Abrir Noticia Guardar

Migración nicaragüense al país se estabiliza

Luego de que los tambores de la guerra por la disputa de isla Calero/Los Portillos acallaron con la resolución de la Corte de La Haya, Nicaragua busca atraer a su mano de obra calificada que opera en Costa Rica para que se integre a millonarios proyectos de construcción. (Ver recuadro 1: El COSEP  de Nicaragua habla del futuro de los nexos con Costa Rica).

Luego de que los tambores de la guerra por la disputa de isla Calero/Los Portillos acallaron con la resolución de la Corte de La Haya, Nicaragua busca atraer a su mano de obra calificada que opera en Costa Rica para que se integre a millonarios proyectos de construcción. (Ver recuadro 1: El COSEP  de Nicaragua habla del futuro de los nexos con Costa Rica).
La construcción de la planta hidroeléctrica de Tumarín, en el departamento de Matagalpa, con un costo de $700 millones de dólares, y del complejo turístico de Guacalito Isla, en la región de Tola ($200 millones de dólares) son dos de los megaproyectos pilotos que están en la cartera del Estado nicaragüense y del sector privado de ese país para impulsarlos en el corto plazo.
¿Cuánto afectará esto a Costa Rica,  donde la mano de obra de Nicaragua se ha convertido en un pilar de nuestra economía?
“Es relativo, en realidad no nos preocupa, porque si hay fuga de fuerza laboral, será la que tiene carácter estacional. Es muy difícil que puedan competir con salarios, condiciones laborales, y llevarse a la gente que ya se instaló de forma permanente en Costa Rica”, dijo a UNIVERSIDAD Randall Murillo, gerente de la Cámara de la Construcción de Costa Rica.
El sector, en todo caso, aún no se recupera de los efectos de la crisis internacional que golpeó a Costa Rica a partir del 2008, y que afectó 35.000 empleos de la construcción, en el que laboran miles de nicaragüenses. El 2010 mostró un repunte, de un 11%, y para el presente año se espera un crecimiento de 12%, que apenas cubre la mitad de la caída de 36% que sufrió la actividad.
“Ocuparemos mano de obra calificada, que ha adquirido ese estatus en Costa Rica, soldadores, electricistas, fontaneros, albañiles, carpinteros, al inicio serán unos 1.500 empleos por cubrir. Primero daremos trabajo a la mano de obra no calificada que sobra en Nicaragua”, explicó a UNIVERSIDAD Mario Zelaya, presidente de la Cámara de la Construcción.
Zelaya consideró que es urgente para los dos países retomar el diálogo binacional, dejar que el problema fronterizo lo resuelva la Corte de La  Haya, y avanzar hacia un concepto centroamericanista para que la región sea más “competitiva y atractiva” para los inversionistas extranjeros.
Carlos Sandoval, profesor de la Escuela de Ciencias de la Comunicación Colectiva, dijo que al margen de los problemas en la frontera hay una tendencia a la estabilización de la emigración de nicaragüenses hacia Costa Rica a partir del año 2000. “El censo del 2000, comparado con la última encuesta de hogares, muestra una disminución, en estos diez años, de un 1% en el ingreso de nicaragüenses”, dijo.
“El país ahora tiene competencia por mano de obra de la vecina nación, proyectos como el de ampliación del Canal en Panamá, y un repunte de la construcción en El Salvador”, explicó.
Arnoldo André Tinoco, presidente de la Cámara de Comercio de Costa Rica, considera que ante las perspectivas que se abren tras el pronunciamiento de la  Corte Internacional de Justicia, debe abrirse espacio al diálogo.
“Creemos que debe reactivarse, tanto el diálogo bilateral como en sedes multilaterales, en especial para impulsar el proyecto de Centroamérica frente a la Unión Europea”, dijo Tinoco a UNIVERSIDAD.
Los dos países sin interdependientes, dijo Sandoval. Por ejemplo, en el 2010 Costa Rica exportó el equivalente a $392 millones de dólares e hizo importaciones por $89,8 millones de dólares. (Fuente: Cámara de Comercio de Costa Rica)
El politólogo Alberto Cortés, quien ha investigado el fenómeno de la migración nicaragüense, coincidió con Sandoval que el fenómeno de la inmigración viene estabilizándose desde hace algún tiempo.
“La hipótesis de un congelamiento de la emigración desde Nicaragua es creíble y posible”, dijo Cortés, quien es director del Consejo Universitario de la UCR.
“En el mundo rural nicaragüense hay alguna inversión del Gobierno (a pesar de la corrupción y la demagogia del presidente Daniel Ortega) lo que posiblemente afloja la presión sobre los nicaragüenses sobre su necesidad de emigrar”, apuntó.
 

 
“Nuestros conciudadanos están regresando”
En entrevista vía email para UNIVERSIDAD el presidente del  Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP) de Nicaragua, José Adán Aguerri, habla  del futuro de las relaciones binacionales y necesidades de mano de obra.
¿Qué criterio tiene el COSEP del último diferendo fronterizo? ¿Cómo afectan estos roces (independientemente de donde se originen) los intereses comunes, en este caso al sector comercio, inversiones, etc.?
– Esta situación que usted expone innegablemente ha impactado en la economía de nuestros países, ya que el tránsito de personas y mercancías de alguna forma se ha afectado, lo cual evidentemente afecta intereses comunes comerciales que Nicaragua y Costa Rica tienen desde hace mucho tiempo.
Sin ánimo de identificar o exigir responsabilidades u origen del conflicto, COSEP es del criterio de que Nicaragua tiene derecho de ejercer pleno dominio y sumo imperio sobre las aguas del río San Juan. Pero esta postura no debe obnubilar nuestra visión gremial empresarial y por ello hemos expuesto en forma clara ante nuestras autoridades y los demás gobiernos de la región que  no se debe confundir lo económico con lo político.
¿Considera urgente el COSEP que una vez conocido el fallo de la Corte los dos países se impongan la tarea de reconstruir el diálogo binacional? ¿Cómo vislumbran ustedes este diálogo si llega a restituirse?
– COSEP en primer lugar, reconoce  «la prudencia» con que el Gobierno nicaragüense  ha sabido defender con «firmeza» los derechos del país. Hemos respaldado  los mecanismos de diálogo y entendimiento que permitan no se escalen este tipo de situaciones que no dejan nada positivo  a nuestros pueblos hermanos. Hemos apoyado   y estimulado que se  intensifiquen los mecanismos diplomáticos para encontrar salidas prontas, rápidas y efectivas.
COSEP hizo un llamado a los Gobiernos de Nicaragua y Costa Rica a que acepten y cumplan con lo resuelto por la Corte Internacional de Justicia, que retomen la agenda binacional y se resuelvan como hermanos los temas que se han presentado. Nos comprometemos a estimular, sin dilación, ese diálogo.
¿Cree el COSEP necesario incluir otros actores en la elaboración de una agenda de diálogo entre Costa Rica y Nicaragua? ¿Estaría dispuesto a participar si lo convocaran?
– Este es  un tema que primordialmente corresponde abordarlo entre Estados, y por ende, les corresponde a los gobiernos dilucidar este diferendo  por las vías pacíficas y diplomáticas pertinentes. Los actores sociales debemos  comprometernos a respaldar a nuestros gobiernos y estimular en forma vehemente el diálogo. Sin embargo, valoramos que por tratarse de un asunto territorial que vincula aspectos de propiedad, turismo, agroindustria y comercio,  entre otros, debe tomarse en cuenta los aportes y visión técnica del sector privado, y por ello, estaríamos anuentes a participar como COSEP en la agenda de diálogo que se acuerde oportunamente.
Hay una percepción en  Costa Rica de que la emigración de nicaragüenses hacia Costa Rica se ha estancado desde hace unos diez años. ¿Lo ven ustedes así y a qué lo atribuyen? ¿Está retornando alguna de esta mano de obra?
– El sector privado nicaragüense ha hecho un llamado a los trabajadores especializados, operadores de maquinaria pesada, electricistas, soldadores, fontaneros, albañiles, carpinteros y armadores en hierro, entre otros, que viven en el extranjero, principalmente en Costa Rica y Panamá, a que regresen a trabajar en proyectos de vivienda, turismo y obra pública.
El sector construcción nicaragüense experimenta un repunte con el levantamiento de importantes obras en distintos puntos del país. En total se estima una inversión de $1.200 millones.
Podemos mencionar la planta hidroeléctrica Tumarín, en Matagalpa, que requerirá una inversión de $700 millones y el nuevo complejo turístico Guacalito de la Isla, en Tola, en Rivas, proyecto que tiene un costo estimado en $250 millones.
Además, está el mantenimiento de varias plantas de energía, proyectos de hoteles en Managua y la construcción del nuevo complejo de la Corte Suprema de Justicia.
Todo lo cual, sin lugar a dudas, ha provocado de manera positiva, que nuestros conciudadanos estén regresando a nuestro país.

 

  • Ernesto Ramírez 
  • País
Notas

Este documento no posee notas.