La GuanaRED tiene tres años de organizar presentaciones artísticas en comunidades de esa provincia.
El próximo 17 de julio se presentará en Filadelfia, Guanacaste, el documental Las Peñas Culturales, producido por la Unidad de Producción Audiovisual (UPA), de la Vicerrectoría de Acción Social (VAS), de la UCR.
Se trata de un material que recopila la experiencia de organización de las peñas culturales que forman parte de la iniciativa GuanaRED.
El cineasta Pablo Ortega asumió la dirección de este proyecto y manifestó que “la idea fue colaborar con una iniciativa cultural que se estaba gestando”.
El realizador, quien se ha dado a conocer por producciones independientes como Costa Rica S.A., o también producidas por la UPA, como La Marina Errante, explicó que la iniciativa provino de una solicitud de la Oficina de Proyectos Culturales, con el objetivo de “hacer un documento que sirviera como testimonio de la experiencia, pero sobre todo que fuera útil a otras comunidades para que se extendiera la idea y se generen nuevos espacios”.
“Lo más bonito es la espontaneidad de las personas que quieren expresarse y no tienen los medios para hacerlo; ver cómo hacen su espectáculo con mayor o menor talento, pero satisfaciendo sus necesidades. Tengo noticia de que se ha ido extendiendo”, manifestó, al tiempo que especificó que la filmación fue hecha durante cuatro días en Liberia, Hojancha y Nicoya, a comienzo de año.
Por su parte Natalia Solórzano, editora del documental, detalló que el material hace un recorrido de las actividades de las peñas culturales, el cual “enfatiza la participación popular y cómo las comunidades se involucran para crecer culturalmente y exponer el arte propio”. El trabajo de edición tomó dos meses.
MOSTRAR EL TRABAJO
Una peña cultural es una actividad artística escénica, en la que la participación es abierta para que artistas profesionales o aficionados puedan mostrar su trabajo al público.
El movimiento de peñas culturales que luego se compone en la GuanaRED nació en octubre del 2006 en Nicoya  y desde entonces se consolidaron como espacios de arte comunitario organizados por artistas y gestores locales.
Estos encuentros son en periódicos y permanentes para dar continuidad al entusiasmo y aprendizaje artístico, así como al intercambio del conocimiento y de las experiencias de artistas de trayectoria con las de los nuevos.
De acuerdo con Esteban Alfaro, integrante del movimiento desde que se inició hace tres años con la Peña Nicoyana, la GuanaRED nació por iniciativa de Guadalupe Urbina y con el apoyo de la Dirección General de Cultura, del Ministerio de Cultura (MCJ), con el objetivo de integrar a las personas que organizaban actividades en la región, pero de manera dispersa y esporádica.
“La GuanaRED es un punto de encuentro peñero, sirve para compartir recursos y constituye una alianza para mantener los espacios”, añadió.
Alfaro, de 21 años, rememoró que inició su trabajo con la Peña Nicoyana cuando aún estaba en el colegio. “En el pueblo no había nada qué hacer más que ir al parque a pasar un rato, no había espacios para compartir el arte, siquiera un cine”.
Así, el espacio atendió necesidades reales de la juventud local: “Los compañeros de barrios marginales son más vulnerables a caer en ciertas cosas, por lo que la peña cumple el doble propósito, no sólo para alejarlos de esos peligros, sino que conscientemente los motivan para que sigan estudiando y lleguen a la universidad. Guanacaste es una de las dos provincias más pobres y con menos educación del país”.
Hoy se organizan peñas en los cantones de Filadelfia, Nicoya, Liberia, Cañas, Abangares, Tilarán, La Cruz, Bagaces, Nandayure y Santa Cruz. Además han trascendido el ámbito guanacasteco, pues también se han gestado en Alajuela, San Ramón, Cartago y Guápiles. Pronto se abrirán espacios en Moravia y Pococí, según informó.
Añadió que la tendencia de quienes organizan las peñas es que se realicen en los parques de las comunidades, donde atraen a un mayor público, cuyo promedio ronda las 200 personas. Recordó que en Hojancha se llegó a convocar a 500.
El hecho de organizarse en torno a la GuanaRED ha servido para que los gestores de cada espacio local compartan iniciativas como realización de festivales o concursar para el fondo PROARTES, de la Dirección General de Cultura.
Puntualizó que son principalmente los jóvenes quienes se encargan de producir los espacios. “Los artistas son los más beneficiados porque circulan de peña en peña y así se dan a conocer, se ha generado mucha actividad en música y literatura, sobre todo porque los artistas saben que pueden regresar el mes siguiente y mejorar su actuación, pues el espacio está disponible”.