Abrir Noticia Guardar

Califican de difícil ingreso a universidades

La muestra encuestada reconoce la calidad de la educación superior.

La muestra encuestada reconoce la calidad de la educación superior.
Mientras una encuesta de laa Universidad Nacional revela que 58% de las personas opina que la educación superior es de difícil acceso, un experto resaltó las dificultades que enfrentan las universidades ante la globalización.

La educación superior de calidad representa uno de los motores del desarrollo económico, intelectual y humano más eficaces para las naciones, en tanto las universidades participen en los debates sociales sobre estos temas, se acerquen a la población y no sean solo centros de producción de mano de obra calificada.

A esta conclusión llegó el investigador del Instituto para el Estudio de las Américas de la Universidad de Londres, Diego Sánchez Ancochea, en su exposición «Contextualizando la búsqueda de la calidad: Desarrollo económico y enseñanza superior en un mundo global».

Sánchez expuso su tesis en la conferencia de prensa ofrecida por el Instituto de Investigaciones Sociales en Población (IDESPO) de la Universidad Nacional (UNA) en el marco de su 29 aniversario.

La charla de Sánchez Ancochea complementó la presentación de resultados que Juan Bermúdez Mora hizo de la encuesta «Percepción de la ciudadanía costarricense sobre la contribución de la Universidad al desarrollo socioeconómico y la calidad».

Una educación superior de calidad, pero de difícil acceso, es la visión global que las 350 personas entrevistadas dejaron entrever: 78% aprueba la calidad en las universidades costarricenses, indistintamente sean públicas o privadas, y siete de cada diez considera que proponen soluciones al país; sin embargo,  58% admitió que no son accesibles a la población nacional.

En cuanto al acceso, los entrevistados consideran que los horarios, costos, precios y la infraestructura para personas con discapacidad son las principales deficiencias. La acreditación, actualización, administración, ayuda al estudiante, docencia e investigación, son otros temas que también representan preocupación en este sector.

Las personas consultadas son mayores de edad con experiencia laboral o de estudios en universidades públicas y privadas (un 62% solo ha tenido relaciones con las públicas) y los datos fueron recolectados entre el 7 y el 13 de octubre de 2004.





PUBLICAS Y PRIVADAS



Para las personas que participaron de la encuesta resulta relevante que las universidades apliquen exámenes de admisión exigentes (64% lo considera bien así) y que los procesos de formación incluyan ética, humanismo, responsabilidad, capacidad analítica y crítica, moral y valores cívicos. De acuerdo con la opinión expresada, esto varía mucho entre el ámbito público y el privado.

En esta materia las personas consultadas opinan que en promedio en las universidades públicas solo la mitad de las ocasiones se les inculca al alumnado valores autóctonos, respeto y tolerancia, comportamiento cívico y honradez en la profesión. Mientras que en el ámbito privado los estudiantes apenas se les inculcan estos valores en aproximadamente una ??cuarta parte de las coacciones.

Otro aspecto donde la opinión en la encuesta varía entre la educación superior pública y la privada es en la vinculación social, ya que 84% considera que en la primera se fomenta el conocimiento cobre la realidad del país; en contraste, seis de cada diez entrevistados piensan lo mismo de la privada.

En cuanto a actividades extracurriculares la ventaja la sigue manteniendo la universidad estatal, puesto que 81% cree que siempre se ofrecen intercambios culturales, 91% opina igual de las actividades artísticas y 92% de las deportivas; mientras que respecto a las privadas el porcentaje no pasa del 59% en estos rubros.

En oportunidades académicas 95% de los entrevistados considera que las cuatro universidades estatales siempre abren la opción de hacer investigación y un 71% lo cree del sector privado.

La tendencia se mantiene sobre las oportunidades de que el alumnado haga práctica en su carrera con 84% y 72% entre las públicas y las privadas, respectivamente.

En cuanto a docencia resalta el hecho de que más de dos de cada tres personas considera mayoritaria la acción de docentes universitarios en su papel de ser responsables en sus servicios, ejercer su vocación ética profesional, aprovechar su posición para obtener ventajas, responder con su trabajo a las necesidades de Costa Rica, ofrecer servicios de calidad, ser honestos en sus compromisos pedagógicos, usar recursos tecnológicos, motivar al estudiantado y estar preparados para su labor.



OPORTUNIDADES Y AMENAZAS



Según Sánchez Ancochea la globalización de corte neoliberal presupone cambios en la educación superior, en especial en la pública, lo que a su vez representa una serie de oportunidades y amenazas. A éstas se les debe enfrentar con un modelo de gestión de administración de calidad, alejado de la búsqueda burocrática y con acento en el papel que juegan los centros de estudio en la discusión de los temas sociales y económicos.

Para el economista las principales oportunidades de las que las universidades públicas podrían valerse, vendrían de la mayor capacidad de colaboración internacional, el incremento de la oferta de servicios y adaptación a necesidades, y la aplicación de nuevas tecnologías.

Por otro lado, estos sistemas académicos se verían amenazados por una comercialización que dificultaría la inversión en investigación ante la competencia que sostendrían con el sector privado por atraer más alumnos, el debilitamiento del presupuesto ante un modelo socioeconómico que propone la reducción del Estado. Además, la pública tendría que adaptarse al incremento de la desigualdad en el acceso y el aumento de universidades privadas.

Sánchez Ancochea advierte sobre las restricciones en los modelos y discursos alternativos en las ciencias sociales ante la imposición de un modelo único, la fuga de cerebros dirigida por el capital y la posibilidad de que puesto que la educación es un servicio, la Organización Mundial del Comercio pueda regular su comercialización.

Las recomendaciones para fortalecer el sistema educativo superior, en criterio del expositor, son apostar por la calidad, evitar caer en un discurso del aumento de los rendimientos o privatización encubierta. Además, rescatar el papel de los sectores docentes y estudiantiles en esta transformación y distanciar la calidad de la burocracia.

Sánchez  se comprometió a colaborar con el proceso de adaptación y calidad iniciado en la UNA.

  • Johan Umaña Venegas 
  • Universitarias
Notas

Este documento no posee notas.