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La Ministra de Educación Pública, Astrid Fischel, dijo que pondrá orden en las universidades privadas e impulsará una mejor formación de los estudiantes en informática, inglés y matemática.
Astrid Fischel, Ministra de Educación.
«No me temblará la mano al poner orden en las universidades privadas. Se tocarán grandes intereses, pero es necesario parar irregularidades». Así lo afirmó Astrid Fischel, Ministra de Educación Pública al referirse al control que requieren las 50 universidades privadas que funcionan en el país.
En una entrevista realizada en el Semanario el pasado 14 de febrero, la titular analizó el tema del presupuesto, las prioridades de su gestión, las deficiencias en el sistema educativo, entre ellos la deserción, calidad de enseñanza y urgente necesidad de revisar la pruebas que se aplican a los estudiantes en sexto y noveno año así como el bachillerato.
Consideró que pese al recorte presupuestario se impulsarán proyectos que eviten la deserción escolar y colegial y que debe fortalecerse el Consejo Superior de Educación (CONESUP).
Fischel fue entrevistada por Thaís Aguilar, directora del Semanario, Ana Incer, Jefa de Redacción y el periodista William Vargas sobre la base de un cuestionario elaborado por el equipo de redacción.
A continuación un resumen de la conversación, que fue transcrita por William Vargas:
En las últimas administraciones ha prevalecido la tendencia a considerar la inversión en educación y seguridad social como un gasto. Esto dificulta la inversión en equipo humano y equipo, lo que debilita los servicios y se promueven las opciones privadas. ¿Qué piensa usted de ese planteamiento?
– Estoy a favor de la inversión en educación y programas sociales. La principal meta del Ministerio de Educación Pública es mejorar la calidad de la educación que se ha deteriorado en contenidos, infraestructura, material didáctico, formación de docentes. Hay que invertir todo lo que se pueda en educación, pero hay problemas fiscales que no podemos obviar. Solo Mauro Fernández fue a la vez Ministro de Educación y de Hacienda. Las luchas que podamos dar por recursos, se limitan por decisiones fiscales.
¿Cuáles acciones ha realizado para que se cumpla con el precepto constitucional de dotar con el 6% del PIB a la educación en el país?
-Cada año se destinan más recursos para educación, pero sigue estando por debajo del 6% del PIB. En los próximos días el Consejo de Gobierno podría acordar que se excluya al sector educación de la directriz que limita el crecimiento del presupuesto para este año en 5,9% con relación a lo gastado el año anterior.
Elaboramos un presupuesto donde se incluía el salario adicional para el pago de los 200 días y se inició su negociación desde julio del año pasado. Hacienda mantuvo una actitud muy rígida y se nos pidió un esfuerzo extra para no caer en situaciones como las presentadas en Argentina.
**El presupuesto en educación es muy rígido. El 70,3% se destina a salarios (hay más de 45 mil educadores), el 19,6% son transferencias a universidades estatales, 2,21% son recursos de FODESAF que se destinan a comedores escolares, transporte para escolares con discapacidad y bonos para estudiantes pobres. Cerca del 2,6% corresponde a gastos de operación.
Hacienda nos pidió recortar en ¢32 mil millones el monto original y tras negociaciones intensas logramos que se redujera a ¢16.300 millones.
La disyuntiva era no pagar el incentivo o recortar en programas sociales del MEP. Frente a ello propusimos incluir la mitad del monto del incentivo a los educadores por los 200 días a través de un presupuesto extraordinario y pagar ese monto a los educadores en setiembre.
El recorte afectará el rubro de infraestructura y limita el programa de informática educativa.
El tema de los 200 días de duración del curso lectivo ha sido muy polémico e incluso se dijo que usted desconocía el Convenio Centroamericano…
– El Convenio se firmó a inicios de los años 70 cuando Costa Rica tenía un calendario escolar con más de 200 días, pues se trabajaba incluso los sábados. Ese acuerdo no se aplicó en el país ni en Panamá, Honduras y Guatemala. Nicaragua y El Salvador tienen oficialmente un calendario con 200 días, pero los ministros del ramo han reconocido que en la práctica no se cumple.
En abril de1998, Eduardo Doryan, entonces Ministro de Educación, decide ampliar el calendario escolar a 200 días y negocia con los gremios el pago adicional diario de1,68% del salario mensual. En términos generales la aplicación de los 200 días implicaba de 22 a 24 días adicionales pagados a 1,68%. Esa es una especie de pagaré abierto que deja la administración de José María Figueres y posteriormente la administración de Miguel Angel Rodríguez lo somete a un laudo arbitral que obligó al pago del 1,68%.
El primer año que se pagó el salario adicional representó una erogación ¢11 mil millones, en 2003 significará unos ¢22 mil millones y llegará en 2006 a ¢35,000 millones. Crece a razón del 17% anual, porque en este sector hay un aumento anual de 3.500 plazas por año.
Sugerimos suspender parcial y temporalmente el Convenio, pero la Sala Constitucional no lo permitió cuando falló el recurso de amparo que presentó la Defensoría de los Habitantes.
El 80% de los docentes consultados en una encuesta de Borges y Asociados, pagada por la Asociación Nacional de Educadores, indicaba que no deseaban trabajar los 200 días y tampoco los padres de familia.
Al final iniciamos lecciones el 10 de febrero y la duración del curso será de 205 días lectivos
Usted le ha dado un impulso especial a la enseñanza de la matemática y el inglés…
– Sí, y además a la educación bilingüe que permita la comprensión y la conversación en inglés. También impulsamos cambios en la enseñanza de la matemática que se quedó desfasada y causa temor en los estudiantes. Hay que fomentar el pensamiento lógico en los alumnos para promover mentes ágiles.
Con el Dr. Sigmund Papert impulsaremos un plan piloto para la enseñanza de la matemática que sirva como modelo para otros países. El está muy interesado porque pocas veces ha encontrado a un ministro de gobierno interesado en un cambio de ese tipo. Haremos reformas en los sistemas de medición, formación docente y material didáctico.
Con la ayuda del Instituto Tecnológico de Massachussets impulsaremos otro plan piloto en informática para desarrollarlo en escuelas unidocentes.
Con todo esto pretendemos incidir entre los niños más pobres para combatir la pobreza con un componente educativo. Nos proponemos articular varias escuelas unidocentes con colegios técnicos para vincular el entorno social con el productivo.
Sin embargo, hay que mejorar las instalaciones de escuelas y colegios, la alimentación y el acceso a videoconferencias.
El director de la Escuela de Formación Docente de la UCR considera que una de sus debilidades como Ministra de Educación es que nunca ha impartido clases en primaria o secundaria y que pocas veces sale de las paredes del ministerio. ¿Qué opinión le merece esta crítica?
– Aunque no he dado clases en primaria o secundaria, los dos viceministros vienen de la base y provienen de las zonas más empobrecidas: la zona sur y Guanacaste. Con esto se compensa mi falta de experiencia.
El año pasado visité 160 escuelas en diferentes partes, donde nunca habían llegado ministros de educación.
Las giras las aprovecho para reunirme con asesores supervisores y le he puesto mucho interés, creo que el director de la Escuela de Formación Docente está desinformado.
Algunos sectores han pedido una discusión nacional sobre lo que se entiende por una educación pública de calidad que debe ser financiada por el gobierno. ¿Cómo se abrirá ese debate?
-Hay que analizar el proceso de mejoramiento de las educación. Un tema muy importante fue el Congreso para la Educación que se realizó el año pasado que a la fecha aún no ha publicado su memoria y he insistido en tener ese insumo lo más pronto posible.
Hemos creado una alianza estratégica entre el Consejo Nacional de Educación. Consejo Nacional de Rectores (CONARE) y MEP para darle un marco más amplio a la discusión de la temática educativa.
CONARE será el encargado de crear una secretaría técnica que permita obtener los recursos necesarios para impulsar los cambios.
Hemos hablado de un plan decenal que podría ayudarnos, pero se requieren los recursos financieros.
Este proceso se vio impactado por la propuesta del expresidente de la República Oscar Arias, quien plantea recaudar ¢120 mil millones para la educación, pero él no tiene aún idea de cómo recaudar ese dinero.
¿La propuesta de Oscar Arias impulsa su intención de reelegirse como Presidente de la República?
– Creo que sí. La iniciativa es bien intencionada, pero aún no tiene asidero. Yo recibo con entusiasmo toda idea que pretenda fortalecer la educación.
Según el Estado de la Nación, el sistema educativo es más eficiente reteniendo infantes en primaria que en noveno año. ¿Qué medidas implementa el ministerio para evitar esta situación?
– Con un estudio realizado llegamos a los jóvenes que han desertado y encontramos aspectos como falta de recursos, hogares con un solo padre, entre otros. Pero además señalan que no saben cómo estudiar, carecen de espacios adecuados para hacerlo e indican desencanto en materias como inglés, matemática y estudios sociales. Además la desnutrición, la falta de uniformes y el mal estado de los caminos vecinales también contribuyen a la deserción.
La deserción se inicia luego del sexto año. Muchos estudiantes de escuelas unidocentes no siguen sus estudios. Por eso la importancia del proyecto que realizaremos con el Instituto Tecnológico de Massachussets.
Los estudiantes no son preparados para el paso de la escuela al colegio. Por eso hay que fortalecer el trabajo pedagógico.
El MEP enfocará más su trabajo en aquellos centros escolares que reportan menos ingresos al colegio. Vamos a acondicionar bibliotecas, salones comunales para que las personas tengan espacios donde estudiar. Fomentaremos la solidaridad y daremos premios de excelencia a los docentes que disminuyan la deserción.
Haremos talleres para que los alumnos aprendan a estudiar, trabajaremos en comedores escolares y transporte, para bajar la incidencia.
En secundaria nuestra apuesta es por la educación técnica. La mayor parte de quienes desertan se quedarían en el sistema si se les presentan opciones técnicas que sean pertinentes y atractivas.
Vamos a utilizar los ¢1.200 millones que el Instituto Nacional de Aprendizaje destina a educación técnica.
¿Hasta donde las pruebas de sexto, noveno y bachillerato se han convertido en una traba para que los jóvenes puedan seguir adelante en el sistema educativo?
– Abordaremos ese tema en el transcurso de este año. Me preocupa el punto de partida de la medición, la cual no puede ser para castigar a un estudiante que salió mal en la prueba. Debe ser para detectar en cuales centros se falla y por qué.
Quiero convertir las pruebas en un punto de partida de análisis de los centros educativos con bajo rendimiento.
Muchas veces las fallas en el rendimiento se deben a problemas con el docente, fallas en los programas o material para el aprendizaje.
¿Significa esto que bajará la rigurosidad en las pruebas?
– No, significa que le daremos los apoyos necesarios para que el estudiante salga bien en ellas. También se revisarán los contenidos, ya que los jóvenes no pueden expresarse bien en el examen verbal ni en el escrito. Hay que revisar textos que ya no son atractivos.
En Estudios Sociales deben hacerse cambios. Por eso consultaremos con los docentes y las universidades para hacer las transformaciones.
Cuando se habla de cambio debemos entender que un área repercute en las demás.
Los programas de estudio y actualización de docentes deben cambiar, igual que el material didáctico.
No creo en bajar estándares de calidad.
Los profesores universitarios se quejan de la deficiente calidad con que ingresan los estudiantes a la educación superior y que esto evidencia el deterioro acelerado en el sistema educativo. ¿Qué responde a este planteamiento?
-Debemos buscar la transparencia en los nombramientos de personal, evitando el compadrazgo y politiquería, que se cumplan con los requisitos. Sacamos a concurso primero 6 mil plazas y luego 600 más. En el caso de 600 plazas en inglés participaron profesores interinos que no calificaron. Menos del 20% de los postulantes pasó la prueba de comprensión de lectura y lenguaje.
Pensé primero que la prueba estaba mal elaborada y no fue así, técnicamente estaba bien diseñada. Me encontré que el rendimiento de los estudiantes egresados de la Universidad de Costa Rica es muy bueno en sede central, pero muy malo cuando se trata de sedes regionales.
Encontramos inconsistencias en los programas universitarios para obtener un profesorado en inglés. Mientras que en una universidad se requieren 150 créditos aprobados, en otras se logra con apenas 80. Hay carreras de inglés donde tres cuartas partes del programa se imparte en español. Si no hay docentes capacitados, los estudiantes no podrán aprender lo requerido. El problema de la calidad de los docentes no es solo del MEP, sino de las universidades.
¿Cuáles son las debilidades del Consejo Superior de Educación?
– El Consejo debe valorar su función de cara a los retos educativos del país. Creo que está recargado de aspectos administrativos o de menor trascendencia y por eso realizaremos pronto una encerrona. Le estoy dando mayor respaldo administrativo y he sentido un gran respaldo en esa instancia.
El CONESUP estaba muy debilitado, al punto que se perdían expedientes o estaban guardados en cajas en la cocina.
En este caso ¿caben sanciones?
– CONESUP empezó la supervisión y el 24 de febrero habrá una encerrona para revisar la disparidad de requisitos que se piden a las universidades. Si fuera necesario vamos a cambiar el reglamento para que no se pongan trabas al funcionamiento del CONESUP.
La Procuraduría General de la República destinó a un funcionario para que nos acompañe y se ponga a derecho las 50 universidades privadas.
Nos preocupa mucho como universidad pública que CONESUP protege a «universidades de garaje» y el negocio que muchas de ellas realizan.
– Estamos inspeccionando y hemos suspendido algunas actividades irregulares de las universidades privadas. Una de ellas fue llevada al Ministerio Público porque presentaba en páginas en Internet con instalaciones propias, pero eran edificios de la Caja Costarricense del Seguro Social.
Hay que fortalecer el reglamento que rige al CONESUP y no desecho la posibilidad de presentar un proyecto de ley para regular más a las universidades privadas. La experiencia de El Salvador es aleccionadora, pues puso un límite a las privadas.
Algunas de estas últimas son muy buenas, pero en otras se estafa a la gente. Estamos elaborando una base de datos con programas, profesores y currículos de los profesores para que los estudiantes sepan distinguir la calidad de estos centros.
No me temblará la mano al poner orden, se tocarán grandes intereses, pero es necesario parar irregularidades.
FOMENTAR LOS VALORES
La Ministra Fischel explicó que se este año se pone en marcha un plan para incluir la formación de valores en la juventud.
«En abril próximo estarán listos los contenidos de la propuestas para que el tema de valores se trabaje en las escuelas y colegios desde lo cotidiano. Este eje será transversal y pretende que se aluda a los valores en todas las materias.
Los educadores serán formados en talleres y se incorporarán de inmediato en los procesos de formación. Cuando hablamos de valores lo haremos desde lo concreto, desde lo cotidiano.
Por ejemplo, el respeto para una persona de 15 años significa no consumir drogas, evitar un embarazo, aprovechar al máximo el estudio, la práctica del deporte.
Creo que el mayor impacto se logrará con una adecuada educación en este campo. Hay que cambiar la imagen del pobrecito y entrar en una propuesta de autoestima y responsabilidad.»
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