Alrededor de 20 personas, activistas y especialistas de las diversas ramas de la llamada cultura libre, emprenderán el 4 de mayo un viaje de casi dos semanas a lo largo de Centroamérica, con el propósito de potenciar discusiones y trabajo regional.
La actividad ha sido denominada “Libre Bus” y, según explicó la sicóloga Carolina Flores -quien forma parte de la organización del evento-, lo necesario de iniciativas como esta radica en que “vivimos en un sistema económico y cultural que nos enseña que compartir es algo malo; la propuesta de la cultura libre es, más bien, compartir es lo natural y se debe revalorizar la solidaridad.  La cultura y el conocimiento crecen si se comparten, de lo contrario mueren”.
Detalló que el recorrido del bus será un fin en sí mismo, pues las horas de viaje se aprovecharán para trabajar ciertos temas entre todas las personas que forman parte del viaje, como el “software” libre, la biodiversidad como un bien común y el conocimiento abierto.
Flores informó que el recorrido partirá de Costa Rica y pasará por Nicaragua, Honduras, El Salvador y Guatemala. En cada país se realizarán conferencias y “desconferencias”, las cuales describió como menos formales y que incitan a una mayor participación de la gente, así como actividades culturales y talleres de capacitación.
“Queremos encontrar a más gente interesada en estos temas; sobre todo gente joven que haya realizado algún tipo de activismo por medio de la tecnología”, indicó.
LOS CUATRO EJES
El “Libre Bus” definió para su trabajo cuatro ejes temáticos: el conocimiento libre y biodiversidad, software libre, libertad de expresión y la libertad para compartir.
El primer caso se refiere a la necesidad de defender los conocimientos tradicionales que tienen que ver con producción, alimentación y expresiones culturales.
El software libre es un término que engloba la producción de paquetes informáticos de libre distribución y código abierto, es decir, que los códigos a partir de los cuales se diseñan los programas de cómputo son puestos a disposición de todo el mundo para que le introduzca mejoras.
La preocupación por la libertad de expresión estriba en que, contrario a la apariencia que generan los medios electrónicos y la explosión demográfica de “blogs” o bitácoras en Internet, “la libertad y la neutralidad de la Internet no están aseguradas, por lo cual es urgente definir estrategias y plantear alternativas que garanticen la democratización de los espacios informativos en general”, según apunta el sitio en Internet del “Libre Bus”.
  El tema de la libertad para compartir tiene que ver con la apertura de mayores posibilidades para la distribución de información y conocimiento, lo cual incluye a las obras artísticas.
En ese mismo sitio indica que “es necesario reducir las barreras técnicas, legales y sociales que limitan” el derecho a compartir, sin menoscabo del derecho -que a su vez tienen quienes crean arte y conocimiento- a que su trabajo sea “reconocido y retribuido con justicia”. “En el movimiento de cultura libre difundimos la libertad para compartir, remezclar y transformar”, indica la fuente.
  Flores detalló que la iniciativa del “Libre Bus” tiene antecedentes en los encuentros centroamericanos de software libre-. Además, en Guatemala se ha tomado la idea para realizar giras de difusión de programas informáticos libres en sitios alejados del interior del país.
Informó que esta gira fue gestada por Renata Ávila, de la organización Creative Commons de Guatemala; Michelle Thorner, quien también perteneció a esa organización, y Teresa Sampere, de la cooperación española.
Según indicó, Hivos -la Agencia de Cooperación de los Países Bajos- aportó el 60% del financiamiento necesario, lo cual además se consiguió a través de colaboraciones en especie y donaciones.
LA LIBERTAD DE COMPARTIR
La activista Eva Carazo, quien participará en la gira, destacó que la iniciativa servirá para abrir la discusión sobre “la necesidad de que el conocimiento sea compartido de forma libre y se construya colectivamente, que no haya restricciones para saber qué piensan las personas, decir lo que pensamos y compartir creaciones de software o artísticas”.
Carazo, quien durante varios años formó parte del Movimiento de Agricultura Orgánica Costarricense (MAOCO) y fue candidata a diputada por el Frente Amplio, indicó que su participación en el proyecto se origina precisamente en su trabajo sobre los temas de biodiversidad y en los “movimientos de resistencia a la propiedad intelectual sobre las formas de vida”.
Al respecto recordó que el conocimiento sobre semillas, plantas y animales se ha mantenido porque ha sido de dominio colectivo; “las comunidades campesinas y los pueblos indígenas lo compartieron entre generaciones y entre vecinos, de la misma manera que compartieron los recursos mismos”.
“El intercambio colectivo enriquece a la sociedad, pero las nuevas legislaciones de propiedad intelectual limitan la libertad de compartir; se convierte en delito el hecho de fotocopiar un libro o proyectar una película, así como intercambiar semillas. Ese tipo de restricciones rompen con la tradición del conocimiento”, lamentó.

Empieza en la UCR
Carolina Flores destacó que en Costa Rica la institución que más ha colaborado con el “Libre Bus” ha sido la Universidad de Costa Rica (UCR) y el inicio de las actividades tendrá su epicentro precisamente en sus instalaciones.
El 4 de mayo, en el Auditorio de la Ciudad de la Investigación a las 9 a.m., se realizará una presentación y conferencias sobre derechos de autor y acceso libre al conocimiento, luego a la 1 p.m. una mesa redonda sobre ejes de trabajo del “LibreBus”.
Al día siguiente, en la Sede Regional en Guanacaste de la UCR, ubicada en Liberia, a las 2 p.m. en el miniauditorio se realizará un foro sobre los ejes de trabajo del “Libre Bus” y a las 4 p.m. una peña cultural en el Salón Multiusos.