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El domingo 17 de agosto se inicia la temporada del fútbol mayor y para muchos equipos, evitar el pentacampeonato erizo es la consigna.
Warren Granados, el novel mediocampista del Alajuelense, procura en el nuevo campeonato la titularidad en la cintura rojinegra y un espacio en la Selección Nacional.
Un Deportivo Saprissa renovado y millonario; un Club Sport Herediano con técnico uruguayo, un Club Sport Cartaginés expectante con Alexandre Guimaraes como entrenador y un Santos de Guápiles con Carlos Linaris -bicampeón con Saprissa-, al frente de los jugadores, son solo algunos de los obstáculos que ha de saltar Liga Deportiva Alajuelense en procura del pentacampeonato.
Luego de lograr el tetracampeonato, la directiva del Alajuelense le dio largas al asunto de renovar el contrato con el técnico colombiano, Jorge Luis Pinto, quien finalmente no aceptó la continuidad y se marchó del club.
El presidente manudo, Rafael Ortiz, asesorado por el técnico Rolando Villalobos, viajó a América del Sur, donde ambos se entrevistaron con algunos técnicos de renombre en Uruguay, Perú y Argentina y se decidieron por el entrenador peruano, Juan Carlos Oblitas, el «Ciego» como le dicen en su país, un astro del fútbol peruano, que fichó para los manudos y ya dirige la pretemporada con su nuevo equipo.
Toca a Oblitas seguir la marcha triunfadora de los rojinegros en el campeonato nacional, luego de los dos bicampeonatos ganados los primeros por el portugués, Guilherme Farinha y los dos restantes por el colombiano Pinto, hoy fuerte candidato a entrenador de la selección de Honduras.
Oblitas ya sabe que un segundo lugar es un fracaso y para que esto no se repita, los dirigentes de la Liga le ponen al peruano la base de la Selección Nacional en bandeja, nada menos que nueve futbolistas que acaban de jugar la Copa de Oro: Mesén, González, Castro, Marín, Chinchilla, López, Bryce, Fonseca y Scott; como ven, no le queda al entrenador peruano otra cosa que ganar el campeonato.
¡VIENE SAPRISSA!
A menos de un mes de ponerle candados al estadio Ricardo Saprissa, por las deudas adquiridas por la institución, se presentó el magnate mexicano Jorge Vergara, sacó su billetera y compró al equipo.
Una de sus primeras decisiones fue escoger al exfutbolista morado Hernán Medford, como director técnico y le dio un plazo de cinco años para levantar el plantel.
Sin títulos desde hace cinco temporadas, superado por su archirrival, el Alajuelense en la cancha en las últimas cuatro campañas, frustrada su leal afición ante tantos contratiempos, el Saprissa de Medford viene por todo al nuevo certamen y desde luego con la única meta de desbancar al amo del último cuatrienio .
Un primer paso del cuerpo técnico del Saprissa, fue recapturar a algunas de sus mejores figuras que se habían ido a otros equipos; uno los fichajes más rimbombantes fue el de Rónald González, jugador de cepa morada que jugó muchos años en el fútbol de Guatemala; de Grecia retornó el mejor jugador de Costa Rica en la Copa de Oro, Walter Centeno y del Herediano se devolvieron el goleador Gerald Drummond y el lateral Try Bennett.
La semana anterior anunciaron otro fichaje bomba, nada menos que Rónald «La Bala» Gómez, goleador que se hizo en el Alajuelense, luego jugó en España y Grecia y fue la mejor figura nacional en el último Mundial en Asia.
Saprissa firmó al arquero de San Carlos, Kevin Steward y a Santos le quitó a su cerebro y constructor, José Francisco Alfaro, un volante «seleccionable», de manera que reforzado hasta los dientes, los morados confían en cortar la racha de títulos de los manudos y son firmes candidatos a lograrlo.
MANEIRO EN HEREDIA
Mal terminado el ambicioso proyecto que el Club Sport Herediano y su presidente Aquil Ali planificó con el talentoso técnico nacional Carlos Watson, los florenses se cayeron en la última temporada y ahora empiezan de nuevo bajo la batuta del entrenador uruguayo, Ildo Maneiro, un jugador mundialista y con buenas credenciales en su oficio.
La nómina con la que trabajó Watson era de respeto; es la misma que halló Maneiro con algunas mejoras, pues regresaron al club viejas banderas como Kenneth Paniagua y Allan Oviedo, fue fichado el potente goleador David Diach y a la cintura vuelve Rodrigo «Rocky» Cordero.
La nómina florense es de respeto; cuenta con el joven portero ya seleccionado, Adrian De Lemus; siguen Robert Arias, Austin Berry, Giovanni Jara, Daniel Vallejos, Mauricio Alpízar, Kurt Bernard, Jewisson Bennett y Andy Herron entre otros y solo resta esperar el rendimiento que como timonel tenga Maneiro, aunque esta expectativa es válida también con Oblitas en la Liga, Guimaraes en Cartago e incluso el propio Medford.
Puede que Saprissa y Alajuelense por el poderío de sus nóminas, jueguen un torneo aparte, pero que Herediano y Cartaginés darán pelea, no lo duden.
¡VUELVE GUIMARAES!
La nota más atractiva del campeonato, es el regreso de Alexandre Guimaraes a la dirección técnica, tras su exitoso paso por la Selección Nacional.
El tico brasileño finalmente se decidió por aceptar el atrevido ofrecimiento de entrenar al Cartaginés y buscar con los brumosos el añorado título que se les escapa y no les llega desde hace 63 años.
«Hacer campeón al Cartaginés te inmortaliza», quizá eso es lo que busca Alexandre; pegar su nombre en la historia del fútbol criollo como el técnico que hizo al Cartaginés monarca, medio siglo después, una corona que tuvieron muy cerca Marvin Rodríguez y Juan Luis Hernández.
Guimaraes aceptó el desafio y lógicamente reforzó al equipo; llegaron a las filas brumosas el portero Jorge Vindas y el defensa central Randall Row (de Liberia); de Guanacaste el volante Rodolfo Arnáez y Kervin Lacey y volvió a su querido club, Bernald Mullins.
Siguen los goleadores Claudio Ciccia y Athin Rooper, el capitán Danny Fonseca; José Brenes, José Pablo Fonseca y los hondureños Cristian Santamaría y Arnold Cruz.
Un equipo de peso, con un técnico de renombre, es una fórmula ideal para aspirar al escurridizo gallardete.
Los cuatro grandes son los favoritos a la corona; el ex-subcampeón nacional, Santos de Guápiles, con Carlos Linaris pero algo desmembrado, será la escolta lógica de los punteros.
La mitad de la tabla para los usuales: San Carlos, Pérez Zeledón, Santa Bárbara y quizá Carmelita.
En la lucha por evitar el descenso, puede que estén los dos equipos de la pampa: Guanacaste y Liberia, sobre todo los liberianos en franca crisis en la pretemporada y llega como atracción, el maestro Orlando de León con sus ramonenses, el nuevo equipo que en la categoría mayor, sustituye a Osa.
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