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La Procuradora General de la República, Ana Lorena Brenes, aseguró a los diputados de la Comisión de Ambiente de la Asamblea Legislativa, que “no considera haber hecho nada indebido” al llamar al exministro Rodrigo Arias la noche antes de su reelección.
En la respuesta que dejó Brenes por escrito a los diputados, la funcionaria reconoció haber llamado a Arias, y justificó este hecho en la complejidad del proceso de su ratificación, que tomó más de cinco meses.
“Como se puede imaginar, fue algo muy tenso y desgastante para mí, al punto de que en más de una ocasión me vi ante la disyuntiva de si mantener o retirar mi nombre, pues no deseaba que mi designación condujera a un enfrentamiento improductivo de Poderes o a un estancamiento prolongado”, aseguró Brenes.
La procuradora indicó que “para mí era importante contar con los elementos de juicio que me permitieran tomar la mejor decisión”, por lo que habló con los jefes de fracción, diputados, exdiputados y dirigentes políticos.
“La llamada que realicé esa noche a don Rodrigo Arias fue solo una más de esas comunicaciones. En la conversación con don Rodrigo, después de saludarlo, me limité a preguntarle si sabía algo acerca de mi ratificación”, relató Brenes.
“Él únicamente me indicó que tenía entendido que la situación era compleja, pero que esperaba que el desenlace fuera positivo”, añadió.
“Debo decir, enfáticamente, que en ningún momento de esa llamada le solicité que intercediera o hablara con nadie a mi favor, ni tampoco él se comprometió a hacerlo”, indicó.
Brenes comentó que su “único propósito” fue el saber “a qué atenerse”, lo cual no considera “impropio o irrazonable”.
La funcionaria también reconoció que el expresidente Óscar Arias la llamó al inicio de este año, para preguntar si la Procuraduría presentaría el recurso de casación a la sentencia sobre el caso Crucitas, en la que se ordenó una investigación contra Arias.
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