Las posibilidades de que Óscar Arias llegue a ser presidente de Costa Rica se ven aminoradas, según expertos consultados.
El descrédito que viven los partidos mayoritarios en su peor crisis de las últimas cinco décadas es lo que complicará al exmandatario Óscar Arias ocupar de nuevo la silla presidencial, coinciden expertos y políticos consultados por UNIVERSIDAD.

«Si él se queda dentro del Partido Liberación Nacional (PLN) como ya lo anunció, tendrá pérdidas profundas. Lo que percibe la gente es que Arias es un neoliberal y un rico favorecido. Los ciudadanos no creen ya en el PLN y estiman que los políticos son unos corruptos», concluyó el politólogo Francisco Barahona.

En este hecho coincide el historiador Luis Guillermo Solís quien considera que «hay un proceso sociopolítico que está afectando a la clase alta. El problema que va a tener Arias es cómo diferenciarse del resto de políticos que han sido cuestionados».

La Fundación Arias para la Paz, que  él preside, recibió del gobierno de Taiwán $1,3 millones en su fundación para la paz desde 1988 hasta la fecha.

Sobre este aspecto su hermano, Rodrigo Arias dijo a la prensa que se trata de donaciones normales recibidas de un gobierno amigo interesado en colaborar con el proceso de pacificación en el mundo.

Al expresidente se le quiso consultar sobre este y otros temas pero a pesar de varias llamadas hechas a su residencia, mensajes que se le dejaron y un correo electrónico que se le envió a su secretaria, Mariangel Solera, no fue posible contactarlo.

Sobre la citada donación, Humberto Arce, coordinador del Bloque Patriótico le envió una misiva al director ejecutivo de la fundación, Luis Alberto Cordero, en la que asegura que el gobierno taiwanés ha sido igual de generoso con otras fundaciones lideradas por los expresidentes Miguel Ángel Rodríguez, de Costa Rica; Arnoldo Alemán (Nicaragua) y Mireya Moscoso (Panamá), dos cuestionados por presunta corrupción. En el caso de Alemán descuenta una pena de 20 años de cárcel por lavado de dinero.

«En estos tres casos, lamentablemente -argumenta el legislador- la apropiación indebida de los recursos por parte de los exgobernantes citados fue el elemento común y las denuncias contra ellos por presuntos actos de corrupción se ventilan en los estrados judiciales de sus países».

En la misiva, Arce le hace siete preguntas a Arias sobre la justificación para recibir esa ayuda y solicita copia de los cheques o transferencias bancarias mediante las cuales se hicieron los desembolsos.

Cabe recordar que fue precisamente en la casa del exmandatario Arias donde se conoció sobre la donación que haría el gobierno taiwanés a la campaña presidencial liberacionista, que encabezaba el aspirante presidencial Rolando Araya Monge.

Anteriormente el director ejecutivo Cordero también confirmó la donación de otros $8 mil de la Corporación Fischel para un programa de la fundación. Este dinero fue devuelto posteriormente por Cordero a la empresa farmaceútica, tras salir a la luz pública el escándalo con la Caja Costarricense de Seguro Social.





«ARRIBISTAS Y CORRUPTOS»



Para el precandidato independiente Antonio Álvarez la persona que encabece al PLN para los próximos comicios «va a representar a un grupo arribista y corrupto, una cúpula nefasta».

Al contrario de pensar que el camino se le allanó a Arias para la presidencia al ver que líderes liberacionistas han caído en fuertes cuestionamientos económicos y morales, el diputado y excandidato presidencial José Miguel Corrales estima que Arias «ha perdido la confianza del pueblo costarricense».

«Él ha hablado abiertamente de romper los monopolios del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y del Instituto Nacional de Seguros (INS)» lo cual no lo favorece en nada tomando en cuenta el aprecio que le tiene la gente a esas entidades.

«Volvimos a las democracias caudillistas. En el 2006 los votantes se fijarán más en las personas que en su fidelidad a un partido político como era en un pasado reciente».

Añadió que «hace tres meses hubiera jurado que Óscar Arias iba a ser el próximo Presidente de la República pero la situación ha dado un gran giro por la denuncia de actos corruptos en el PLN y el Partido Unidad Social Cristiana (PUSC)».

En términos vehementes uno de los fundadores de Liberación, Alberto Cañas dijo que «lo que pasa es que la gente se empieza a dar cuenta de que el gobierno de Arias cerró los estancos (del Consejo Nacional de la Producción), gobernó para los neoliberales. Fue un gobierno que no dejó nada al país y solo un Premio Nobel para él».

El aspirante presidencial y exMinistro de Justicia José Miguel Villalobos, dijo que «la bola de transparencia» ocurrida en las últimas semanas con las denuncias por actos de corrupción aparentemente cometidos por expresidentes de la República «se llevó la candidatura de don Óscar porque los principales afectados son los líderes tradicionales».

«Para que tenga alguna posibilidad de lograr una participación significativa para las próximas elecciones tendría que independizarse de Liberación pero esto implicaría visitar todo el país y no creo que esté en condiciones de hacerlo», manifestó.

Consultado el exMinistro de la Presidencia, Marco Vargas -quien hasta hace poco fue el principal representante en el país del exmandatario José María Figueres- aseguró sobre la precandidatura de Arias que «no es momento para hablar de política partidista o electoral. La situación del país es delicada, muy delicada».

Dijo que «lo importante sería que los líderes políticos de la talla de don Óscar Arias no se desanimen, que no dejen el espacio a populistas. Él es de los pocos que pueden darle un nuevo rumbo a Costa Rica».



OPORTUNIDAD A LOS NUEVOS



Los movimientos políticos independientes de Juan José Vargas, Antonio Álvarez, Rodrigo Madrigal y el Partido Acción Ciudadana (PAC) podrían tener una gran oportunidad en los próximos comicios, de acuerdo con Francisco Barahona.

Hasta dónde podrá influir lo que está ocurriendo en el país para los próximos comicios es un asunto difícil de vaticinar para Luis Guillermo Solís.

La cultura de los partidos tradicionales de tapar la corrupción es lo que les negará ganar las próximas elecciones según dice Antonio Álvarez.

Ejemplificó que si presuntamente la exSecretaria general del PLN, Carmen Valverde recibió casi $900 mil por pago de una asesoría de la firma francesa de telefonía Alcatel es un hecho que se suma a otros actos de corrupción que le quitan legitimidad a los partidos grandes.

El liberacionista José Miguel Corrales aseguró al ser consultado por UNIVERSIDAD que en principio no está interesado en volver a participar de una justa electoral pues quedó bastante cansado de sus participaciones anteriores.

Al insistirle si las condiciones cambiarán y si contará con mayor apoyo del electorado se interesaría en ser de nuevo candidato, Corrales aseveró que «remotamente, si se dieran esas circunstancias, y uno puede ayudarle al país, podría ser que participe pero no dentro de Liberación Nacional».

Para Alberto Cañas «las próximas elecciones las ganará un grupo nuevo. Yo me pasé al PAC. Tenemos las distritales listas, siempre en pie de guerra. Vamos adelante».

Ni la extrema izquierda ni la derecha lograrán mayores oportunidades para las elecciones entrantes a criterio de José Miguel Villalobos.

Sobre el PAC aseguró que «no es un partido político. Es un grupo popular en el que no existe una cúpula. Este partido no es más que una suma de grupos sociales y es algo menos que un partido. No ordenan, no mandan, es una anarquía absoluta».

El experto vaticinó que «el pueblo va a calificar a los mensajeros y luego les pedirá mensajes creíbles. Esto es altamente positivo para el país. Tal vez el país es el único donde todo esto pueda pasar en la institucionalidad sin que haya muertos, porque en otras naciones ya los hubiera habido, lo cual habla muy bien de la Nación».