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Castración de la función paterna

En esta época de cambios y transformaciones constantes, viene a  la palestra el tema sobre la negación de la función paterna. Algunos  psicoanalistas como Freud y Lacan hablan de la importancia de esta función; ellos postulan que el padre constituye un epicentro crucial en la estructuración psíquica del sujeto, puesto que esta función es la que permite vehiculizar al significante fálico, que es lo que separa a la madre del hijo, introduciéndose de esta manera la castración, y colocando así al sujeto en una posición de falta.

En esta época de cambios y transformaciones constantes, viene a  la palestra el tema sobre la negación de la función paterna. Algunos  psicoanalistas como Freud y Lacan hablan de la importancia de esta función; ellos postulan que el padre constituye un epicentro crucial en la estructuración psíquica del sujeto, puesto que esta función es la que permite vehiculizar al significante fálico, que es lo que separa a la madre del hijo, introduciéndose de esta manera la castración, y colocando así al sujeto en una posición de falta.
La función paterna posibilita esa condición de falta en la existencia del sujeto, abriendo un vacío que no puede ser colmado. Esta falta posibilita el deseo, y la demanda, siempre metonímica e inagotable, pues remite a la carencia generada siempre por la castración. La función del padre simbólico como soporte de la ley al prohibir el incesto, posibilita el ingreso del sujeto al orden de la cultura y accediendo el niño a la metáfora paterna se instala en el orden simbólico.
Para Winnicott, psicoanalista de niños, desde el comienzo el padre actúa como protector de la díada madre-bebé, permitiendo que la madre funcione como sostén de dicha díada. Más adelante es también el padre quien debe contribuir al movimiento de separación entre ambos.
Desde la óptica de Lacan, la metáfora paterna logra reprimir el deseo materno en tanto ella acepta la prohibición del incesto. Mientras que el niño, por su lado,  acepta la castración simbólica que efectúa el padre al separarlo de la madre. En tanto el padre es el portador del falo, permite que el niño deje de ser el falo de la madre.  Pero esto no siempre ocurre así.
Como podemos notar, es importante el rol del padre en la estructuración del psiquismo en los seres humanos; no entiendo cómo dentro de esta Universidad se niega el  permiso a varios trabajadores para que asistan a un curso de preparación integral para el embarazo, parto y posparto, fundamentado en un “principio de legalidad y tipicidad”, justificando que no hay norma alguna que permita validar dicho permiso. Medidas anacrónicas y aberrantes al negar un permiso a un trabajador para que asista a este  curso de preparación para el parto; igualmente es nefasto que la administración del recurso humano esté en manos de leguleyos que no entienden y no conocen los grandes cambios de forma constante, que se están dando dentro de nuestras sociedades. Pareciera que el interés primordial es mantener el statu quo y ser serviles de un poder cada vez más machista, xenofóbico, homofóbico y patriarcal. ¿Qué pensarán estos señores de  los movimientos de liberación sexual que se están dando en todo el mundo? Por ejemplo, los movimientos feministas postestructuralistas o las teorías Queer sobre los cambios constantes y de que nada es fijo o estable.
Para algunos profesionales en  las ciencias y el derecho, que defienden y proclaman la norma como la panacea bajo la reglamentación de los cánones del derecho romano, lo que no está escrito en piedra no existe, como dicen los cartesianos: pienso, luego existo; pero en realidad ni piensan ni existen; se les paró el reloj  o como lo expone  Michel Foucault: “la disciplina produce individuos, la norma produce estándares comunes”.
Lo que no está en la norma no existe, o no la entienden,  y con esto me refiero a este pensamiento legalista de asesores que niegan un permiso para que padres se eduquen por medio del curso de preparación al parto, violentando con ello los supuestos derechos universales de ser padre.
Sin duda, el Consejo Universitario tendrá que trabajar bastante y  modificar los estatutos y las normas que  contemplan los permisos de maternidad e incluir la función del padre  en la crianza de los hijos, si quieren que esta Universidad siga teniendo el título de humanista e igualitaria.

  • Jorge Villalobos Rivera (Psicólogo UCR)
  • Opinión
Feminism
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