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La guerra llega al TLC

Diversos sectores piden que un eventual Tratado de Libre Comercio con EE.UU (TLC) no permita la instalación en Costa Rica de empresas que elaboran productos para usos militares. En el país funciona una planta de alta tecnología, REMEC Inc., aunque su gerente afirma que solo produce para uso comercial.

Diversos sectores piden que un eventual Tratado de Libre Comercio con EE.UU (TLC) no permita la instalación en Costa Rica de empresas que elaboran productos para usos militares. En el país funciona una planta de alta tecnología, REMEC Inc., aunque su gerente afirma que solo produce para uso comercial.
La amenaza de una guerra de Estados Unidos contra Irak toca a la puerta de las negociaciones de un eventual TLC con Centroamérica. Y lo hace con sello costarricense, es decir, de un país que no tiene Ejército ni quiere verse atrapado en las estrategias militares de otros.

De manera independiente entre sí, el asesor de la Jefatura de Fracción del Partido Liberación Nacional, Francisco Cordero, el exdiputado José Merino del Río y el presidente del Centro de Amigas y Amigos por la Paz, Carlos Bonilla, solicitaron declarar oficialmente a Costa Rica «país libre de la producción de cualquier mercancía o servicio para uso militar», y que esta excepción sea expresa en la eventualidad de que nuestro país firme dicho TLC.
«Esta Declaración de Principios debe ser clara al decir que ningún beneficio del eventual TLC puede ser utilizado por empresas que de alguna manera comercian con la muerte», afirmó Cordero, promotor de la iniciativa al interior de su partido y en el sector empresarial.
«Hay un peligro para Costa Rica, en caso de entrar al TLC, y es que tendríamos cinco socios militarizados, encabezados por Estados Unidos. Los países centroamericanos, con excepción de Costa Rica, destinan entre el 17% y el 25% de su presupuesto nacional a sus ejércitos. ¿Podemos esperar que el TLC signifique la militarización de Costa Rica? ¿O la desmilitarización de Centroamérica?», preguntó.
Por su parte, Merino del Río recordó que en el país ya existe una fábrica de productos de alta tecnología, la estadounidense REMEC Inc., cuya casa matriz tiene contratos con el Pentágono y cuya producción en un 40% es para usos militares.
«En general, el negocio militar de la compañía se ha centrado en aviones tácticos, satélites, sistemas de misiles y armas inteligentes. Especialmente, REMEC participa en programas tales como el Avión de Combate Táctico Stealth F-22, para la Fuerza Aérea de Estados Unidos, el Interceptor de Auto-Protección Aérea (ASPJ) para clientes militares extranjeros y para la Marina de EE.UU, el Misil Aire-Aire de Mediano Alcance (AMRAAM) para la Fuerza Aérea de EE.UU, y los programas del Misil Longbow y de Radar del Ejército de EE.UU», dice un informe de la empresa de investigación del mercado de capitales, Dain Rauscher Wessels. (Ver resumen del informe en la nota «¿Qué es REMEC?»)
Entre los clientes militares de la firma se encuentran las empresas contratistas del Pentágono Lockheed Martin, Northrop Grumman y Raytheon. Según el Instituto Internacional de Investigación para la Paz (SIPRI), de Estocolmo, Suecia, en 2000, la Lockheed Martin ocupó el primer lugar entre las 100 más grandes empresas productoras de armas, la Raytheon, el cuarto, y la Northrop Grumman, el quinto.

«UNA VERGÜENZA»

«Es una vergüenza que un país que abolió constitucionalmente el Ejército, permita que una transnacional del armamento se instale en aquí, y que además goce de los privilegios de las zonas francas. Igual ocurre con los casinos o las «offshore», hay en nuestros gobiernos una doble moral: gritos contra la economía sumergida, el lavado de dinero, los paraísos fiscales, la industria de las armas, etc. Pero a la hora de la verdad, negocios son  negocios», dijo el ex-parlamentario.
«¿Produce REMEC alguno de los componentes que se utilizarán en los misiles que Bush piensa utilizar en la sucia guerra contra Irak?», preguntó.
«Hemos sabido que la industria de los armamentos, en los componentes limpios, también busca invertir en países «estables» y «blanqueados». Debemos preguntarnos si el TLC abrirá las puertas también a este tipo de inversiones. En todo caso, ¿qué podemos esperar de un TLC bajo la  hegemonía de un gobierno controlado precisamente por los intereses del complejo militar-industrial? El Gobierno debe abrir inmediatamente una investigación y declarar a Costa Rica territorio libre de industria de armamentos y de academias militares», dijo Merino del Río.

PRODUCCIÓN ES COMERCIAL

Consultado sobre estos cuestionamientos, el gerente de REMEC-Costa Rica, Randall Vega, quien dijo hablar a título personal, afirmó que la planta en nuestro país únicamente produce componentes para uso comercial, como lo establece el contrato firmado entre la transnacional y la Promotora de Comercio Exterior (PROCOMER).
«Cuando existen contratos militares, estos se dan con compañías certificadas por el Gobierno de Estados Unidos. Es cierto que nuestra corporación tiene compañías como las que usted menciona, que producen para uso militar, pero en REMEC-Costa Rica producimos para uso comercial de telecomunicaciones», afirmó.
Agregó que «cuando un producto es hecho con fines militares el proceso no es completamente abierto para todo el mundo, es secreto. Las puertas de
REMEC están abiertas a todo el mundo, nuestra empresa puede ser auditada en cualquier momento.»
«Algo que es elaborado para un misil es exclusivamente para uso militar, hay estándares militares que cumplir. Nosotros usamos los comerciales», enfatizó.
El gerente de REMEC dijo estar «de acuerdo en que se controle el tipo de cosas que se producen aquí» y agregó que «eso es lo que hace PROCOMER.»
No obstante, añadió que «ninguna ley nacional dice que los componentes que se producen en el país no deben ser para uso militar.»
Por otro lado, «¿quién nos garantiza que el café o el banano producidos en Costa Rica no sean usados para alimentar a los soldados en otros países o que los componentes electrónicos de otras grandes compañías que producen en Costa Rica no sean usados en las computadoras de uso militar?», preguntó.

«NO HAY GARANTÍA»

Por su parte, Bonilla, cuyo Centro tiene entre sus integrantes a familias estadounidenses cuáqueras que hace medio siglo llegaron a Costa Rica precisamente en busca de un territorio libre de la amenaza de la guerra, fue más radical.
«Nosotros nos oponemos a la firma del TLC porque pensamos que solo vendrá a deteriorar aún más las condiciones de vida de nuestro pueblo y la soberanía y la paz en nuestro país», dijo.
Agregó que si de todos modos se firmara el TLC, «debería existir una cláusula en la cual se establezca claramente que las empresas que operen en Costa Rica no pueden tener nada que ver con lo militar.» Sin embargo, insistió en que la posición del Centro es rechazar el TLC «porque es muy difícil controlar este tipo de prohibiciones. ¿Quién nos garantiza que las empresas no estén vinculadas con el mercado militar?», preguntó.
¿Qué es REMEC?
El 40% de la producción de REMEC se destina a usos militares. La planta de REMEC en Costa Rica cumple una función estratégica en el futuro de esta empresa.

Según el informe «REMEC, Inc. Líder en Suministro de Tecnología de Microonda y Onda Milimétrica», de la empresa de investigación institucional del mercado de capitales, Dain Rauscher Wessels, publicado en diciembre de 1999, estas son las principales características de la compañía:
«REMEC es una empresa líder en el diseño y manufactura de la tecnología para aplicaciones de microondas inalámbricas para usos comerciales y militares, así como para aplicaciones de infraestructura celular comercial. Esta tecnología es típicamente insertada en Módulos Multi Funcionales (MFM) que combinan numerosas funciones discretas de transmisión y recepción de radio en un único módulo integrado que permite un mejor desempeño y un tamaño total menor que la implementación discreta.
REMEC fue fundada en 1983 como una compañía fabricante de funciones de transmisores/receptores de radio de alta frecuencia discreta para aplicaciones y comunicaciones militares en productos de reducido volumen. Sin embargo, en 1995 la compañía comenzó a explotar su experiencia en estas funciones discretas en el desarrollo de módulos multi funcionales integrados para el mercado comercial.
Los productos esenciales de REMEC son MFM de alta frecuencia para aplicaciones de microondas y ondas milimétricas. Un MFM para estas aplicaciones típicamente consiste de una o más tablillas de circuitos de microondas o sustratos cerámicos montados juntos en un solo paquete. Cada tabla de circuitos, a su vez, contiene el diseño de una o más funciones usadas en la transmisión o recepción de señales de microondas u ondas milimétricas. Típicamente, estos componentes de paquete único son vendidos a las empresas de comunicación celular (OEM) y a clientes militares que luego integran estos componentes multifuncionales a sistemas de comunicación por microondas.
Los clientes de REMEC para sus productos MFM de microondas incluyen compañías como Digital Microwave, Lucent, and Harris-Farinon en el mercado comercial de radios de microonadas, General Instruments y Orbital Sciences en el Mercado satelital, Nokia y Motorola en el mercado PCS, y empresas líderes contratistas del Pentágono, como Raytheon y Lockheed Martin.
Las empresas militares contratistas usan los productos de REMEC en aplicaciones como radares, comunicaciones, navegación, satélites y sistemas de guía de misiles. En total, creemos que el mercado al que puede acceder REMEC crece a una tasa compuesta aproximada de 8%, de cerca $2.8 mil millones en 1999 a $3.8 mil millones hacia 2003.
Sin embargo, creemos que REMEC experimentará una tasa compuesta más elevada a través de centrarse en los segmentos de alto crecimiento de su mercado potencial.
Finalmente, REMEC planea mantener su posición de liderazgo en la industria de comunicación militar por microondas a través de apoyar sus actuales proyectos y perseguir otros planes militares selectos que involucran tecnología de punta de microondas altamente sofisticada.
El negocio de REMEC para usos militares ha sido un mercado estable para la compañía durante los dos últimos años. Creemos que la totalidad del mercado militar para equipos de microondas y ondas milimétricas continuará siendo un segmento en crecimiento en la medida en que los sistemas militares usan más soluciones tecnológicas y orientadas a la comunicación.
REMEC provee el componente habilitador y la tecnología modular para aplicaciones de productos que operan en frecuencias entre 800 MHz a GHz. Estos componentes de alta frecuencia son muy difíciles de desarrollar y fabricar. REMEC ha desarrollado un alto nivel de experiencia en estas tecnologías a través de su involucramiento en proyectos militares y satelitales que fueron los primeros en usar estas altas frecuencias.
Hoy la compañía utiliza esa experiencia tecnológica para proveer esos componentes funcionales, módulos multifuncionales y subsistemas no solo en proyectos militares más avanzados, sino también en aplicaciones comerciales de mayor volumen.
En general estos módulos realizan las funciones básicas para el procesamiento de señales durante la recepción y transmisión de comunicaciones inalámbricas. Además, muchos de estos módulos realizan funciones más especializadas para las aplicaciones militares de REMEC, tales como las requeridas para comunicaciones de radar y militares.

En el mercado militar, REMEC se enfoca en las aplicaciones que más resaltan su tecnología y en los programas que la compañía cree que tienen la probabilidad más alta de continuar en producción. En general, el negocio militar de la compañía se ha centrado en aviones tácticos, satélites, sistemas de misiles y armas inteligentes. Especialmente, REMEC participa en programas tales como el Avión de Combate Táctico Stealth F-22, para la Fuerza Aérea de Estados Unidos, el Interceptor de Auto-Protección Aérea (ASPJ) para clientes militares extranjeros y para la Marina de EE.UU, el Misil Aire-Aire de Mediano Alcance (AMRAAM) para la Fuerza Aérea de EE.UU y los programas del Misil Longbow y de Radar del Ejército de EE.UU.
En general, las capacidad de producción de REMEC consisten principalmente de su división Veritek para la manufactura de las superficies para los ensamblajes de microondas y ondas milimétricas, su instalación en Costa Rica para la producción de mayores volúmenes, y su diseño mecánico especializado e instalaciones de máquinas en la sede central de la compañía en San Diego, California. Además, cada división tiene sus propias capacidades limitadas para pedidos de productos en pequeñas cantidades. Grandes porciones de los ingresos de REMEC son generados por las ventas a la industria militar.
En el año fiscal de 1999, Motorola y Raytheon proporcionaron el 14% y el 11% de sus ingresos totales, respectivamente. Otros clientes, que representan menos del 10% de sus ventas netas, incluyen a P-Com, Inc., STM Wireless, Digital Microwave, General Instrument, Alcatel, Lockheed Martin y Northrop Grumman.
Como resultado de estas concentraciones, REMEC depende altamente de las ventas a estos clientes importantes.
La habilidad de elaborar componentes RF y de microondas en grandes cantidades es clave para el desempeño y crecimiento de REMEC. Sin la fabricación a economías de escala, su ganancia marginal bruta y sus ingresos operativos se verían seriamente impactados. Como resultado, REMEC ha llegado a un acuerdo para comprar una fábrica en Costa Rica.
Creemos que el aumento de su margen de utilidad bruta será resultado principalmente de volúmenes más altos de producción y por la capacidad adicional que podrá realizar a través de su fábrica de bajo costo en Costa Rica.»

  • Emanuel García Jiménez 
  • País
FranceNational LiberationPartido Liberación Nacional
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