilibrio entre ambas posiciones. La competitividad de la que tanto se habla durante estos años, como parte fundamental del esquema de desarrollo, era la externa. Lo cierto es que dentro de unos años esa diferencia que hacíamos entre empresas exportadoras y nacionales va a perder totalmente sentido. Vamos a hablar de una sola competitividad. Eso requiere del establecimiento de una plataforma permanente de apoyo a la micro, pequeña y mediana empresa del país, y que además le dé sostenibilidad democrática al proceso, porque los beneficios de ese desarrollo se han concentrado en muy pocas empresas. Eso explica en buena medida por qué se ha empeorado la redistribución del ingreso, se ha concentrado la riqueza en nuestro país. Y en su programa de gobierno, Liberación ha dejado muy claro que esa será una orientación estratégica básica de su administración. Si hay diferencias ideológicas entre un compañero y otro, me parece que deberían estar totalmente superadas por la aplicación de un programa de gobierno que reconoce la necesidad de ese viraje en la estrategia de desarrollo.
Álvaro Trejos:
Seremos pragmáticos
Varios integrantes del equipo económico del candidato Abel Pacheco son los mismos economistas que asesoraron a este Gobierno.
-Hay mucha gente nueva, que no ha ocupado posiciones en este Gobierno. Por ejemplo, Alberto Trejos, decano del INCAE, Erick Thompson, abogado independiente, especialista en derecho tributario, Javier Chávez, quien en alguna medida sí participó con esta administración, pero que no fue de los economistas principales. Está Alberto Franco, quien fue de la Junta Directiva del Banco Central, y yo, que soy diputado de la Asamblea Legislativa, que no es el gobierno. La idea es recurrir mucho al sector académico.
Están también Helio Fallas, quien fue Ministro de Planificación, y Carlos Manuel Echeverría, quien fue viceministro de Planificación. Helio Fallas jugaría un papel fundamental para articular tanto lo económico como el desarrollo humano, con una visión integral.
¿Cuál es la principal diferencia entre el programa económico del candidato Abel Pacheco y el que ha impulsado la administración Rodríguez Echeverría?
-Muy buena pregunta. Primero, que será muy pragmático. Segundo, que estará muy enfocado en ejes que no han sido prioridades. El eje principal será la creación de empleos a través de aumentar la competitividad y la productividad de las empresas, más que abrir nuevos mercados. En dar las condiciones para que las empresas compitan. En dar un apoyo fundamental a la micro, pequeña y mediana empresa, y en encadenarlas con las zonas francas y exportadoras.
Le daríamos prioridad a programas como BN Desarrollo, del Banco Nacional. Trabajaríamos más de cerca con las universidades, pues nos preocupa la gran demanda que hay, por ejemplo, de ingenieros, y que la Universidad de Costa Rica tenga un límite de 100 estudiantes por especialidades. Hay un desfase entre la demanda del mercado y lo que el país está produciendo. Veríamos esto con las universidades estatales y con los gobiernos amigos, para encontrar fórmulas para incrementar la cantidad de gente que se gradúe, especialmente de ingenieros y técnicos. Estos no han sido temas prioritarios. Queremos promover la atracción de empresas extranjeras que creen muchos empleos. Abordar tanto lo económico como lo social.
¿Cuál es la principal diferencia entre el programa económico del candidato Abel Pacheco y el de Rolando Araya?
-Hay muchas diferencias. Nosotros tenemos muy definidas estas prioridades, mientras que en el de Araya, el objetivo principal empieza con aumentar la carga tributaria, como si fuera un fin en sí mismo. Los veo muy enfocados en generar mayores ingresos para gastar más, muy enfocados en la cosa coyuntural y no en las reformas estructurales que generen más y mejores empleos.
Objetivos principales
Generar más y mejores empleos mediante la reactivación económica, acciones que mejoren el capital humano, el desarrollo del comercio internacional, el aumento en la competitividad y la atracción de inversión externa aumento en la competitividad y la atracción de inversión externa.
• Estabilidad económica, por medio de la aplicación de políticas fiscales, que propicien la eficiencia y la parsimonia, austeridad y honestidad en el gasto público, y de un manejo prudente de la política monetaria y cambiaria.
Apoyo a las micro, pequeñas y medianas empresas, en especial en las zonas de menor desarrollo relativo.
Sector financiero
• Reducción del margen de intermediación financiera, mediante la disminución del encaje mínimo legal, simplificación de los trámites administrativos en las operaciones activas en los bancos y la promoción de un mayor número de participantes en el mercado financiero, reduciendo barreras de entrada a nuevos bancos.
• Mejorar el marco legal y regulatorio de los bancos estatales en cuanto a la contratación administrativa y el mercado laboral para flexibilizar su funcionamiento.
Modernizar y transformar, mediante alianzas estratégicas, el Banco de Costa Rica y la Sección Comercial del Banco Nacional, para convertirlos en motores de la competitividad y eficiencia en el mercado financiero.
Sector público y ventajas competitivas
• Analizar a fondo las alianzas estratégicas entre instituciones públicas y privadas, para reducir presión fiscal y lograr servicios de alta calidad.
• Fortalecer el régimen de zona franca en el sector servicios, lo cual no contradice las disposiciones de la Organización Mundial del Comercio.
Telecomunicaciones
Se eliminará el monopolio de los servicios de Internet, sin que el Estado pierda el control de la actividad.
Sector agropecuario y desarrollo rural
Se revalorizará el sector de la agricultura, ganadería y actividades afines tanto por su relevancia económica y social, como por su contribución cultural a la identidad nacional. Enfrentaremos los problemas de la agricultura, agroindustria, ganadería, pesca y desarrollo rural, para que en el marco de la apertura tengamos una eficaz estrategia de comercialización.
Fuente: Partido Unidad Socialcristiana, Candidatura Dr. Abel Pacheco, Administración 2002-2006, Programa de gobierno «Todo por Costa Rica», 7 de noviembre, 2001.
Programa PLN
«¡Entre todos sí podemos!»
Política fiscal
Aumentar la carga tributaria fundamentalmente por medio de la lucha contra la evasión; hacer la carga tributaria más equitativa; evaluar el gasto público; disminuir el servicio de la deuda y hacerlo manejable; regresar a la autonomía de las instituciones en el manejo presupuestario; y generar recursos para inversión o contrapartidas de préstamos.
Comercio exterior
– Evaluar, desarrollar e implementar programas para mejorar y expandir la oferta exportable costarricense de bienes (mercancías y servicios), lo cual permitirá consolidar la unión entre comercio exterior y crecimiento económico, ambos como factores indisolubles del progreso social y económico del país.
– Desarrollar programas de encadenamiento entre la producción agroindustrial e industrial nacional y la de exportación, incluido el fomento de la participación de las pequeñas y medianas empresas (PYMES) en el comercio exterior.
Inversión extranjera directa
Implementar las acciones específicas que definan el futuro del régimen de zonas francas, mediante la adopción de medidas compatibles con la OMC y que generen estabilidad y sostenibilidad al régimen y a las empresas de bienes amparadas a este.
Política monetaria
– Proponemos, también, la modernización del sistema financiero (mediante la apertura, el mejoramiento de aspectos operativos, una mayor eficiencia y competencia).
– En lo referente al crédito, haremos esfuerzos ingentes por trabajar junto con todo el sistema financiero para lograr líneas de crédito suficientes y de costo razonable para que el aparato productivo nacional se amplíe y se modernice tecnológicamente, lo cual -junto con otras medidas que hemos mencionado- va a ayudar a promover nuestra competitividad.
Sector agropecuario y desarrollo rural
– Forjaremos las políticas agropecuarias para que el agricultor se adapte progresivamente a las tendencias modernas y las nuevas condiciones que rigen en el mundo. Se establecerá un plan nacional de producción agropecuaria que, además de los incentivos permitidos en los acuerdos comerciales establecidos por el país, garantice la protección en materia sanitaria, así como la calidad e inocuidad de productos agroalimentarios, sin distinción entre el mercado interno y externo.
Energía y telecomunicaciones
Estamos a favor de la modernización del ICE como empresa, pero al mismo tiempo estamos conscientes de que esta institución debe prepararse dentro de algunos años para una competencia real con la telefonía satelital, la cual permitirá comunicaciones a escala internacional con menos posibilidades de regulación que las existentes hoy. También será necesario prever que se sentirán presiones a favor de una mayor apertura desde la perspectiva del avance tecnológico en algunos productos de valor agregado, pero de ninguna manera aceptamos que esta apertura se imponga por medio de límites presupuestarios impuestos por organismos internacionales.
Fuente: Partido Liberación Nacional, Programa de Gobierno 2002-2006, Ing. Rolando Araya Monge, Candidato Presidencial, ¡Entre todos sí podemos!, Noviembre del 2001.
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