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Un libro, tres arquitecturas

El edificio del «Gran Líbano» es uno de los ejemplos con los que el libro ilustra el Art Decó.

El edificio del «Gran Líbano» es uno de los ejemplos con los que el libro ilustra el Art Decó.
¿Cómo lograr que la sociedad civil valore el patrimonio arquitectónico costarricense?
El nuevo libro del Editorial Tecnológico de Costa Rica, «Un país, tres arquitecturas» es la respuesta que ICOMOS le da a esta pregunta.
Este libro es el segundo que surge a partir de un planteamiento muy simple: no se puede apreciar lo que no se conoce. Es decir, no se puede preservar sin antes educar.
La investigación para «Un país, tres arquitecturas» estuvo a cargo de Andrés Fernández y tuvo apoyo financiero del Colegio de Arquitectos.
El texto relata cómo era Costa Rica en la primera mitad del siglo XX y la reconstruye con datos históricos, citas y abundante material gráfico que incluye planos, fotos, afiches y dibujos.
Fernández asegura que «texto, citas y fotos, juntos o independientemente cuentan el mismo cuento. Así, es el lector que escoge cómo leer este libro que rastrea las huellas de tres lenguajes arquitectónicas en el país».
Algo así como una novela en la que los protagonistas son los edificios Art Nouveau, Neocolonial Hispanoamericano y Art Decó, pero que también explica lo que pasaba en relación al arte, la política, la religión, la economía y los personajes de la época.
En adición al libro, que se distribuirá en librerías por todo el país con un costo de ¢6.500, el arquitecto Fernández programó tres charlas en el Teatro Melico Salazar. Las dos últimas examinan el Art Noveau o Modernismo y el Art Decó y se efectuarán el 29 de setiembre y el 6 de octubre a las 7 p.m.
La novedad es que las conferencias mostrarán todo el material gráfico que surgió de la investigación, del cual solo una parte representativa fue utilizada en el libro.
«La idea es seducir a la gente, enamorarla de un patrimonio construido existente. Mucho está en mal estado y aunque la mayoría es salvable, la sociedad costarricense tiende a despreciarlo porque los especialistas no se han tomado la molestia de hacer ver lo que está detrás de las rejas y los anuncios. La arquitectura está contaminada visual e ideológicamente,» reflexionó Fernández.

INVESTIGAR PARA EDUCAR

ICOMOS de Costa Rica es una asociación internacional sin fines de lucro que se dedica a conservar el patrimonio cultural.
El libro de Fernández es el segundo fruto de la nueva política que comenzó con la publicación de «Historia de la arquitectura en Costa Rica» de Richard Woodbridge.
La asociación se encuentra en procesos de transformación, cuya meta es lograr que se convierta en una empresa cultural en la que los proyectos que generen ganancias sostengan a aquellos que no son rentables.
La serie de «separatas» de la que es parte «Un país, tres arquitecturas» será completada con otras publicaciones entre las cuales se encuentran una sobre la de influencia victoriana caribeña y otra sobre arquitectura moderna.
El arquitecto Miguel Chávez, quien forma parte de ICOMOS enfatizó que la intención es que los libros lleguen al mayor número de personas posible.
«Si se aprende desde la escuela o el colegio que el patrimonio es importante en el campo económico, turístico, histórico, estético, identitario y urbanístico, entonces se defiende. Las autoridades tendrían que responder al clamor popular que quiere conservar lo suyo,» agregó.

  • Mariana Murillo 
  • Cultura
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