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Exregulador denuncia excesivas ganancias de RECOPE

El exregulador Leonel Fonseca afirma que la Refinadora Costarricense de Petróleo (RECOPE) tiene un superávit acumulado de ¢332.000 millones que debería utilizar en mejoras y crecimiento, a lo cual se suma un informe de la Contraloría General de la República que advierte que ese ente invierte mucho menos de lo planeado.

El exregulador Leonel Fonseca afirma que la Refinadora Costarricense de Petróleo (RECOPE) tiene un superávit acumulado de ¢332.000 millones que debería utilizar en mejoras y crecimiento, a lo cual se suma un informe de la Contraloría General de la República que advierte que ese ente invierte mucho menos de lo planeado.
No obstante, Jorge Rojas Montero, gerente general de RECOPE aclaró que la cifra acumulada es de ¢270.000 millones, y que se trata de un registro contable de los excedentes que han sido invertidos en infraestructura a lo largo de los años y que en algunos casos han sufrido atrasos por los procesos licitatorios.
Otro aspecto que cuestionó el exregulador Fonseca fue que el modelo de fijación automática de tarifas -basado en el incremento del precio internacional del petróleo-, le ha generado a RECOPE enormes ganancias y un superávit anual por encima de las otras empresas públicas.
Por su parte, la Autoridad Reguladora de Servicios Públicos (ARESEP) confirmó que están haciendo un estudio para devolver al consumidor unos ¢35.000 millones, mediante la rebaja de tarifas en combustibles.
 
Adicionalmente, Fonseca explicó que el pago de impuesto de la renta que el Ministerio de Hacienda obliga a pagar a RECOPE de sus utilidades es ilegal, pues la ley por la que se regula la entidad ya establece un impuesto único al combustible, que es trasladado al consumidor.
¿SUPERÁVIT O RECURSOS PARA INVERTIR?

Para el exregulador, el superávit que ha acumulado la Refinadora responde a un modelo de fijación tarifaria que ha generado enormes ganancias violatorias a la ley, “pues ninguna otra empresa regulada por la ARESEP tiene rentabilidades del 13%”.
“La ley de ARESEP (7593) establece y obliga para la fijación de los servicios públicos  -específicamente en combustibles que importa, procesa y comercializa RECOPE-, que se realice de acuerdo al costo de operación de la entidad, permitiendo una rentabilidad para el desarrollo e inversión del servicio público. Pero en realidad esos recursos no se están invirtiendo como debe ser”, detalló Fonseca.
Esta afirmación es rebatida por el gerente general de RECOPE, quien aseveró que todos esos dineros han sido invertidos en tanques, oleoductos, edificaciones y obras en la refinería. Rojas detalló que su forma de reflejarlos es como excedentes, pero otras empresas públicas lo trasladan como patrimonio.
“No es que tengamos esos dineros en caja. Eso se va gastando en inversiones que va haciendo RECOPE y que va quedando en el activo de la empresa. Planificamos anualmente las inversiones; pero, en razón de que el proceso licitatorio es relativamente lento en el Estado, muchas veces no se logra hacer una ejecución total de lo planeado, aunque esos recursos siempre son invertidos”, dijo el gerente de la entidad (ver recuadro de inversiones).
Esto fue confirmado por Álvaro Barrientos, director de Energía de la ARESEP, quien explicó que las cifras acumuladas no necesariamente son recursos cobrados de más, sino que son fondos que tienen un destino autorizado previamente y que se va dando en el tiempo.
FIJACIÓN DE TARIFAS

Mientras tanto, Leonel Fonseca alega que “se han impuesto modelos económicos automatizados, concretamente en combustibles, donde no se toman en cuenta los costos nacionales, sino que se basan en los precios que rigen en el mercado internacional”.
A su parecer, esto tiene un efecto negativo para el consumidor, ya que solamente se toma en cuenta el valor de los productos terminados y refinados, como la gasolina o el búnker y no incluye el valor de la materia prima, que es el crudo y que tiene un costo más bajo.
De hecho, dijo Fonseca, RECOPE acepta que no se toma en cuenta el costo de refinación para fijar el valor del producto final al consumidor, situación que le ha producido ganancias excesivas y que deben devolverse mediante el rebajo de precio a los consumidores,  “pero no invierten ni rebajan a la gente”, acotó.
Sobre este particular, Barrientos -de la ARESEP- detalló que hay dos metodologías para hacer la fijación de precios de combustibles: una que es automática y que se aplica mensualmente, de acuerdo con las variaciones en los precios internacionales y que se aplica a los precios nacionales; y otra, que es extraordinaria.
Esta última se lleva a cabo cada seis meses, cuando se revisan las diferencias entre el precio y el rezago tarifario; esto implica definir si se ha cobrado de más o menos al consumidor.
Al respecto, la ARESEP anunció que está realizando un análisis del superávit que ha tenido la entidad, lo que permitiría devolverles a los consumidores unos ¢35.000 millones para este año, lo cual se vería reflejado en la rebaja de tarifas de los combustibles.
“Esos mecanismos que se utilizan para compensar los incrementos de los precios internacionales, han hecho que se produzca un superávit que ronda esa suma y que no se justifica que se tenga en las arcas de RECOPE, por lo que es probable que en los próximos meses se les devuelva a los costarricenses”, indicó Barrientos.
Sin embargo, el gerente de RECOPE adujo que aunque esos dineros se devuelvan, ellos se verán en la necesidad de volver a solicitarlos mediante presupuestos, pues los recursos ya tienen un destino establecido, y entonces “el traslado al consumidor será temporal”.
Por otro lado, el exregulador Fonseca reprochó que “RECOPE ha pagado cientos de millones ilegalmente por impuesto de la renta al gobierno; además, se han venido cargando los combustibles con el impuesto único, donde el beneficiario siempre ha sido el gobierno; todos esos costos se trasladan al consumidor final”.
Tanto la ARESEP como RECOPE se han manifestado en contra de este pago del impuesto de la renta, y la Refinadora efectuó el pago del 2011 bajo protesta.
De acuerdo con Barrientos, las empresas públicas no deben pagar este tipo de impuesto, en vista de que estas tienen que dedicar sus recursos excedentes o ganancias a la expansión de sus servicios, es decir, tienen un uso específico; incluso la Autoridad Reguladora ha sido consistente en que no se deben trasladar esos dineros a Hacienda.
Esto porque son dineros que después la institución deberá volver a presupuestar para cubrir los proyectos previstos, o sea, se trasladará ese costo al consumidor final.


Inversiones*
El gerente general de RECOPE, Jorge Rojas Montero, dio a conocer una serie de inversiones que ha venido llevando a cabo la institución, con la finalidad de mejorar el servicio y la calidad del producto que ofrece a los consumidores, entre ellas:
-Construcción de 2 instalaciones para almacenamiento de gas licuado, una para 25.000  barriles de almacenamiento y 6 recipientes horizontales para 9000 barriles de almacenamiento adicionales, con un costo de $25 millones.
-En licitación 4 esferas adicionales cada una de 25 mil barriles, por unos $50 millones.
-Modernización del plantel de ventas de Moín con un costo de $16 millones.
-Construcción de un nuevo plantel en el Aeropuerto Juan Santamaría por $23 millones, un muelle petrolero con un presupuesto de $100 millones, 8 tanques en La Garita y El Alto por $40 millones, 7 tanques en la refinería por $35 millones.
-Está en proceso de diseño 12 tanques adicionales en La Garita por $100 millones.
-Continuación de la modernización de los planteles de El Alto y La Garita por $40 millones.
-Nueva refinería, en la cual el aporte de RECOPE es de $316 millones. Se espera que al concluirse y ponerla en operación totalmente, se satisfaga el 100% de la demanda de combustible a mediados del 2014, lo cual bajará los costos de operación y el precio final al consumidor.

*Fuente: RECOPE.

  • María José Núñez ([email protected])
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