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Encuesta telefónica postelectoral: Género y personalidad dieron ventaja a Laura Chinchilla

Mientras que la presidenta electa recibió votos por ser mujer y su forma de desenvolverse, Ottón Solís recibió adeptos por su plan de gobierno.

Mientras que la presidenta electa recibió votos por ser mujer y su forma de desenvolverse, Ottón Solís recibió adeptos por su plan de gobierno.
Una encuesta telefónica postelectoral efectuada por  el Centro de Investigaciones y Estudios Políticos de la Universidad de Costa Rica (UCR) reveló que la presidenta electa Laura Chinchilla recibió la mayoría de votos debido a su género y a sus atributos personales.
En el sondeo se entrevistó a 1205 personas del 8 al 12 de febrero. El 15,7% de las personas consultadas que votaron por la excandidata del Partido Liberación Nacional aseguraron que la eligieron por ser mujer, mientras que 14,6% por su personalidad y 12,3% por sus propuestas. Trece de cada 100 lo hicieron por el desempeño del actual gobierno.
Los números para el aspirante del Partido Acción Ciudadana, Ottón Solís, señalaron que la cuarta parte sufragó por el economista por su plan de campaña, en tanto que 15 de cada 100 por su personalidad. Otto Guevara, del Movimiento Libertario, se vio favorecido por sus electores y electoras, ya que más de la quinta parte deseaba ver un cambio y un 19,9% se vio atraído por su forma de ser. PERSONALISMO, NO PARTIDOS
El politólogo Alberto Cortés, uno de los investigadores de la encuesta, explicó que existe un  sector de la ciudadanía que vive las elecciones como espectador, para decidir al final a quién darle el voto, basándose en el estilo e imagen de la figura política que aspira a puestos de poder. Esta circunstancia es típica de los sistemas democráticos en los que la televisión prevalece como medio de comunicación por excelencia. “Es el peso de la figura del candidato y el debilitamiento de la tradición y los partidos como institución política”.Manifestó que estos grupos se caracterizan por ser independientes al analizar las ofertas electorales que se les brindan, y no se “colocan la camiseta” de una agrupación determinada. Por tal motivo, es que más allá de un arraigado apego a un color político, las personas entrevistadas aseguraron que emitieron el sufragio de acuerdo con el comportamiento de cada postulante. La psicóloga social Marisol Fournier, otra de las profesionales participantes, comentó que el hecho de que una mayoría eligió a la candidata verdiblanca no significa que en las elecciones del 2006 la misma ciudadanía haya votado por el actual mandatario Óscar Arias o que en las próximas lo hará por el siguiente sujeto que se postule por el PLN. “No es una adhesión fiel”, reconoció.La profesional destacó que más de la mitad de las féminas eligió a Chinchilla al verla como “un cambio por ser mujer, no por la continuidad del gobierno”.Los resultados arrojaron que además de tener un voto mayoritariamente femenino, el apoyo para la futura presidenta tendió a incrementarse conforme aumentaba la edad de los habitantes. A su vez, los hombres y las personas más jóvenes eligieron a Solís, comportamiento que también se identificó con Guevara. Fernando Zeledón, politólogo, añadió que hay un desequilibrio entre el interés por la política y por las elecciones, siendo las segundas un evento coyuntural que llama más la atención. Esto se refleja en “la consistencia con que la mayoría de la población entrevistada le dio el voto al candidato y no al partido; hay una especie de afiliación del votante por la persona. La política es muy personalista y hay una fuga de simpatizantes de partidos”. Como muestra, casi la mitad de los mayores de edad señaló que no tenía predilección por ninguna agrupación. Sin embargo, se observó que 28 de cada 100 se identificaron con el PLN, 9 con el PAC y 4 con el ML. También se observó que a pesar de que las figuras pesaron en mayor medida, poco más de la décima parte de los seguidores liberacionistas votaron por tradición o coincidencias con el partido, cifra menor a las razones que se enfocaban en la parte individual de los postulantes. En contraste, un 0,4% se decantó por Solís y 1,1 por Guevara, por los mismos motivos. Un 0,5% apoyó a Chinchilla porque “le gusta votar a ganar”. Los especialistas resaltaron que el interés aumentó en comparación con las elecciones anteriores, a pesar de que la polarización fue menor, ya que no se presentó ningún tema polémico como fue hace cuatro años el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos (TLC).Ser partícipe de la definición del futuro del país por medio del voto condujo a la población a acudir a las urnas, propensión que a la vez colaboró a la baja en cinco puntos del abstencionismo.
 

Ficha técnica
Encuesta telefónica Elecciones 2010Muestra: 1205 encuestas válidasFecha de aplicación: Del 8 al 12 de febrero del 2010.Efectuada por: Centro de Investigaciones y Estudios Políticos (CIEP) y Escuela de Sociología, en colaboración con la Escuela de Ciencias de la Computación e Informática y el Centro de Informática (de la UCR) y la Facultad de Ciencias Sociales de la UNA.Margen de error: 2,8% y nivel de confianza: 95%.

 
Población con mayor nivel educativo apoyó a Solís
Las personas entrevistadas en la encuesta con mayor nivel de educación tendieron a darle el voto al candidato del Partido Acción Ciudadana (PAC), Ottón Solís. Treinta de cada 100 personas que lo apoyaron cuentan con estudios universitarios completos, mientras 20 de cada 100 con educación superior inconclusa. El 17,6% finalizó la secundaria y 14,3 la primaria. Un 0,4% carece de estudios.En tanto, de los electores que sufragaron por Laura Chinchilla, 18,5% finalizó la universidad, igual cantidad el colegio y 25 de cada 100 la primaria, a la vez que 2 de cada 100 no tienen estudios. La diferencia más significativa se dio en los seguidores del libertario Otto Guevara. El porcentaje de personas con universidad completa y sin estudios del todo, igualaron en 3,7%, mientras que el mayor número de votantes cuenta con secundaria incompleta (poco más de la cuarta parte) y escuela completa e incompleta (24 de cada 100 en cada uno).“El perfil del votante del PAC lo conforman quienes se detienen a leer las propuestas del partido”, comentó el politólogo Fernando Zeledón.Los investigadores encargados de la encuesta establecieron en un informe de resultados un perfil de las personas votantes de cada partido, y señalaron que la población que favoreció a Chinchilla se conforma por mujeres con un nivel educativo bajo y mayor tradición personal y familiar de votar por el PLN. Se encontró que fueron quienes tuvieron menos problemas para decidirse.Los seguidores de Solís, por otra parte, son en su mayoría hombres con nivel educativo alto. Estos señalaron como elemento motivador la necesidad de una transformación y la posición del excandidato sobre el TLC y le dieron menor importancia a su personalidad.Los varones también se declinaron por Guevara y se caracterizaron por tener menor interés en las elecciones, además de que fue el grupo al que le costó más decidirse a apoyar al libertario. Al igual que el anterior, los deseos de un cambio influyeron, y mostraron un menor apego a tradicionalismos.

 
Búsqueda de diversidad marcó quiebre de voto
Debido al fenómeno del quiebre del voto, no está claro cuál es la tendencia ideológica de un sector de las personas consultadas, comentó la psicóloga social Marisol Fournier. No obstante, la encuesta permitió identificar que la población buscaba una composición diferente en la Asamblea Legislativa, razón por la cual votó en parte de manera distinta para presidente y diputados. De la población consultada, 29 de cada 100 personas quebraron su voto para fomentar la división o dispersión del poder en el congreso. Un 22,9% siguió dicha tendencia porque le agradaban los candidatos a diputados de los otros partidos y un 17,9% porque conocía a los aspirantes de ese partido o no sabía quiénes eran los de la agrupación por la que votó para presidente. Trece de cada 100 diferenció la elección por las propuestas de los candidatos a legisladores. “El principal motivo muestra los deseos de que hubiera diversidad y de esta forma hacer un contrapeso”, afirmó Fournier, quien citó el ejemplo del Partido Accesibilidad sin Exclusión, que obtuvo cuatro escaños gracias a una propuesta específica a favor de las personas con discapacidad y a su acepción como el grupo opositor “menos agresivo”.“Puede ser que a la población le simpatice un candidato, pero no pretende que tenga todo de su lado ni la vía para hacer lo que quiera”.El informe de la encuesta halló que la tendencia fue apoyar a diputados de los partidos con menor caudal en la papeleta presidencial. La excepción fue el Partido Unidad Social Cristiana, pues la quinta parte de sus electores votó por alguno de estos, pero eligió en su mayoría a diputados del PLN. 

 

  • Nathalia Rojas Zúñiga 
  • País
National LiberationPartido Liberación Nacional
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