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Un 83% de personas encuestadas opina que pobreza aumentó.
La carencia de vivienda es uno de los factores vinculados a la percepción de pobreza.
La carencia de vivienda es la principal característica de una familia pobre, según la encuesta realizada por el Instituto de Estudios Sociales en Población (IDESPO) de la Universidad Nacional (UNA), cuyos resultados fueron entregados el pasado 30 de agosto por el rector Olman Segura Bonilla.
Informó que un 83% de la población encuestada considera que la pobreza ha aumentado, cifra que el año pasado era de un 74%. Ese porcentaje es mayor si se toma por estratos sociales, pues en el más bajo llega al 92%. Este fue consultado en forma personal, mediante visitas a las casas, mientras en los estratos medios y altos la encuesta se hizo en forma telefónica, según explicó Segura.
También aumentó el porcentaje de la gente que cree que en el último año aumentó el número de familias pobres, lo cual fue reportado en un 42,4% del estrato bajo y un 22,3% del medio y alto.
Entre las soluciones que la población se planteó para hacer frente a la situación de pobreza están aumentos de empleo.
«Es clara la exigencia manifiesta de democracia en el mundo. En la UNA nos proponemos ser conciencia lúcida y crítica, como dice nuestro estatuto orgánico. Mediante esta encuesta la ciudadanía quiere decir algo sobre el deterioro del país. Nos muestra importantes resultados que deben ser tomados en cuenta por el Estado, así como por los diferentes grupos que trabajan esta temática», aseguró el Rector.
Agregó que es un hecho que la pobreza se ha incrementado significativamente y las soluciones implican generar políticas que mejoren las condiciones socioeconómicas de la población y hacer transformaciones en el sistema político. «Esto se relaciona con el nivel de descontento y con el deterioro de la imagen de los políticos», amplió el Rector.
Para el IDESPO, «esto hace un señalamiento drástico sobre la falta de credibilidad en el gobierno, el cual podría verse forzado a cambiar el rumbo político, si en realidad quiere bajar el nivel de pobreza» (párrafo 6 del resumen entregado a la prensa).
Otras de las soluciones referidas por las personas encuestadas es generar fuentes de empleo, estudio y oportunidades de educación y capacitación, así como una mejor condición salarial y prácticas solidarias. Igualmente bajar el costo de la vida, administrar mejor los recursos y buscar la superación personal.
La gente de los tres estratos sociales asegura haber hecho ajustes en el empleo para combatir la pobreza, mediante la búsqueda de un mejor trabajo (71,6%) y la incorporación de más jornadas laborales (46,4%), así como mandar a las mujeres y jóvenes a trabajar (20,8%), aunque un alto porcentaje no encuentra empleo. Un 20% dice que en el último año han cambiado de trabajo más de una vez.
La responsabilidad de la pobreza se le achaca al Estado en primer lugar, a la misma gente, a las municipalidades, a la empresa privada, a las organizaciones civiles y comunales, los organismos internacionales y la iglesia.
Entre las características de una familia pobre, según las personas sondeadas en la encuesta, también está la falta de dinero, la falta de trabajo y la escasez de alimentos.
La directora del IDESPO, Irma Sandoval, explicitó que si en el país no se toman medidas más estructurales y profundas, la pobreza no va a disminuir.
También se refirió a las diferentes formas en que se mide la pobreza y aseguró que se debe dar una discusión sobre el tema.
La encuesta se realizó entre 800 personas vía telefónica y 400 mediante visitas a las casas, y tiene un nivel de confianza del 90%.
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