Mi vida se detuvo y el tiempo siguió su rumbo, ese fue el panorama que se dio hace muchos años. Con esfuerzo sobrehumano viví sin estar viva, enterré sueños, ilusiones y la esperanza de amar y ser amada. Los días, meses y años pasaron y… un día me di cuenta que aún estaba aquí y respiraba débilmente. El frío de mi cuerpo era un reflejo de lo lejana que estaba en el universo.
Hoy es un día diferente, es mi cumpleaños y ellos marcan el final del ayer y el inicio de una nueva vida. Me daré esta oportunidad yo misma, Dios ha querido que aunque «lejana» permanezca acá. Voy a construir nuevas emociones que me devuelvan la ilusión, los sueños hermosos y el amor.
El amor con su calidez calentará mi ser y le abrigará con ternura. El elemento amor será la base de mi nueva vida, con un diferencia de mi vida pasada… esta vez  tendré que recibir amor en la misma proporción y formas en las que yo doy. No permitiré que mi ser no reciba amor del bueno, que le permita desarrollarse y alcanzar niveles superiores, los cuales al final de mis días me hagan explotar cual si fuese una estrella y cada partícula llena de luz y amor se expandirá por el Universo.
No esperaré tanto tiempo para saber si me aman o no, no permitiré que mi corazón se debilite amando sin recibir amor. Me alejaré pronto y de prisa de aquellas cosas o personas que de una u otra manera no me hagan feliz.
Amaré con una intensidad sin límites, abrazaré todo cuanto quiera abrazar, sin restricciones más que las que el espíritu y la moral me dicten.
Me abrazaré a mí misma para amarme y levantarme cada día. El universo iluminará mi nueva vida, nunca tendré oscuridad, frío, mi soledad, pues la luz cálida, hermosa, amorosa y radiante de las estrellas me mostrará el camino cuando exista desconcierto, iluminarán los senderos de paz, amor y felicidad, calentarán mi cuerpo y mi alma alimentando el espíritu con la luz eterna.
Miraré hacia delante y con alegría caminaré a tu encuentro. Llegaré hasta ti y en un tierno abrazo me entregaré a tu paz.
Manejaré mi vida cual cometa que surca el universo, conociendo y aceptando todo aquello que da paz, que construye y reconstruye, que ama y deja amar. Cada instante tendrá un significado y aunque a veces no lo entienda, sabré que lo entenderé más adelante. Lucharé por mis sueños y porque otras personas logren los suyos.
Seré yo misma con Dios y con el universo, dejaré todo aquello que no me permita desarrollarme y crecer espiritualmente, pues al final de mi vida eso es lo que permanecerá.
Hoy he iniciado mi vida, hoy miro con amor el futuro. Le doy gracias a Dios, a mi familia, a ti, a mis amistades, compañeros y compañeras; todos ellos presentes en este mi nacimiento, el cual hace honor a la esperanza, al amor, el perdón y a la vida.
No tengo miedo de empezar de nuevo, al contrario, siento una maravillosa oportunidad que me ha sido concedida. Hoy es un día especial, un 05 de julio del nuevo milenio (2004), he vuelto a nacer y se me ha permitido conservar todo lo bueno de mi otra vida: tres maravillosa hijas, mi madre querida, hermanos y hermanas, el recuerdo hermoso de mi padre, una numerosa familia, muchos amigos, amigas y conocidos y la esperanza de amar y ser amada.
Hoy he visto el amanecer discreto de un día nublado, el sol de una mañana radiante, una tarde con vientos frescos seguidos de truenos y relámpagos fuertes, un aguacero torrencial que lavó casas, árboles, jardines y calles; una noche tranquila y silenciosa; todo esto en un solo día, mi primer día de mi nueva vida.
No se si viviré muchos años más, o solo será un mes, un día, un minuto, un segundo… no importa cuánto sea, trataré que lo que se escriba a partir de este día sea una nueva vida para mí…
«Enfócate en lo positivo: Un cumpleaños puede ser el comienzo de una nueva y maravillosa vida para ti».